capítulo dieciocho

6.5K 442 15
                                    

Tres meses después.

Los días pasaron luego del matrimonio, Amelia y Cristiano se fueron a vivir a una casa nueva, mi madre y yo seguimos en el departamento. La convivencia a sido horrible, ella piensa que yo soy su empleada y me obliga hacer todas las cosas. Las náuseas y vómitos son historia. Ahora comenzaron los antojos, gracias a Mary y Max cada  uno a sido cumplido sin ellos no se que haría.

De Cristiano no he sabido mucho, sólo lo veo llegar a la Universidad y luego no lo veo en todo el día. Quizá así se a mucho mejor, aún que mi prima piensa que ya es tiempo de decirle lo del embarazo.

Mi vientre comienza a notarse cada vez más, he comenzado a usar poleras un poco más anchas de lo normal. Los pantalones ajustados ya no van conmigo.

Alison y su hermana son cosa  del pasado o al menos eso creo, no he tenido problemas con ellas y espero que siga así.

Hoy es el segundo control con la ginecóloga, el primero fue cuando tenía 8 semanas de embarazo, Mary estuvo a mi lado. Cuando escuchamos su corazón lloramos juntas, era la cosita más pequeña que había visto en mi vida.

Ahora voy camino a la consulta, sola. Mary no podía faltar a la Universidad, y a Max  no podía pedírselo aún que es un gran amigo siento que este no es su lugar, es el de alguien más. Alguien que no sabe que tendrá un hijo, alguien que está viviendo su vida de casado.

-Anabel Ferre.- dice la enferma.

-Aquí.- digo mientras levantó la mano.

-Hola, soy Carolina la nueva asistente de la doctora Francisca.

-Mucho gusto.-

Entramos a la sala y ella me da las instrucciones.

- en un momento estará  aquí la doctora, acuestate en la camilla baja un poco tu pantalón y sube la polera.

Hago lo que me dice, cuando me estiró en la camilla miró todo con atención.

-Hola Anabel ¿ como estas?.- dice la doctora mientras toma asiento.

-Muy bien gracias.

- como te has sentido, ¿ continúan las náuseas?.- pregunta mientras anota algunas cosas en el computador.

-No, todo bien sólo comenzaron los antojos.

-eso es genial, ahora sólo debes cuidarte bien. Te echaré un poco de gel en tu barriga y veremos que tal está este bebé.

-esta bien.- mientras ella comienza a mover el aparato sobre mi estómago miro la pantalla que esta en la pared.

- ahora si se nota que estas embarazada, tu barriga está creciendo mucho.

- ¿eso está bien?.- pregunto asustada.

-Por supuesto, es normal. Si miras la pantalla podemos ver que ya está totalmente formado, se pueden notar sus brazos y piernas. Hasta su nariz.

-Si, esta hermoso, ¿ya podemos saber que es?.

- aún es muy pronto, pero lo intentaré.- dice mientras sigue moviendo el aparato.

Mientras ella, sigue buscando la mejor posición para ver el sexo del bebé yo no dejo de mirar la pantalla, estoy completamente enamorada de lo que veo.

-es una niña.- dice la doctora.- no alcanza apreciarse muy bien, pero estoy casi segura que será una hermosa niña.

-una niña.- digo mientras lágrimas corren por mis mejillas.- Gracias.

-esta todo muy bien con ella, ahora te daré algunas vitaminas y las indicaciones que debes seguir hasta el próximo control.

-Muchas gracias.

Lo Hice Sin Pensar Where stories live. Discover now