Mi Obsesión (R.D.J)

capítulo 52

cerré mis ojos esperando a lo que vendría ahora...

Sus labios se acercaron, a los míos, su aliento tibio se soplaba sobre mi. Apreté los ojos. Sentí sus labios tibios y suaves sobre mi mejilla, solté un suspiro de alivio, o no lo se. Me susurro un "descansa" .

Corrí a mi habitación cuando vi a Downey subiendo las escaleras. Me sentí nerviosa, tenia los pelos de punta.

-A-amor, que haces despierto. Creí que ya te habías dormido- sonreí nerviosamente y el me miro extraño.

-baje por agua para tomar una pastilla-

-que-que tienes-

-que tienes tú, te veo exaltada, ¿paso algo?- me tomo de los hombros mirándome a los ojos.

-no, estoy bien, solo... Me siento extraña...- me encojo de hombros intentando calmarme. -puedo pasar a tu habitación- coqueteo, el me sonríe.

-solo unos segundos- me advierte. Riendo.

Río, y rodeo su cuello con mis brazos, uniendo nuestros labios, el me besa pero pude notar que mantenía los ojos abiertos, mirando detrás de nosotros. Mis manos acariciaban su pecho. Se alejo y me tomo de la mano, entramos a su cuarto y cerro con seguro, me senté en la cama cuando el se abalanzó sobre mi, deborandonos los labios de ambos.

-no sabes cuanto te extraño- jadeo mientras besa mi cuello.

-te deseo tanto- me mira jadeando.

Le sonrío y me quito la blusa, el me mira solamente.

-demuéstrame. Cuanto me deseas- pase mis manos por su cabello uniendo de muevo nuestros labios apasionadamente.

-estas segura?- se separa. -y si... Nos... Ya sabes- se encoje de hombros. -nos oyen- se sonroja y río.

-para eso existen las almohadas, no haré mucho ruido- se sonrojo de nuevo.

Se levanto y se quito la playera, volvió a besarme tocando mi cuerpo, en verdad necesitaba esto.

Nuestros labios bailaban a la par, nuestras lenguas jugaban y luchaban, sus dientes se clavaban en mi labio inferior, jalándolo como si fuese a desprenderlo, haciéndome gemir de dolor y placer. Besos húmedos recorrían mi torso y pechos.

Entre mas caricias, el resto de mi ropa estaba ya en el suelo, pero Robert aun seguía vestido.
Giramos, quedando yo sobre el, besando su cuerpo, perfecto, que cada vez mas me enloquecía, baje a sus pantalones, desabrochandolos con mis dientes, quitándole el resto de la ropa de un jalón, ahora dejándolo expuesto como yo lo estaba.

No dude ni un segundo en atrapar su miembro erguido en mi boca, penetrándola y succionando cada vez que salia.
Sus gemidos eran música para mis oídos, me encantaba verlo así, expuesto, siendo mi víctima, era fantástico, cada vez que movía sus caderas para penetrar hasta mi garganta dejándome sin aliento.

La almohada estaba sobre su rostro, ahogando sus gemidos guturales, mientras su mano libre controlaba mís movimientos tomándome del cabello.

Mi mano jalaba de arriba a abajo su miembro, mientras mis labios succionando si piel en su abdomen.

Me jalo del brazo, llevándome a sus labios, me coloque sobre el, sentándome en su vientre, inclinándome para besarlo profundamente.

-ah!- gemi al sentir su miembro grueso entrar fuertemente en mi.

Me senté por completo sobre el, moviéndome lentamente mientras miraba su rostro que reflejaba placer.

Realmente necesitaba esto, lo anhelaba, a mi mente venían todos los momentos placenteros que el y yo pasamos, excitandome mas, haciendo que me moviera aún mas rápido, gimiendo el tapo mi boca, apretaba mis labios para que ningún sonido saliera de mi.