UN OMEGA PARA DOS DICTADORES/yaoi/

CAPITULO 1

Narrador ¿?

Hola soy Ángel grey soy un omega de 19 años, que estudia su segundo semestre de diseño en la universidad más prestigiosa del país, gracias a una beca que conseguí con ayuda malvada de mi amigo, pero después les contare lo que hizo para ayudarme a entrar, y bueno por si quieren hacerse una idea de cómo soy, podría decir que personalmente soy algo perezoso y distraído, aunque eso no evita que me esfuerce en mi estudio ya que si pongo todo mi empeño en mis trabajos, no tendré que esforzarme más después para arreglarlos o estresarme en salvar mis semestres, continuando me gustan las pelis de comedia y ciencia ficción, también el arte, la música, los dulces, leer buenos libros y el anime, ya saben un chico normal y sencillo que no destaca mucho, excepto por mi apariencia.

Para que se hagan una idea de mi peculiar aspecto les diré; soy delgado, mido 1.66, no soy el más alto de todos lo omegas pero tampoco soy el más bajo, como les decía mi piel es algo pálida o bueno, más bien blanco como leche me dicen algunos pero es debido a que trato de evitar la luz del sol, ya que me causa dolor de cabeza, mi cabellos y ojos son policromáticos ósea de distintos colores, mi ojo izquierdo es de color azul y el derecho es rojo, la mitad izquierda de mi cabello es de color negro, y la mitad derecha es de color blanco, lo que me recuerda que en mi infancia me decían el hijo de Cruela de vil, así es mi apariencia aunque casi olvido mis orejas, todos en mis país somos licántropos ósea hombres lobo, y todos tenemos orejas ya seamos omegas, betas o alfas, y bueno también mis orejas son algo diferentes que las demás. Las orejas de los omegas son redondas y pequeñas como las de un osito, los betas tienen orejas del color de su cabello que se parecen a las de un perro, por último las orejas de las alfas, las cuales son puntiagudas y grandes como las de un lobo, y están mis orejas que van a juego con mis cabellos, siendo una negra y la otra blanca, lo que las hace diferentes es que son como de un gato.

Podría decirse que no soy muy común comparado con los demás, pero no me molesta serlo me agrada tener cosas únicas, aunque admito que todas las miradas que a veces recibo me incomodan, se preguntaran porque les digo todo de mi? pues les diré, quiero que me conozcan un poco y nos llevemos bien, que más podría ser?.

Narrador omnisciente

Ángel se encontraba recostado en su pupitre, después de un agotador y casi imposible examen final, el cual había aprobado gracias a noches en vela estudiando, y permaneciendo despierto gracias a muchas tazas de café.

-bueno ya termino esta tortura, ahora podre tomar mis vacaciones en paz, no quiero ver otro examen jamás- dijo para sí mismo mientras guardaba sus plumas y demás materiales, sin notar que su profesor se acercaba hacia el mientras estaba distraído.

-lo hiciste bien Ángel, tu examen obtuvo la nota más alta, ya no tendrás que preocuparte tanto el siguiente semestre- que su profesor le dijese eso, le dio mucha paz y alegría al chico que vio esas noches en vela como un tiempo no perdido, sin pensarlo el joven bicolor, literalmente salto de alegría olvidando su cansancio y abrazo al profesor, también olvidando que estaba aún rodeado por sus compañeros de clase.

Su piel crema se volvió roja por la vergüenza, todos sus compañeros lo estaban mirando, he incluso su profesor estaba paralizado en expresión de sorpresa, se apartó rápido y en un autoreflejo agacho la cabeza, -lo siento mucho profesor me deje llevar -en su posición, no notaba que el profesor estaba igual de sonrojado, además de que un pequeño bulto empezaba a notarse en su parte baja, -no hay problema Ángel, me elegra que estés feliz, chicos ya pueden irse disfruten sus vacaciones-respondió para finalmente salir del salón de clases.