Day off

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Me desperté, contento aunque tuviese que trabajar. Seguía sin creerme que Jimin me dijese las buenas noches con un beso ayer.

Me sonrojé al pensar en ello. Ya que estaba listo decidí ir a despertarle. Dormía de una forma muy adorable, estaba acurrucado abrazado a su almohada.

Le sacudí ligeramente, y despeiné su pelo, que era sorprendentemente suave. Sin darme cuenta seguía tocando su pelo.

-Hyung...? - era Jimin con su voz de recién despertado.

Salté y me aparté de la cama.

Mierda.

- Perdóname, solo estaba intentando despertarte porque tenemos trabajo, ya sabes.

- Pero... - estaba confundido - hoy es nuestro día libre, nos lo dijeron ayer no te acuerdas?

Mis ojos se abrieron de par en par.

-Espera... - empecé. - Me acabo de levantar a las seis de la mañana, me he duchado, he planchado la ropa, la tuya también , me he preparado el desayuno, para nada?

-No hyung! Eso solo significa que ahora al arreglarme yo tendremos más tiempo juntos.

-Desde cuándo me llamas hyung? - me reí. - De acuerdo arreglate .

- Acaso no eres mayor que yo? - me dijo, cerrando tras si la puerta del baño.

Ahora que me doy cuenta es verdad. Bueno, ese de lado. Qué podríamos hacer hoy? No quería que la situación se volviese incomoda.. Ya que nos conocemos de hace poco. Podríamos cocinar algo...? Dar un paseo?? Ver una película?? Dormir? No tengo ni idea, nunca he tenido tanto tiempo a solas con alguien, pero la cosa también es que Jimin me atrae.

-Ya estoy listo, - oí la puerta del baño.

Me giré para preguntarle que haríamos y me encontré con su cuerpo espectacular, bueno la parte de arriba era lo único que veía pero dios santo.

- Jimin.. - tragué- entrenas??

-Desde dos años o así.. Te gusta? - sonrió.

Me giré para que no viera que me sonrojaba.

-Bueno, igualmente, qué vamos a hacer?

-Tengo un juego de mesa! Podemos jugar y beber zumo, ser sanos. - sonrió como un niño pequeño.

- De acuerdo. - me reí - Iré a por zumo.
Él asintió con la cabeza.

Me dirigí, a la cocina, estaba bastante feliz. Fui a echar zumo en los vasos, perfecto. Fui a cogerlos pero, torpe de mí, tiré el primer vaso al suelo. Cogí una servilleta y empecé a limpiar.

Cuando me dispuse a servir el zumo otra vez escuché una voz bastante bonita.

I feel so nice mum, I feel so nice.

Corrí al salón . Esa letra era mía. Yo había escrito esa frase, pude reconocerla al segundo. Cómo? Quién?

Al entrar vi a Jimin, con mi cuadernillo medio roto en sus manos. Cantando. Era él. Esa voz angelical era él.

Me vio e inmediatamente dejo el cuadernillo sobre el sofa.

- Yoongi!! Lo siento mucho, lo vi al lado del juego de mesa y fui tentado al abrirlo.

-Está bien.. - asentí acercándome.

-Eres tú el que las ha escrito verdad? Cada una tiene su propio encanto, son preciosas. - Jimin no podía contener su emoción.

En verdad, yo estaba igual. Alguien había cantado mis letras. Y ese alguien no era cualquiera. Era la persona de la que me estaba enamorando. Las había cantado con una voz angelical.

- No tan preciosas como tú. - susurré

Jimin no se sorprendió. Yo fui el sorprendido. Me miró fijamente y se acercó lentamente, dejándome pensarlo.

No hice nada.

Nuestros labios chocaron, despertando una cantidad inmensa de emociones.

Sírveme // Yoonmin // SHORTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora