Epilogo -Parte I-

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EPILOGO
-ACTUALIDAD -

Kendra: Y así fue como paso toda la historia con tu papá Julieta. 
Julieta: Mi papá era romántico – dijo riendo – 
Kendra: En la mayoría de tiempo era un idiota. 

Julieta comenzó a reír aún más fuerte, ella es muy igual a Zayn, en muchos sentidos, ahora tiene 15 años, son muchísimos, y más que nada estoy orgullosa de haber podido callar la boca de muchos porque pensaban que no duraríamos porque éramos muy jóvenes. ¿Qué sabían ellos del amor? 

Julieta: ¿Papá peleaba bien? 
Kendra: Peleaba bien, cuando no era contra Alejandro. 
Julieta: ¿Qué fue de Alejandro? 
Kendra: La verdad es que no se Julieta, él simplemente se alejó y se lo agradezco muchísimo. 
Julieta: Si que bueno, y que bien que le diste una FINIQUIT mami, eso fue lo mejor, eres como un modelo a seguir. 
Kendra: Ya Julieta, no te estarás poniendo igual de romántica que tu padre ¿O sí? 

Julieta hizo cara de asco y negó con la cabeza, era hija única porque se nos había resbalado el camarón en el coctel. Nunca creímos que saliera embarazada y fue cuando yo tenía 21 años, por lo tanto, actualmente tenía 36 años. 

Julieta: ¿Y querías a Alejandro? 
Kendra: Uff! Y mucho – dije sincera – 
Julieta: ¿No crees que hayas exagerado cuando descubriste que luchaba? Ya sabes, no era para tanto. 
Kendra: Ahora que lo veo, sé que fui muy exagerada, pero las cosas pasan por algo Julieta, si yo no hubiera pensado así, quizás me hubiera casado con Alejandro u otro que no fuera tu papá. 
Julieta: Eso es cierto mamá – dijo asintiendo – sabes, cuando platicaste lo de mi abuela Nora, era como si hablaras de ti. 
Kendra: Supongo que somos muy iguales. 
Julieta: Solo que ella es aún más graciosa gritando “Ven aquí pequeño insecto molesto” 
Kendra: Lo peor es que no te lo dice a ti, sino a Zayn. 

Ambas comenzamos a reír ante la idea de un Zayn Malik molesto, que realmente era la mayoría de tiempo. 

Zayn: A mí me encanta llegar de trabajar y escuchar esas risas. 

Volteamos a verlo cuando entraba por el living de la casa y Julieta hecho a correr a él y a abrazarlo. 

Julieta: ¡Papá! 
Zayn: Bella Julieta. 

La abrazo fuerte como siempre y sonreí, como siempre, era ridículo, siempre estaría feliz de verlos a ellos dos felices, eran mi vida. 

Julieta: Voy por mi celular papi – dijo sonriendo y dándole un beso en la mejilla y salió corriendo – 
Zayn: Adolescentes y celulares. 

Ruedo los ojos y Zayn me sonríe, se va a acercando de manera graciosa y me carga del sillón y río feliz, es mi hombre. 

Zayn: ¿Cómo ha estado esta hermosa mujer? 
Kendra: Esperando su hombre – dije dándole un beso en los labios – 
Zayn: ¿Y quién es ese hombre? 
Kendra: Alejandro. 

Zayn me baja al piso y me mira haciendo puchero. 

Zayn: ¿Qué te ha hecho acordarte de él? 
Kendra: Me he pasado toda una tarde con Julieta hablando de cómo fue que nos casamos. 
Zayn: Le hubieras dicho que en las Vegas, punto, él no tenía que salir en la conversación. 
Kendra: ¿Estas celoso Malik? 
Zayn: Mucho, demasiado, mi hija no debería saber esas cosas, ¿por lo menos le dijiste que le gane en la pelea? 
Kendra: Pero perdiste Zayn Malik, y me rompí el pie por tu culpa, ¿y quieres que te de créditos a ti?
Zayn: Mínimo, ahora me vera como un perdedor. 
Kendra: Tu hija no te vera así – dije rodando los ojos y tomando la revista que había en el sillón – ella te ama. 
Zayn: Oh – dijo sentándose en el suelo como un chiquillo y cruzándose de brazos – creo que no me gusta ser el perdedor. 
Kendra: Nunca te ha gustado – dije pegándole con la revista y comencé a reír – que malos reflejos. 

Cuando Zayn casi me va a agarrar corro fuera del Living y me sigue, me alcanza en el comedor y vemos a Julieta bajando las escaleras. 

Julieta: ¿Ya están jugando de nuevo? – Dijo con el iPhone en la mano y sin vernos – ¿Cuándo maduran?
Zayn: Cuidado con cómo me hablas jovencita – dijo Zayn arrebatándole el iPhone – 

Ambos se veían frunciendo el ceño, Julieta era más intimidante, para la mala suerte de Zayn, siempre se veía adorable en lugar de intimidante. 

Julieta: Dame mi iPhone – dijo lento y amenazante – 
Zayn: ¿Y si no quiero?

Me senté en la escalera viendo su discusión, hasta que sonó mi celular y conteste. 

Kendra: ¿Qué ocurre Nadia? 
Nadia: Dante no para de molestar – dijo irritada – 
Kendra: ¿Dante esposo o Dante hijo? 
Nadia: Dante hijo – dijo como si fuera obvio – ¿Por qué Dante esposo me molestaría? 
Kendra: De acuerdo, disculpa, ¿Y yo que quieres que haga? 
Nadia: Pues que me dejes ir a tu casa, él forzosamente quiere ir a ver a Julieta, ¿Si te das cuenta que esos niños son muy unidos? 
Kendra: ¿Esta de mal de amores? 
Nadia: Sé que tiene problemas con Katia, lo se… solo que no lo dice. 
Kendra: Entiendo, pues vente, espero que cuando lleguen, JULIETA Y ZAYN DEJEN DE PELEAR POR EL iPhone – dije gritando, pero ellos ni siquiera me voltearon a ver – 
Nadia: Estaré ahí en menos de lo que canta un gallo. 

