|Esclava de un VAMPIRO| SUGA | BTS | TERMINADA

1

-O te levantas tú o te levanto yo - Fueron las palabras que escuché desde la cabecera de mi cama; Caleb Skyes, mi padre.

-¿Es necesario despertarme a las... ¿¡5:30 DE LA MAÑANA!? - Me froté los ojos con brusquedad, ésta gente se pasa con los horarios - Al menos mis abuelos me despertaban a una hora decente.

-Tus abuelos, ahora vives con nosotros y tendrás que respetar el horario. - Mencionó decidido aquél hombre.

-¡PERO YO SOY HUMANA, HOMBRE! - Alcé los brazos y le lancé una almohada - No es mi culpa seguir así, así que si me disculpas... - Me estaba acomodando para volver a dormir cuando Caleb tira de las mantas y en menos de 0,5 segundos, (o menos) ya me encontraba tirada en el frío piso.

-Niñita malcriada - Dicho eso, desapareció por la puerta de mi habitación.

-¿Es que ésta gente está loca?

(...)

Las 6:10 de la mañana, de la puta mañana, mi primer día de clases, mi primer día, sólo puedo decir una palabra y es; VAMPIROSMALDITOS.

-Buenos días, Kat - Saludó Liss.

-¿Que hay de buenos? - Rodeé los ojos - ¿No hay algo para mi?

-No. - Contestó Caleb.

-No te preguntaba a ti - Lo miré con mi mirada más déspota que tengo.

-No peleen, le hará mal a Jhon - Liss frotó su barriga aún inexistente, pero dentro de unos días, esa barriga estará enorme.

-¿No ha pasado ni 1 mes y ya sabes el sexo y el nombre? - Caleb abrió mucho los ojos y se atoró con su copa de "vino". ¿Quién diablos toma vino a las 6am de la mañana? CALEB SEÑORES, MI PADRE.

-¿Acaso no puedo estar más emocionada por el chiquitín que viene en camino? - Sonrió Liss.

-Mientras sea hijo de mi padre, todo bien.

-KATIE - Caleb alzó la copa de vino hacía mi dirección dispuesto a lanzarmela, pero se arrepintió cuando Liss lo detuvo - No ahora, por favor - Rogó Liss.

Una de las tantas razones por la cual odio a Caleb es simple, SE ACUESTA CON NIÑAS MENORES QUE EL, SE LAS VIOLA, CHUPA SU SANGRE Y LUEGO LAS MATA, O SIMPLEMENTE LAS DEJA EN LA CALLE, VIÉNDOLAS SUFRIR, VIVIENDO EN LA MISERIA, CALEB ES EL PEOR VAMPIRO QUE HA EXISTIDO. Me lo ha negado tantas veces que ya ni sé que creer, tengo hasta miedo de que me viole, pero sé que si eso llega a pasar él moriría, ya que según el supuesto y famosísimo conde Drácula, mi sangre es maldita, cualquier persona que desee beber de ella, morirá, se hará más fuerte e indestructible, entre otros.

Han pasado 11 años y sigo creyendo que es mentira.

Luego de la linda discusión que me gané hoy en el "desayuno", fui directo al instituto.

VAYA QUE ERA ENORME Y LINDO.

Todo bien decorado, muebles antiguos, aroma a... vampiros, un ambiente acogedor, y yo creía que iba a ser peor; pero fue todo lo contrario. ¡ME ENCANTA!

Estaba tan pegada mirando los muebles que no me di cuenta que choqué con una persona (lo típico).

-AY, LO QUE ME FALTABA - Otro vampiro más, ¿es qué todos se parecen?. Bueno, éste chico/hombre/anciano poseía unos ojos color pardo, muy lindos.

- pengampunan! - Exclamé, ¿dije eso en voz alta? Ay no.

-¿eh? Niña, que estamos en Transylvania, no en... ¿China?

-¿Acaso todos los chupasangre son tan simpáticos? - Mencioné sarcástica.

-Si, exactamente. - Sonrió coqueto - Permíteme presentarme, mi nombre es Namjoon, ¿Tú debes ser Katie, no?

^oh mi dios, ¿cómo supo mi nombre?^

-Hum, si, soy Katie, un gusto - estreché su mano contra la mía, por poco me arranca la mano izquierda, porque vaya que es fuerte éste hombre.

-Han pasado 11 años, por fin haz vuelto a tu tierra natal -

-Hum, si - Me sentía incómoda ante la mirada penetrante de Nam, era como ver al Conde Drácula; pero disfrazado de otra persona.

-Permíteme llevarte hasta tu clase - Coloca su brazo en modo gancho, como todo un caballero.

-Gracias pero, puedo caminar por mi cuenta -Entrecerré los ojos y seguí mi camino - Además, mis padres me advirtieron de que no podía hablar con extraños - Dicho eso, me dirijo al aula; B4653. Éste lugar de verdad era enorme.

Caminé lo más rápido que pude, no quería encontrarme con Nam ni hasta por si acaso.
Me dieron ganas de ir al baño; me demoré 4 siglos en encontrarlo, el lugar era tan gigante que ya se me olvidó como salir.

Al entrar al baño, una imagen de una chica con un chico, teniendo sexo duro en el lavamanos, mi expresión reflejada en el gigante espejo, el chico mirando hacia mi dirección, la chica ya muerta y tirada en el piso, mi expresión helada reflejada en el espejo, todo ocurrió muy rápido pero a la vez muy lento.

-Tú; no has visto nada - Señaló hacía mi dirección. - Si te vuelvo a ver, la pasarás mal.

Mis sentidos estaban perdidos, me estaba moviendo, pero no por mi cuenta, por una fuerza que ni yo sabía que existía. Ayúdame diosito.

La puerta del baño de "Mujeres" se cerró de golpe, reaccioné a los 10 segundos después y un dolor de cabeza se hizo presente.

^Diosito, ¿qué ha sido eso?^

(...)

-Hey, ¿y a ti como te fue? - Caleb hizo presencia en la inexistente cocina, volviendo a fastidiarme.

-¿Te importa? Mejor vete a ver a Liss y a mi hermano, procura de que ese hijo sea tuyo y no de otro.

-Necesito sangre.... -Susurró para sí mismo, pero muy audible para mi.

-Entonces ándate, nadie te quiere aquí - Susurré. - Evades todo lo que digo, porque sabes que es verdad.

-Cállate de una vez, niña insoportable - Masculló Caleb - Siempre la misma mierda, ¡deja de sacar el tema de Liss a cada rato! ¿acaso no tienes nada mejor que hacer que estar fastidiandome?.

-Sabes que es verdad y por eso explotas - Solté una risita burlona.

-Mira niñita de mier...-Caleb estaba a la nada misma de golpearme, ya que su brazo estaba alzado en el aire, listo para abofetearme, pero Liss lo detuvo con un solo movimiento.

-Basta, ya no más peleas, quiero paz en ésta casa.