17 semanas.
Santorini, Grecia.
Las cortinas se abrieron de golpe dando paso al sol de medio día.
Sakura se cubrió el rostro con una almohada y Tayuya se escondió entre las sábanas.
¡Sakura! - llamó en voz grave, ambas estaban tan aturdidas tanto por la resaca como por el sueño que juraban haber escuchado a Minato.
Tayuya se incorporó de golpe tratando de ubicarse pues su cabello cubría su rostro, en el acto arrojó a Sakura al suelo y las sonoras carcajadas de Naruto las trajeron un poco a la realidad.
¡Maldita sea! -Bramo Sakura sintiendo el dolor de cabeza, tanteo hasta encontrar la almohada y la arrojó según su táctica a donde Naruto pero sólo logró darle a la mesita.
¿Donde esta el respeto por tu hermana? - Se incorporó y noto la presencia de Sasuke. Realmente no se sintió avergonzada pues el dolor de cabeza era su prioridad.
Largo - Sasuke río o eso creyó haber escuchado, ambos salieron de la habitación.
Sakura - Llamó Tayuya - ¿Por qué siempre después de una borrachera acabo en tu cama? - Sakura comenzó a reír. Tayuya y ella habían sido amigas desde los 17, era la amiga más cercana a parte de su asistente, fuera del trabajo eran simplemente Sakura y Tayuya. Mejores amigas.
Son las doce y treinta - miro el reloj de la pared. - Mi padre nos citó a la una, al menos le debo mi cabeza a Naruto. No hubiéramos despertado sí no hasta las dos. -Tayuya asintió pero se dejo caer de nuevo en la cama escondiendo el rostro en la almohada.
Sakura tomó la almohada que le había lanzado a Naruto y la arrojó a las piernas de su amiga. En un intento de Tayuya por devolverle el golpe acabó en el suelo y no tuvieron más opciones que arreglarse.
Estaban todos en la playa, Naruto permaneció en la plataforma de madera que Minato pidió instalar, de ese modo Naruto permaneció cerca de la familia.
No pareces una mujer con resaca - Se burló el rubio en cuanto Sakura se detuvo aun lado de el.
Primero que nada soy presidenta de una empresa, segundo aun tengo vida social así que puedo perfectamente embriagarme una noche e ir a la oficina temprano por la mañana - Naruto río.
Simpre acabas con Tayuya en tu cama, no se por que se divorciaron - Sasuke casi escupe su bebida al escuchar aquello, Hinata y Jûgo los miraron de reojo.
Vale. Voy aclarar ese punto, cumplí 21 me fui a las Vegas, bebí hasta olvidar mi nombre y desperté en mi habitación con mi mejor amiga en la misma cama, teníamos un video casete y al verlo nos dimos cuenta de que nos casamos en algún lugar ilegal de las Vegas, nos divorciamos un día antes de regresar a Tokio y jamás me he puesto igual de ebria que ese día - Tayuya llegó al lugar.
Aunque sigo despertando en su cama después de una buena fiesta- Sakura negó divertida. Pero en es instante se dio cuenta de la grieta en su coraza.
18 semanas.
¿Tu hermana no ha llamado? - Kushina y Naruto estaban en el jardín.
No, ha estado rara desde Grecia- Naruto parecía algo decaído.
Me gustaría llegar a Sakura - Naruto miro a su Kushina. - Se que esta enfadada desde que te dimos la opción de dejar de intentarlo - Naruto observaba detenidamente sus facciones. Esa mujer lo había criado cuando su Madre ya no pudo.
Ella te quiere pero ya sabes qué es más difícil para ella.. siendo como es - Kushina le sonrió triste.
Ojala tu hermana me perdone- Naruto recibió la caricia de su madre.
Por que Kushina era eso para él.
Se acerca la fecha - Kushina asintió comprendiendo lo que significaría.
19 semanas.
Dile a momuchi que si no me entrega el pedido antes del martes voy a tener que reemplazarlo - Tayuya anotaba. Últimamente Sakura se había aislado en el trabajo, incluso había rechazado las llamadas de Naruto, no había ido a verlo. Eso preocupaba a la chica por cómo tomaría el aniversario de la muerte de su Madre.