Colgó el teléfono, me levante de la escalera y aunque sabía que me ignorarían, les avise sobre la visita de Nadia y su familia. Camine hacía la cocina, y apenas iba a cruzar y escuche a Julieta llorando, rodé los ojos y salí a ver qué pasaba. 

Kendra: ¡¿AHORA QUÉ?! 
Julieta: ¡MI PAPÁ TIRO MI iPhone! 

Voltee a ver a Zayn y él estaba con una cara arrepentida, miré al piso y estaba el iPhone estrellado, lo levante y se calló un pedazo de pantalla.

Kendra: Zayn Malik – dije molesta – Espero tengas una buena razón para haber hecho esto – dije enseñándole lo que quedaba de teléfono – 
Zayn: Ella dijo que yo era un perdedor. 

¿Qué si Zayn había cambiado? ¡NO! Zayn no iba a madurar ni en un millón de años, y me sorprendía que aún me sorprendiera yo con sus actos. 

Kendra: Estas cosas cuestan una pequeña fortuna Malik, espero estés contento. 
Zayn: No estoy contento, pero ella lo merecía. 

Julieta soltó otro grito y lloraba más, deje el teléfono en una pequeña mesa cercana y la abrace. 

Kendra: Ya July, tranquila. 

Julieta se iba relajando, y vi a Zayn suspirar y tirarse en el sillón. 
Kendra: Ve arriba, y arregla ese cabello, que lo tienes hecho telaraña, porque va a venir Nadia con los Dantes, anda. 

Julieta sorbió por la nariz y corrió escaleras arriba, esta niña tenía quince años, y se comportaba como de cinco, y gracias a su padre. 

Zayn: ¿Me vas a castigar? – Dijo Zayn con la cabeza agachada – le compro otro iPhone. 
Kendra: Sabes que no me gusta desperdiciar el dinero Malik, serás muy rico y todo lo que quieras, pero no puedes portarte como un chiquillo, parece que más que padre e hija son hermanos y se están peleando. 

Zayn: Yo no tengo hermanos. 

Mi corazón se parte al escucharlo de esa forma, me duele en lo más profundo del corazón, después de que comenzamos a vivir juntos en esta casa, como 4 meses después de casarnos, él había confesado que era extraño para el vivir solos, una extrañeza buena, que le gustaba tener compañía y que eso le hacía desear haber tenido hermanos. 

Kendra: Zayn –dije sentándome en sus piernas y abrazándolo – yo te entiendo, tranquilo. 

Zayn me abrazo y lo escuche sorber por su nariz, sonreí porque Julieta hacía lo mismo cuando lloraba, aunque Zayn no lo estaba haciendo, su machismo no lo dejaba, pero lo adoraba, adoraba que fingiera ser fuerte porque eso me daba la tarea de ablandarlo un poco y poder verlo sonreír por algo que yo hiciera. 

Zayn: Es que tu no entiendes – dijo abrazándome – tuviste cuatro hermanos. 

Reí, era cierto, tenía cuatro desastrosos hermanos, de los cuales únicamente Joshua y Alex se habían casado, Deimon y Lorenz quedaron solteros. 

Kendra: Basta tonto – dije dándole un corto beso en los labios – deja de auto lastimarte, porque vendrá Dante y si te ve llorando, las burlas no pararan. 

Zayn talló sus ojos como niño chiquito y asintió con la cabeza, me puso de pie y después el corrió arriba, ahí iba, mi pequeño gran y hermoso niño. Negué con la cabeza y camine de regreso a la cocina, busque un poco chicharrones para darles a los niños y saque salchichas del refrigerador para hacer una pequeña botana, cuando sonó el teléfono y lo puse en alta voz. 

Kendra: ¿Si? – conteste – 
Paty: Kendra hola – dijo con ese tono tan bajo que acostumbraba – llamaba para avisarte que pasado mañana se cumple un año. 

Lleve mi mano a donde me había hecho esa H en Acapulco, donde ahora estaba un tatuaje a tinta. 

Kendra: ¿Un año? – Solloce – el tiempo pasa rapidísimo. 

Paty soltó un quejido y pude sentirla llorando, oh cielos, odiaba cuando ella lloraba, entonces escuche aquel pequeño llanto de Guillermo, el pequeño niño de Paty y Harry. 

Kendra: No llores Paty – la anime un poco, aunque era ridículo cuando sentía que las lágrimas también corría por mis mejillas – es mejor que te rejales, sabes que Guillermo llora muchísimo cuando te ve mal. 
Paty: Lo extraño tanto – dijo Paty con sollozos más grandes – ¿Por qué tuvo que irse? 

Limpie las lágrimas y sentía aquella H a tinta en mi piel dolerme, la muerte de Harry había sido de los peores acontecimientos de mi vida, le amaba como a un hermano, Paty lo amaba, lo amaba con todo su corazón y ver al pequeño Guillermo era ver a un pequeño Harry. Se había ido… Harry nos había dejado antes y le extrañaban todos, su familia, hasta Zayn y principalmente, yo. 

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Ya se e_e dirán ¿Neta este es el epilogo? Pero tan solo es la primera parte :3 hay mas.. ñ_ñ

No me hables... Besame. [ZAYN MALIK]Where stories live. Discover now