24

737 72 21
                                    

Maratón: "Que la borrachera este de tu lado" 3/3

Martes, 11:00 am

tres llamadas perdidas de Eduard sin o.

Lola: ¡Que dolor de cabeza!, ¿No sabes realmente lo que pase anoche Eduard?

Eduard: Buenos días, si algo así me imagine. Me escribiste muy borracha, no conocía esa parte de ti, y debo admitir que es muy graciosa xD.

Lola: ¿¡Graciosa!?, no es para nada graciosa, la resaca que tienes al día siguiente es lo peor Eduard, lo peor.

Lola: ¡EDUARD!

Eduard: ¿Te ocurre algo?

Lola: ¡NO ESTOY EN MI CASA!, no sé en donde estoy, ¡Tengo miedo!, ademas hay un perro muy hermoso pero me mira raro, ¡Eduard!, ¿En donde rayos ando?

Eduard: ¿Por que gritas tanto?

Lola: Es que tengo...

Lola: Espera, ¿Como sabes que estoy gritando?

Lola: ¿Eduard?

Eduard: te estoy esperando en la cocina desde hace media hora ;) 

-----------------vida real--------------

—¿¡Qué estoy haciendo en tu casa!? —preguntó Lola acercándose mas a Eduard, mientras que el sostenía una dulce sonrisa en su rostro.

—Pues creo que anoche me pediste que te fuera a buscar, y eso hice —Eduard estaba tranquilo y disfrutaba perfectamente de la escena, Lola era un completo desastre, su cabello estaba revuelto, sus ojos hundidos e hinchados, su boca reseca y un dolor de cabeza que no podía aguantar, aun así supo que anoche había estado demasiado ebria para recordar absolutamente todo y mas en como pudo llegar hasta allí.

—¿Que estoy haciendo aquí?, es decir como pudiste buscarme sin ver a los chicos... —Lola tenía demasiadas dudas, su mente no estaba procesando bien ya que no recordaba nada. Mientras que Eduard solo podía pensar en que anoche había sido demasiado extraordinaria para no volver a repetirse la ocasión.

—¿De verdad no lo recuerdas?, si que estabas muy borracha.

—No vuelvo a tomar mas, lo juro. Pero aun así tengo dudas ¿Tyler te vio? —Eduard sonrió. Para nada había ocurrido algo así y hasta pensó que de verdad extrañaba a sus amigos.

—Al contrario, Sabrina me abrazó y quería que la llevara a su casa, lo cual fue raro porque se suponía que la fiesta era en su casa. Estaba muy feliz.

—¿¡En serio!? —rió Lola. No podía creer las cosas que habían pasado anoche.

—Sí. Y Tyler pensaba que era un amigo fantasma, solo decía que era el único que podía verme, mientras que las demás personas estaban tiradas en el suelo diciendo cosas sin sentidos.

—No entiendo que fue lo que pudimos consumir.

—Una mezcla muy extraña, eso si es seguro —dijo Eduard en tono de burla mientras que Lola reía lamentándose de que le provocaba dolor de cabeza.

Lola temía de que ella hubiera hecho o dicho cualquier cosa que fuera verdad pero también un grave error, si Eduard se enteraba que ella volvía a sentir una chispa por él, seguramente le dejara de hablar por estar totalmente alocada; también temía de que Eduard le hubiera hecho algo malo con su estado, pero confiaba en su ex-novio a pesar de no le faltaba ganas a Eduard por el daño que le había causado Lola. Por otro lado, Eduard pensaba en su totalidad la noche anterior, en como todo reaccionaba de una manera en que ni él mismo llego a imaginarse que ocurriría de nuevo.

Lola, la de ojos claros [2] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora