La Carta

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Hola mamá, hola papá, si están leyendo este mensaje es porque tal vez yo ya no me encuentre con ustedes; les deje esta carta para contarles mis motivos de porque hice lo que hice, ya que lo que menos quiero es que me juzguen y me critiquen por haber actuado de esta forma. Si están leyendo esto y no estoy a su lado por favor compártanla, hagan que el mundo se entere de lo que pasa y que este mensaje sea el final de tanto caos.

Hoy como cada mañana me desperté con ganas de cambiar al mundo, o por lo menos una parte de él; muchos dirán "que estúpido es este chico" pero, yo sé que si puedo hacerlo, al final todos podemos, solo hay que intentarlo.

La sonrisa en mi cara me dice que hoy será un gran día, que ese tricolor de mi gorra hará que el mundo entienda quienes somos, y que sin importar lo que venga, seguiremos luchando hasta el final. Nunca he sido de esos chicos broyeros (peleones) que por todo quieren salir a las calles a protestar, pero soy joven, y tengo tantas metas por cumplir, que lucharía hasta la muerte solo por ellas; sé que la mayoría de los venezolanos critican a esos jóvenes que salen a protestar en las calles pero, ¿alguna vez te preguntaste porque lo hacen?

Lo hacen porque tienen sueños, así como tú y como yo. Sueños de despertar en un futuro donde puedan vivir tranquilos, donde no tengan que preguntarse ¿Qué comeremos hoy?; donde puedan salir a las calles sin tener miedo de ser asesinados, violados, o robados; un lugar donde simplemente se pueda ser feliz; donde se pueda salir a la calle y gritar ¡seremos padres!, sin el miedo de que tu hijo posiblemente mañana no tenga de que comer; yo creo en un futuro así, pero sé que debo luchar por ello.

Luchare porque ya no hay nada más que hacer, porque no me resignare a perder la vida lanzado en una cama esperando a que alguien me traiga de comer; o con la esperanza de que alguien me regale unas simples limosnas por quedarme allí acostado. ¡No!, ese no soy yo, y no juzgo a los que hacen aquello pero, yo se que valgo mucho más, y no me quedare viendo como el mundo se viene abajo sabiendo que yo puedo ayudar a sostenerlo.

Yo quiero volver a esa Venezuela en la que todos éramos hermanos, aquella en la que todos esperábamos diciembre para comer hayacas y pan de jamón; aquella tierra bonita donde unas buenas cachapas con mantequilla y queso le alegraban el día a cualquiera; aquel pequeño rinconcito del mundo donde antes de dormir podías comerte una buena arepa.

Es que me da tanto dolor ver como todas las sonrisas se desvanecen, dejando en su lugar una cara triste y llena de dolor; ¿hasta cuándo?, ¿acaso nunca saldremos de esta?, parece que los días se van y con ellos miles de sueños se desvanecen. Ya no hay médicos, ni ingenieros, ni abogados... solo jóvenes vagando por las calles buscando algo de comer entre la basura, resignados al no poder conseguir un trabajo que les dé lo suficiente para sobrevivir.

¿Es que no lo ves?, nos quedamos sin futuro; porque el futuro está en aquellos niños que están muriendo desnutridos, o que no pueden estudiar porque no tienen para comprarse un cuaderno. ¿Te parece justo eso?, pues a mí no; porque en mi niñez yo podía ser lo que quisiera, y mis padres siempre encontraban la forma de comprarme lo necesario; pero eso ya no es posible, porque si compras un cuaderno, un pantaloncito, o un juguete, posiblemente ya no te alcance para comer.

¿Es más fácil juzgar al que sale a pelear, que juzgarte a ti mismo por no hacer nada?...

Es tan difícil escribir esto sin que las lágrimas comiencen a salirse de mis ojos, más aun cuando sé que allá afuera hay una mujer que llora todos los días porque ve como todos mis sueños se van a los más profundo de un abismo, y un hombre que suda hasta la última gota en un trabajo solo para poder pagar unos estudios que cada vez se denigran más.

Ya ni siquiera puedo pensar en mí, solo pienso en los niños que pronto vendrán a este mundo y no tendrán la dicha de conocer aquella Venezuela hermosa en la que yo crecí; en aquellas personas con cáncer que agonizan cada vez más por falta de medicamentos; en aquellas familias que lloran porque uno de ellos se cansó de todo esto y se terminó yendo lejos, lejos de las caricias y el amor que solo le puede brindar la familia; solo pienso en ti, que hay donde estas no sabes si realmente algún día podrás alcanzar tus sueños.

Hoy yo salgo a luchar por mi Venezuela bonita; por esa sangre tricolor que corre por mis venas, sangre bombeada por un corazón lleno de amor, esperanza y fe; y tú no te preocupes, porque te aseguro que si estás leyendo esto es porque yo ya no estoy, pero en mi lugar quedo la esperanza de volver a ser lo que un día fuimos.

***

Este mensaje va dedicado a todos esos venezolanos que salen día a día a pelear por un futuro, y para todos aquellos que murieron en medio de esa pelea.

Este mensaje es para ti, que lloras todos los días porque ves como tu vida se desvanece. ¡Levántate!, y ten fe, porque sé que pronto saldremos de esta.

A todos esos hermanos que están fuera del país solo les digo que preparen el pasaje de vuelta, porque nosotros aquí les estamos preparando una bienvenida para cuando todo esto acabe.

Y si tú no eres venezolano, espero que este mensaje te llegue al corazón y que por un momento te pongas en el lugar de cada uno de nosotros, y comprendas que si todos nos unimos haremos de esta pelea algo mucho más sencillo.

Mi Venezuela linda tú lo eres todo para mí, y sin importar que tan difícil sea, yo luchare.



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⏰ Last updated: Aug 29, 2017 ⏰

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Sangre TricolorWhere stories live. Discover now