Square Smile ➳ Kim Taehyung.

Cap. 45

Era un viaje largo, por lo menos en el maletero llevaba gasolina suficiente para lo que hiciera falta.

Cuando comenzó a entrarnos sueño, Charlie me indicó que me detuviera junto a un bosque. Hice lo que me ordenó y el resto de los chicos que iban en motocicleta hicieron lo mismo.

Nos detuvimos para poder dormir un poco. Jimin y HoSeok se empeñaron en encender una fogata, con ayuda de Namjoon y Jungkook. Suga se sentó en un tronco y se durmió casi al instante. Naru y Charlie hablaban de vete a saber qué cosas. Me senté en un tronco calentando las manos en el fuego de la fogata que habían logrado encender los chicos. Al acabar estaban tan agotados que terminaron igual que Suga: dormidos profundamente. Charlie y Naru no tardaron mucho en acabar igual.

Yo tenía sueño, pero no podía dormir. Al menos no teniendo a _______ en mis pensamientos todo el tiempo.

En eso, noto como alguien se sienta ami lado.

- Fue una noche de noviembre – comenzó a decir Jin, y yo lo miré atentamente – yo me encontraba cerca de tu casa, iba a ir a visitarte como siempre solía hacerlo. Tu novia apareció corriendo, asustada, un par de tipos la estaban persiguiendo – pareció hacérsele un nudo en la garganta – la protegí porque supuse que eso haría un amigo. La protegí de esos hombres por ti. Ella tenía miedo, y me rodeó en sus brazos, sentía que debía apartarla, pero no tuve el valor de soltarla porque se encontraba muy frágil. Para mi sorpresa, luego... luego me besó. Tenía miedo de dañarla si la apartaba, de traumatizarla o algo, no lo sé. Pero también tenía miedo por nosotros, por nuestra amistad. Y mires donde lo mires no fue correcto lo que sucedió aquella noche. Recuerdo levantar la vista y verte allí de pie, con las bolsas de la compra aún en tus manos, mirándonos destrozado – comenzó a llorar – recuerdo tu mirada, me ha atormentado todas las noches desde ese día. Traté de hablar contigo, pero nunca quisiste escucharme ¡y lo entiendo, lo entiendo perfectamente!. No hay excusas para lo que te hice. Cuando más me necesitabas, te dejé solo. Y me odio por ello -

No supe qué decir. Jamás había escuchado su versión de la historia. En realidad jamás había escuchado otra versión que no fuera la mía misma.

- Te juro que no he podido vivir en paz desde ese día – sollozaba Jin – perdóname, por favor, necesito que me perdones -

Mis ojos se llenaron de lágrimas. Él realmente se arrepentía de lo que había hecho, aunque al parecer no fue al cien por cien su culpa.

"_______ lo habría perdonado"pensé, y recordé las palabras que hace poco ella me había dicho "Aveces, lo único que uno necesita es recibir el perdón. Todos nos equivocamos, Tae... errar es humano"

No esperé más y lo abracé.

- No sabes lo mucho que me has hecho falta, amigo – le dije llorando sobre su hombro, y él sobre el mío.

- Te extrañé – me dijo – lamento haber huido, lamento el daño que te hice -

- Olvidémoslo – le dije secando mis lágrimas – comencemos de nuevo -

Jin sonrió entre lágrimas y se las limpió con la manga del suéter.

- ¿Sabes que quedas más feo llorando, no? - le dije y eso lo hizo reír.

- Yo jamás me veo feo – dijo él, presumiendo y lo empujé hacia atrás, para que se cayera del tronco.

Jin cayó de nalgas en la tierra y se puso de pie dispuesto a perseguirme.

- Ahora verás lo que te espera, alien – me dijo corriendo tras de mi.

Recordé que Jin me apodaba así aveces. Me agradaba, me recordaba los buenos tiempos que viví antes de que todo se volviera una...

- ¡Mierda! ¡cuidado! - me advirtió Jin justo a tiempo porque casi la piso.

Nos echamos al suelo a reír. Era bueno tener a mi mejor amigo de vuelta.

_______ se alegrará mucho cuando se entere.

Narra Suga

Desperté en mitad de la noche porque escuché unos ruidos en el bosque, a unos metros de nosotros. Tomé un bate que robé (digo, tomé prestado) de la casa de Charlie y caminé lentamente. Estaba todo oscuro y apenas podía ver lo que había delante de mis pies, por lo que mi caminar era un tanto ridículo. Pero daba igual, no necesitaba ver para poder encestarle un bate en la cabeza a un delincuente.

Y de pronto salió de unos arbustos una silueta negra y levanté el bate para derribarla.

- ¡Detente! - me ordenó Naru – soy yo, idiota -

Bufé y bajé el bate. Falsa alarma.

- Quizás deberías empeñarte en avisar si vas a salir sola – le dije molestándome por su actitud – tus ruidos me despertaron -

- Bien, la próxima vez que quiera ir a orinar en un arbusto te lo diré, para que te quedes tranquilo – me dijo con un tono arrogante.

Ésta chica estaba loca, y era diferente al tipo de chicas a las que yo estaba acostumbrado. Naru era bonita, sí, pero muy testaruda y tenía un carácter fuerte.

- Bah, me voy a dormir – le dije dándome la vuelta – que disfrutes tu ida al baño -

- ¿Sabes que eres un insensible, verdad? - me reprochó y me giré para mirarla un momento.

Me quedé callado por unos segundos, hasta que finalmente hablé:

- ¿Y tú no? -

Naru se mantuvo en silencio, así que volví hacia donde estaba durmiendo antes y me tiré en el incómodo tronco.

Unos pasos tras de mi volvieron a despertarme. Era Naru volviendo a donde estábamos todos, pero fingí ya estar dormido.

Por un momento sentí lo que me parecieron ser unos sollozos. Me puse de pie y me acerqué hacia ella.

- ¿Qué te ocurre? - le pregunté a Naru, quién lloraba con la cara escondida entre sus rodillas.

- Nada, déjame sola – contestó sin mirarme.

- Como quieras, pero vas a despertar a todo el mundo así – le dije colocándome de cuclillas junto a ella – quizás hablarlo sea una buena idea -

- No. - negó en seco y me molestó.

- Pues bien, sufre sola – le dije ya enfadado – sé lo que se siente y es pura mierda. Suerte con eso -

Me decidí a marcharme de nuevo a mi sitio pero simplemente no pude. Me acerqué de nuevo junto a Naru y me senté a su lado, hasta que ella apartó la cara de sus rodillas y me miró.

- ¿Qué estás haciendo? - me preguntó secando sus lágrimas.

- Si no quieres que esté contigo, me quedaré de todos modos – le dije encogiéndome de hombros.

- ¿Por qué lo haces? ¡no quiero! - se quejó molestándose.

- Sólo para molestarte – dije recostándome en el suelo y mirando hacia el cielo estrellado.

- Eres un idiota, Suga – me dijo cruzándose de brazos.

- Lo sé, y me encanta serlo – contesté de inmediato - ¿de qué te quejas? Tú también lo eres -

- No es cierto – negó.

Mujeres.Testarudas hasta el último momento.

HELLO! Con el pésimo inglés de Jimin :'v

¿Que opinan de estos dos? ¿De Naru?

|| SARANGHAE ||