La pequeña Odette

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Yarumí se tallo los ojos mirando perpleja al peli azul sin dar credito a lo que sus ojos veían.

Era el...

Aunque.... Miro la forma desgradable con la que jugaba con la chica castaña y de inmediato hizo un gesto de confusión.

-No es lo que esperaba...- Se susurro a si misma mientras caminaba acercandose para mirarlo más de cerca.

El peliazul y la castaña comenzaron a pelear lanzandose agua de la fuente hasta que finalmente ambos se fueron por su camino por separado. El elfo se quedo aun mirando al cielo mientras estaba junto a la fuente. Pensativo y se notaba nostálgico...

Yarumí no midio su distancia asi que cuando menos lo penso término detras del elfo sin que este se diera cuenta. Hasta que volteo y de la sorpresa de verla detras de el pego un brinco hacia atrás y callo a la fuente de espaldas.

-Lo...Lo siento!!- Yarimí estaba avergonzada y comenzo a tratar de ayudarlo.

El elfo tocia agua por haber tragado un poco de ella en la caida y se sento en la fuente poco a poco con toda su melena humeda tapando  su cara.

-O...Oops...- Yarumí se quedo asustada aún y lo ayudo a salir.

-Si...Oops...- Dijo quitandose el cabello de su cara reflejando una sonrisa entee molesta y sarcastica.

La pobre norna solo se quedo asustada y al ver su cara humeda y molesta, noto que se veía sumamente tierno. Esto hizo que soltara una risita por verlo así. La risa se le contagio a Ezarel.

-Ten cuidado. A la proxima y mates a alguien...- Salió de la fuente y con su cabello humedo golpeo la cara de la norna.

-A...Auch!- Se toco la mejilla.

-Oops...- Sonrio el elfo de travesura. Lo habia hecho a proposito.

-Yo...Soy...Y...Ya...Ya...Ya...-

--Te llamas Yaya?- Sonrio y rio un poco.

-N..No! Soy Yarumí.- ella suspiro mirándolo

-No te pedi que te presentaras- sonrió de lado

Yarumí agacho su mirada avergonzada. Sin duda este elfo con el que tanto soñaba y veía en sus visiones no era nada parecido a lo que esperaba.

-Peeeeero....esta bien. Al menos ya se quien me empujo al agua....-

-No te empuje! Te asustaste!-

-Ah...no me asuste. Solo di un paso en falso- sonrió

-Que terco eres!- Bufo

-Soy Ezarel a todo esto. Te veo luego Yaya.- Se fue de ahi sonriendo y despidiendose con un gesto con la mano.

-Es Yarumí! YARUMÍ!- Dio un pisotón enojada.

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Fue un largo día de trabajo para Castiel y Lysandro. Ambos habían finalmente regresado de la disquera y se sentian exhaustos.

-No tienes que traerme a casa...pude haber pedido un uber- El pelirrojo miro por la ventanilla

(Uber es un tipo de taxi en Mexico x3 solo que un poco mas costoso)

-Quiero hacerlo más bien- el albino dirigio su mirada hacia el.

-Sabes que tengo que ir a la escuela por Odette...- El se estiro un poco por lo cansado que estaba.

-Con más razón. No pienso dejar que tu ni la pequeña Odette se compliquen.- siguio conduciendo

-Cuando tenga un auto te dejarede joder- Rio un poco el pelirojo

-Lo puedes conseguir ahora. Ya sabes... Ahora ganamos muy bien...-

-Tengo otros gastos mucho más importantes. Sabes que Odette tiene leucemia y quiero pagarle un buen médico. Y ni hablemos de la educación. Asi que... Un auto no es lo que necesito ahora. Prefiero un Uber....- Se recargo en el asiento.

-¿Y que tal si tienes que salir de emergencia? Un uber no podra llegar a tiempo...-

-Lo se...ya habia pensado en eso por eso es que contrate un servicio en el hospital para esos casos.- Miro al frente

-Castiel, a veces me sorpende como eres de terco- El albino nego con la cabeza.

-Cuando tengas hijos. Seguro me entenderas. Dejas de pensar en ti para preocuparte por ellos. Tanto que quieres que todo lo que ganas en el trabajo sea para concentirlos...- Dijo con u a sonrisa leve en sus labios. La tipica sonrisa que solia hacer de forma jugetona.

-Dudo tener hijos algun dia...- Pensó Lysandro tocándose el mentón.

-No pierdas la esperanza- Rio un poco -Llegan cuando menos lo piensas...-

-Si Lynn estuviese aquí seria mas sencillo...-

-Lo se...- La mirada del pelirojo cambio a una triste y nostálgica.

-No queria mencionarlo...lo lamento- Se preocupo el albino mirando a Castiel quien conecto su mirada con la de el.

-No hay cuidado...- Sonrio forzadamente y miro al frente y encendio un cigarrillo escupiendo el humo por la ventanilla del auto.

-¿En serio vas a fumar en mi auto?- Le reprocho el albino y en seguida ambos comenzaron a reir a carcajadas.

-Mirate tu campeón...- Le señalo de forma acusativa y luego a la cajetilla de cigarros que tenia en su saco -Somos igual de adictos- luego apago su cigarrillo al terminarlo y lo avento por la ventanilla.

-Además...esta es la unica hora del dia en que puedes fumar...es incrible que fume más yo que tu...- Esto provoco una risa en ambos.

-Ya casi pierdo el vició. ¿Sabes? Cuando estábamos en el Sweet Amoris fumaba 1 cajetilla en una semana. Y ahora una cajetilla me dura casi un mes-

-y ahora el vicioso soy yo- Rió

-Mira que giros da la vida pues...- Sonrió y golpeo su hombro

-Odette trajo muchos cambios positivos a ti...- Sonrio el albino

-Cambio mi vida por completo...- Sonrio mirando al frente

Extinto. (Eldarya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora