El balcón de al lado

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Para cuando regresé con lo que me pidió casi dejo caer todo ahí. Estaba viendo a mi ex novia entrar al local. Esto no pintaba nada bueno. Le entrego las cosas a Milly y ya estaba al borde de un ataque al corazón. Jade estaba en la barra. No me había visto y esperaba que la loca peli roja teñida tampoco. Pero sería imposible ya que se sentó en las mesas frente a la tarima con su grupo de amigas.

Estaba jodido. 

Busque una forma de escaparme, pero Milly no me dejo y tuve que regresar a la tarima bajo la maldita mirada de esa chica. Traté de tocar como si no estuviera ahí. Localicé a Jade en las mesas de atrás con otras chicas. De vez en cuando lanzaba miradas hacia ella, pero sólo obtuve la mirada de dos de ellas. Traté de pasarme la noche entera tocando para no tener que hablarle, pero la garganta me dolía y tenía que tomar un break. El cual aprovecho para acercarseme. 

—Tiempo sin verte, cariño.

—No mucho, por desgracia. 

—Con todo el trabajo que me costo encotrar donde trabajabas...—se hace la dolida.

¿Eso no es acoso?

—Cielos, cortalo ya Esmeralda. 

—Es que no quiero que te vuelvas a ir. —intenta tomar mis manos, pero no la dejo y las meto en mis bolsillos. 

—¿Que parte de no quiero volver a verte no te quedo claro? 

—Cariño, es que fue un error... No debí hacer eso, lo siento. —si no fuera yo, cualquiera se tragaría todo lo que decía con ese tono tan dolido. 

Siempre dicen que los chicos somos los malos en los cuentos, pero ¿Acaso no tenemos derecho a ser bordes cuando encuentras a tu novia con tu hermano? No obstante de los contantes engaños. Se que fui muy masoquista al regresar con ella tantas veces y perdonarla, es lo que pasa cuando eres ciego y no quieres ver la realidad. Me hice el que no sabía nada durante demasiado. Sufría por alguien que nunca quiso estar conmigo después de unos pocos años. 

—Pero de verdad estoy arrepentida. Esos regalos eran para que vieras lo mucho que de verdad lo estoy.

—Estoy harto de ellos. ¿Cuantas veces tengo que repetirtelo? 

—Es que sé que aún me extrañas como yo a ti, por eso los mando, para que sepas que siempre te tengo presente todo son cosas que te gustan ¿No? Además conociéndote seguro no has vuelto a saber lo que es ser besado por otra mujer. 

Si supieras que mi vida sin ti es perfecta. 

—No te creas tanto. Y para tú información si tengo a alguienregresévida. 

—¿Acaso eres gay? Dudo que otra mujer te haga caso, por eso te estoy diciendo que regresemos, seguro extrañas tener una buena mujer en tu vida. —se acerca más a mí acercando sus labios a mi oreja.— o en tu cama. 

Y antes de poder hacer nada me besa. Hambrienta de deseo, lujuria en todo movimiento. Devolverle el beso sería cavar mi propia tumba. No sabía si Jade estaba aun en el local. No iba a hacer eso. Se pega más a mi buscando alguna respuesta que claramente no consigue. La separo de mi bruscamente, pero tenia sus dedos aferrados a mí y era difícil alejarla sin lastimarla. Cuando se da cuenta que no le correspondí se aleja.

—Con permiso. —la voz de Jade. Palidecí en cuanto la escuche. Y maldije de tantas formas en mi interior. 

Busca algo en el asiento donde estaba hace un rato.

—Jade... —intenté decirle algo, pero no pude.

Cuando localiza lo que había olvidado sale disparada sin mirarme ni decirme nada. Maldita sea. Corro tras ella, pero antes de buscarla por las calles nocturnas la mano de Esmeralda me detiene. 

—Esto no acaba aquí. Tú regresaras conmigo. 

—Suerte con eso. 

Salgo disparado en busca de mi vecina. Tenía que darle una explicación ¿No? 

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Me aman, lo se 😉😉😉

XoXo 

        —Reimei-