7.

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Al escuchar la voz de mi madre llamándome, me levanté rápidamente, abrí la puerta y bajé, sin decirle nada a Pete.

Mi madre estaba esperándome justo al lado de la escalera.

– ¿Qué pasa? – Le pregunté.

– ¿Viste la hora? Ya es algo tarde – Soltó una pequeña risa. – Será mejor que vayamos a casa, ¿No? –

– ¿Recuerdas que no tengo celular, cierto? – Me reí.

– Ah, cierto. – Al parecer no le dio mucha importancia. – Pero bueno, ¿Vamos? –

No dije nada más y solo le sonreí. La mamá de Pete y la mía se despidieron y salimos de la casa.

Al estar afuera, mientras mi madre se subía al auto, vi a Pete por la ventana, me estaba mirando, cosa con la que me sentí algo incómodo. Solo le sonreí y me despedí con un gesto para luego subirme al auto y escuchar todo el camino a mi mamá decía lo bien que se estaba llevando con la mamá de Pete.

Al llegar a casa, solo subí a mi cuarto y me dormí. Sin siquiera haberme puesto pijama, había sido un largo día.

...

Me levanté temprano al otro día, ya que tenía escuela. Y si, aún. Este era mi último año de sufrimiento escolar, para después pasar al sufrimiento universitario.

7:15 am.

Me vestí rápidamente y me fui a desayunar con mi madre. Me saludó y con una sonrisa me sirvió el desayuno.

7:30 am.

Terminé de comer y me levanté de la mesa rápidamente agarré mis cosas y salí de la casa.

7:40 am.

Iba casi llegando a la escuela.

8:00 am.

Ya estaba en las aburridas clases.

2:00 pm.

El día se había pasado bastante rápido y ya era la hora de almuerzo en el colegio, solo quedaban unas 3 horas de clases después de esto.

Me dirigí junto con Ryan al comedor, mientras me iba contando lo feliz que estaba por qué su novia (A la cual no quería para nada.) lo había dejado. Cosa a la que yo no le presté mucha atención, ya que, hace un rato que venía pensando todo lo que había pasado ayer con... Pete.

Cuando llegamos al comedor, nos acercamos a una mesa para poder sentarnos a comer.

– Que tal, Patrick! – Me saludó Andy.

No me había dado cuenta de que el estaba ahí.

– Hola, pequeño bebito rubio. – Me dijo...

Ah, sí. Gerard.

– Hola, chicos – los saludé con una sonrisa y me quedé mirando al "vacío".

– ¿Que onda, patrick? – Me preguntó Gerard. – Te notó algo... distraído.

– ¿Ah? ¿Distraído? No, no, claro que no – Sonreí algo nervioso.

Confused [Peterick].Where stories live. Discover now