19

7.2K 1.3K 395
                                    

Únete a nosotros en:

https://www.facebook.com/groups/SoniaLopezSouto/

Sígueme en:

Facebook: Sonia López Souto

Instagram: @sonialopezsouto

Tik Tok: sonialopezsouto

Y si te gusta lo que lees, puedes adquirir mis otros libros en Amazon:

https://amzn.to/2XZaMdM
_____________________________________

Creo que nunca he visto a tanta gente en una de las presentaciones de Lía. Claro que es la segunda a la que asisto y la primera fue cuando publicó El autobús y todavía no era conocida. Empiezo a agobiarme un poco con la interminable fila que se forma para que Lía les firme un ejemplar, suponiendo que estaremos aquí todo el día, pero por suerte para mí, mis compañeros llegan para salvarme. No es que no quiera apoyar a Lía, lo hago, pero después de dos horas viendo cómo habla con la gente y firma libros sin parar, me apetece desaparecer unos minutos.

Después de asegurarle a Lía que regresaremos en una hora, buscamos un pub y disfrutamos de un ronda de refrescantes cervezas y buena conversación donde terminamos haciendo planes para encontrarnos el lunes en la base. Con el pasar de los minutos la preocupación va creando arrugas en la cara de Anna, no es algo que ninguno pueda pasar por alto aunque ella intente sonreír todo el tiempo. Debe ser muy difícil para ella fingir que no le preocupa que nuestra reincorporación sea inminente y nos envíen a Siria una vez más. Lo que me reafirma en mi idea de no permitir que nadie sufra de ese modo por mí. Ya es suficiente con que lo haga mi familia.

En algún momento sus ojos grises se encuentran con los míos. Puedo ver la angustia en los suyos y me siento impotente por no poder hacer nada para tranquilizarla. Le prometería mantener a Lenox a salvo si tuviese la certeza de cumplirlo pero es algo que está fuera de mi control. Del control de cualquiera, en realidad. Le guiño un ojo y ella me sonríe. Aparta la mirada y la posa en su hijo, que duerme plácidamente en sus brazos. Casi puedo leer sus pensamientos, su deseo de que el niño no quiera seguir los pasos de su padre.

-Volver contigo es la mayor motivación que Lenox podría tener para mantenerse a salvo - le susurro, ya de regreso, pasando un brazo por sus hombros.

Lenox es quien carga ahora a su hijo y parece encantado con la idea de sostenerlo porque no deja de mirar para él con admiración. Se ve radiante de felicidad cuando está con su familia.

-Lo sé - me sonríe Anna y me rodea la cintura con su brazo - Pero eso no lo hace más fácil.

-Lo sé - copio sus palabras.

-No tenéis el trabajo más seguro del mundo - continúa ella - pero sé que estáis mejor preparados que cualquiera para enfrentaros a los problemas que surjan. Preocuparse es inevitable pero también me preocuparía si Lenox trabajase en una oficina de seis a cinco. ¿Quién dice que no pueden atracarlo por el camino y matarlo para obtener su dinero? ¿O tener un accidente de coche? O que simplemente le dé un infarto por el estrés. Nadie está libre de la muerte.

-Pero nosotros convivimos con ella a diario - no quiero añadir más preocupación a la que ya siente pero tampoco la voy a engañar.

-Y estáis más preparados para enfrentarla - repite apretando su abrazo - Ser la esposa de un militar es duro, Keenan, pero no lo cambiaría por nada. Si vivir preocupada por Lenox es el precio por tener su amor incondicional, lo acepto. No me arrepiento de haberle entregado mi corazón y lo haría de nuevo aún sabiendo el miedo que me causa pensar que cualquier día puedo recibir la visita de alguno de vuestros compañeros con la peor de las noticias. Verlo regresar a mí en cada ocasión compensa todo lo demás.

Nunca conmigoWhere stories live. Discover now