¿Tayuya? - Sakura la miraba sin expresión. No se percató que dejó de mover el lápiz y privó sus sentidos por preocuparse.
Naruto llamó de nuevo. No puedes seguir así - Lo soltó. Era su deber como amiga reprenderla, nunca había mezclado lo personal con el trabajo pero sentía que Sakura se extralimitaba.
No tengo tiempo. No mezcles las cosas - Regreso su atención al monitor.
Llama a Shikamaru, debo revisar unas aclaraciones - Tayuya decidió tomar la iniciativa.
Si no le llamas a Naruto en este instante renunció. - Sakura la miro asombrada pero su semblante cambio a serio en segundos.
Nadie es indispensable Tayuya - la chica perdió color, sabía que las cosas afectaban a Sakura más de lo que aparentaba pero nunca creyó que incluso a ella la excluiría con tal de no lidear con sus problemas.
Eres increíble Sakura Namikaze, Tu hermano esta ahí esperando por ti, Kushina-San ha hecho todo por que la perdones y yo.. yo te he apoyado en cada momento incluso cuando eras una estúpida niña mimada llorando por los rincones! Si en verdad ese camión te hubiera tocado Naruto jamás te habría abandonado! - Tayuya se permitió llorar. Alguien tenía que hacer entrar en razón a Sakura.
Si querías quedarte sola para poder decirle al mundo que eres la pobre niña Namikaze entonces lo has conseguido por que no pienso hablarte más! - Tayuya arrojó la libreta algún lugar de la oficina y salió de ahí.
Sakura había quedado de piedra.
20 semanas.
Sakura estaba de pie frente a la lápida con el nombre de su Madre. Tenía unos lentes de sol oscuros que ocultaban la hinchazón de sus ojos. Desde el día que Tayuya se fue de su lado decidió que no se movería de la oficina sin embargo el calendario la obligó a salir.
Creo que te he fallado Madre... - Murmuro. Depositó una rosa Blanca y se alejó del lugar, nunca había podido estar más de dos minutos en ese lugar.
Aparco en la entrada de casa de Naruto, se había tomado el día después de adelantar mucho trabajo.
Cuando entró no encontró a nadie, unas risas en la parte trasera de la casa la guíaron.
Tayuya estaba en el jardín con Naruto, Hinata, Jûgo y Sasuke.
Namikaze - Saludo la chica.
Dejate de idiotezes- La chica sonrió y corrió a abrazar a su mejor amiga, Sakura le devolvió el gesto unos segundos.
¿No hay abrazos para mi? - Sakura se acercó a Naruto y depósitos un beso corto en su coronilla.
No me gustan los abrazos - Murmuro. Todos la notaban diferente, más dura.
Como un gatito arisco con miedo a ser dañado.
Sólo he vendió a ver como estas, debo irme - Naruto sonrió triste.
Estoy bien, me alegra verte. - Sakura asintió.
Me dejan a solas con mi hermana? - Todos entraron sin chistar.
Viste a mamá ¿cierto? - Ella asintió.
Por favor no te hagas esto Sakura, no te alejes - Sakura camino hasta estar enfrente de Naruto, se inclinó y lo abrazo.
Yo no puedo vivir si te pierdo - Naruto la apretó con su único brazo funcional.
Nunca vas a perderme, siempre voy a estar contigo- Sakura se separó.
No es así... - las lágrimas salieron de su protección.
Yo vi morir a mamá, no voy a verte morir y menos así por la estúpida idea de Kushina... - alzó la voz.
Si me amas estarás conmigo - susurró.
Esta no es mi vida pero elegí ser yo.. - Sakura negó.
Debí ser yo... todo este tiempo ese es mi lugar - Se dejo caer.
Ese maldito camión... - comenzó a llorar - Yo bebía protegerte.. no tu a mi.. - Naruto comenzó a llorar.
Yo escogí salvarte. Tome tu lugar por que tu destino siempre fue otro - Naruto estiró la mano retirando los lentes de sol. Jades y azules se encontraron, por un instante el tenía cuatro y Sakura siete.
Fin del quinto mes.
