Gotham Kings 2: Life Loves Villains.

Capítulo Diecisiete: "Viejas amistades".

Lily recogía su cabello lentamente frente al espejo del baño de una gran mansión. Observándola desde la puerta se encontraba aquella pelirroja, habían mantenido contacto desde que la pelinegra fue obligada a abandonar el país y se habían vuelto mejores amigas.

Lily caminaba por las calles de Gotham con una capucha, bastante extraño siendo las doce del mediodía pero teniendo en cuenta que en esa ciudad llovía la mayoría de los días era lógico.

Entró a uno de los barrios más ricos e hizo ta-te-tí intentando adivinar la ubicación de Poison Ivy.

Abrió la ventana de una de las mansiones y rió al encontrar al dueño a punto de mantener relaciones con la sirvienta.

-Oops, casa equivocada- escapó antes de que al pobre hombre le diese un ataque al corazón.

Dicen que la tercera es la vencida, pero Lily tuvo suerte en la décima mansión.

-Tú- la señaló- te estuve buscando, malcriada.- Ivy se volteó rápidamente y se tiró a los brazos de la pelinegra, quien nunca fue muy cariñosa pero esa vez lo dejó pasar.

-¿Sabes algo?- se miró por última vez en el espejo.
-Creo que deberías dejar de buscarlo. Es imposible localizarlo, se ha esfumado.
-No puede ser posible.
-¿Por qué?
-Porque Jerome ama ser el centro de atención- sonrió.