Avalon Carter es una chica de dieciséis años que decide escribir un diario en el cual relata diversas historias de sucesos que ha experimentado a lo largo de su trayectoria por la vida y la han llevado a ser tan rara. Cada incidente es aún más aloca...
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Hola personita que se encuentra leyendo mi diario, espero que te encuentres muy bien ya que en este capítulo hablaremos del amor. Bienvenidos sean todos, a la quinta historia.
Creo que todo habitante del planeta Tierra ha sido flechado por cupido alguna vez, ningún ser humano ha logrado escapar del amor. La verdad es que, muchos desearían que este sentimiento no existiera, ya que por lo dicho anteriormente, no pueden librarse de él y a todos no les va tan bien o por lo menos, no como a ellos les hubiera gustado. Obviamente yo no fui la excepción, así que lamentablemente yo también he sido una de las tantas víctimas de cupido, y he de admitir que esto viene desde que estaba muy pequeña, claro que al principio no era amor en sí, pero si llegaban a atraerme muchas personas cuando a mis amigas aún les repugnaba la idea de estar en una relación y tener que besar a alguien en la boca. Eso siempre me pareció algo súper normal en las parejas y más bien me parecía una muestra de amor muy bonita, jamás llegué a sentir asco por ver a dos personas besándose, al contrario, lo encontraba muy dulce, y ahora que lo pienso, la mayoría de los niños pequeños se sienten asqueados con todo lo referente al amor, y yo jamás pasé por eso, así que supongo que es otra cosa extraña que debemos agregar a lista de las rarezas que posee Avalon Carter.
En mi opinión, no he sido la persona más suertuda de todas al tratarse del amor y todo lo que le concierne, me ha tocado vivir ciertas cosas que realmente no se las deseo a ningún ser humano, sin importar que ese alguien que me caiga mal, ya que jamás he sido una persona capaz de desearle el mal a otra; pero tampoco me arrepiento de todo lo que haya llegado a suceder, todo esto me ha ayudado a prender muchas cosas que me han sido útiles para tratar las relaciones que he tenido recientemente, y además todo tiene una razón y consecuencia en esta vida, así que todo lo que sea que haya tenido que vivir anteriormente tiene su argumento y actualmente me encuentro de acuerdo con que hayan sucedido, porque en ciertas ocasiones es necesario recibir un pequeño golpe de la realidad y así aprender que no todo es color de rosa y que muchas veces las cosas no saldrán como se hubiera esperado. A veces, incluso puedes darte cuenta de que la culpa es tuya y que la situación tomó otro rumbo porque tú la desviaste.
Muchas veces necesitamos pequeños golpes de realidad para poder entender que hemos hecho algo mal. No se sientan mal consigo mismo si han cometido un error, la clave es aceptarlo y aprender de él para no volver a caer en lo mismo.
Solo tenemos que dejar de ver las cosas como si hayan sucedido para castigarnos, son simples enseñanzas necesarias para todo ser humano, claro que algunas las recibirás como consecuencias de algún acto que quizás no debiste haber realizado, pero igual no debes tomártelo como si la vida te estuviera castigando por ello, solamente está intentando hacerte reflexionar y como he dicho anteriormente, a veces es necesario que no sea de la mejor manera para poder entender la lección.
Damián es el nombre de la primera persona que logró enamorarme de verdad. Lo conocí cuando tenía diez años, él era un año menor que yo así que por lo tanto él tenía nueve en ese entonces. Como yo no vivía con mi madre, mi abuela y yo viajábamos en todas las vacaciones de verano y/o navidad, para que yo pudiera pasar tiempo con ella y además viera a mi tía, la cual es, desde el momento en que llegué al mundo, como mi segunda madre. Esta recientemente se había mudado a un conjunto residencial muy lindo a las afueras de la ciudad en la que vivía anteriormente, y tomó la decisión de que de ahora en adelante mi abuela y yo pasaríamos todas las vacaciones de verano y/o navidad en su nuevo apartamento; obviamente yo no conocía a nadie y como tendría que vivir unos cuantos meses allí, necesitaría de la compañía de alguien de mi edad para poder entretenerme un poco. Por lo tanto, inmediatamente llegamos al lugar, lo primero que hice fue almorzar rápidamente e irme a dar un paseo por toda la zona para poder inspeccionar minuciosamente el sitio donde pasaría todas las vacaciones.
