Capítulo 41

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Narra Vane

-Mira, Nali está en Huelva con Ana.- Dice Malú mirando mi móvil.

-Oye, puedes dejar de mirar mi teléfono ¿no?- Digo mientras acomodo las tasas de chocolate en la mesilla.

-No, gracias, así estoy bien. Además, tu móvil, por lo tanto mi móvil cariño.- Responde mientras me hace lugar a su lado.

-A ver.- Me siento, me tapo con la manta y ella enreda sus pies con los míos. -Entonces ¿Nali fue a buscarla? Mira tú. Ojala tenga buenas intensiones con Ana, ella es una buena tía ¿sabes? Y se la ha pasado mal en el amor, no me gustaría que la vuelvan a lastimar.-

-Pues ojala, de que se gustan, se gustan, eso es obvio.-

-Bueno ya, deja mi móvil en paz, desayunemos y nos vamos. Iremos a la Bahía de los Glaciares, un barco nos llevará a recorrer de cerca todo.- Digo entusiasmada.

-¡Me encanta! Gracias por hacer esto.- Se acerca y me besa. -Oye, ¿y qué haremos cuando regresemos a Madrid?-

-¿Qué haremos de qué?- Pregunto concentrada en unos folletos del lugar al que iremos.

-Tu sabes, con lo de la prensa y demás.- Dice en tono suave.

-No puede ser, ¿otra vez con lo mismo, Malú?- Pregunto mirándola.

-No es lo mismo, ni siquiera hemos hablado del tema.-

-¿Y qué quieres que te diga? Tú sabes como pienso, te lo he aclarado varias veces. Somos un matrimonio, no quiero vivir separada de ti. Esta es nuestra vida ahora.- Digo haciendo énfasis en lo último.

-Ya lo se, Vane, pero si nos llegan a ver juntas, no tendremos paz y lo sabes. Y no me digas que no te importa, porque tú también eres celosa de tu vida privada.- Dice firme.

-Pues compremos una casa, ya te lo he dicho y mudémonos juntas, simple.-

-¿Y si nos siguen y descubren dónde vivimos?-

-Entonces ¿qué demonios quieres?- Pregunto ya enojada. -Vivimos separadas, okay, ¿Cuánto tiempo? ¿Una semana, un mes? Y luego ¿qué? ¿cuándo nos veríamos? Igual tendríamos que escondernos para poder estar juntas. Es una locura, maldita sea.-

-Amor, pero...-

-¿Quieres despistar? Sube una foto, di que estas aquí, Ana anda en Huelva, la gente debe pensar que estoy allí también, no se.-

Narra Malú

Vane se levanta muy encabronada, lleva las tasas a la cocina, voy tras ella. Va al lavabo, me acerco, la abrazo por la espalda y beso su hombro.

-Ya, mi enojona guapa. Oye, no te recuerdo tan enojona.- Digo riendo.

-Es que sacas lo peor de mi.- Dice sería lavando las tasas.

-Es que te lo tomas muy a pecho, amor.-

-¿Muy a pecho? ¿Es una broma, Malú?- Dice separándose de mi. -Mira, puede que para ti sea un berrinche de niños, pero para mi no lo es. No entiendo cual es el problema de que nos vean juntas. Sí, no me gusta que se metan en mi vida, es cierto, pero tampoco me gusta ocultarme y lo sabes. ¿Cuánto podría durarles la locura por vernos juntas? ¿Un día, una semana, un mes?-

-A ver, espera ¿recuerdas cuando pasó la locura Valú hace años? Fuiste tú la primera en estar de acuerdo con Rosa para que dejemos de mostrarnos juntas, porque querías que tu carrera crezca por ti y no por el morbo.- Digo firme y elevando un poco el tono de voz.

-Pero en esa época no éramos pareja, y claro que me molestaba que me conozcan por ser "la amiga especial de Malú", además, empezaba a salir con Inma, por respeto a ella no quería que nos vinculen, pero ahora eres mi esposa, vivimos juntas, compartimos una vida, las cosas son completamente distintas ¿Por qué te cuesta tanto entenderlo?- Dice casi gritando.

-¿Por qué te cuesta tanto entenderlo a ti?- Pronuncio de igual manera. -Vale, ¿sabes qué? Respeto tu opinión, pero no estoy de acuerdo, no quiero que mi casa este colmada de cientos de personas y que nos sigan a donde sea que vayamos. Mucho no ha costado mantener nuestra vida privada al margen, no voy a cambiar eso ahora, ¿me oyes?- Sentencio ya muy enojada.

-Vale, como tú quieras.- Responde seria. -Disfruta de la excursión.-

Saca folletos, boletos, un par de cosas mas, los deja sobre la mesa de la cocina, se quita su abrigo, va hacia el living, coge la guitarra y se va a la habitación.

Narra Vane

Estoy sumamente enojada, no me gusta que se sepa sobre mi vida privada, pero tampoco me gusta tener que estar haciendo eso, ahora mismo, no se ni como me siento, pero si se que estoy enojada.

-¿Y ahora tengo que ir sola de excursión?- Pregunta Malú entrando, encabronada también.

-Pues quieres estar sola ¿no? Empieza ahora.-

Suena mi móvil, ella lo coge sin siquiera mirar quien es, descuelga y responde con un "hola" de muy mala manera, su cara cambia de repente, me mira aun mas enojada que antes.

-Espera, ya te la paso.- Dice a quien esta del otro lado del teléfono. -Es Inma ¿me quieres decir que cojones hace llamándote?- Pregunta entre dientes y casi susurrado.

-No tengo idea.- Respondo totalmente sorprendida. -Bueno, ¿Inma? Sí, dime.-

Malú se acerca, me quita el móvil, lo pone en altavoz, se lo vuelvo a quitar, me alejo y lo establezco como antes, ella se cruza de brazos y me mira fijo, pendiente de lo que sea que digo. Sin dudas, la llamada de Inma me sorprende, no la he vuelto a ver desde aquel día en que me besó, ni he sabido de ella, tampoco me interesaba hacerlo.

-Vale, vale, mira, ahora mismo no puedo darte una respuesta.- Digo rascándome la frente.

Malú sigue mirándome con sus brazos cruzados, rodeo mis ojos y pongo el altavoz, en otras circunstancia, no hubiese permitido que tenga esa clase de actitud con una llamada mía, pero ahora estoy tan saturada, que tampoco me place tener la voz de Inma en mi oído.

-Al día de hoy, tú eres una de las figuras más importantes del país y me gustaría contar con tu apoyo. Sacando todo lo que ha pasado entre nosotras, la iniciativa es muy bonita y tu y tú alma sensible, tienen que ser parte de esto.- Dice Inma. -Además, ya han aceptado Ale, Manu, Pablo e India.-

-Déjame pensarlo y te doy una respuesta, ¿vale?-

-Vale.- Dice firme. -Oye y ¿Cómo estas?- Pregunta suavizando el tono.

-Bien Inma, estoy bien.- Respondo en voz calmada.

Son de esas conversaciones que no dices nada, pero dices mucho. Aunque terminamos muy mal, Inma fue una persona importante en mi vida y siempre queda esa sensación extraña de cruzar palabra con alguien del pasado. Decimos un par de cosas más y nos despedimos.

-¿No que ya no hablabas con ella?- Pregunta Malú enojada.

-No lo hago.- Respondo haciendo énfasis en cada palabra. -Y no vuelvas a hacer eso, Malú, esa tontería de poner el teléfono el altavoz, yo no te miento, ni te oculto nada y no me gusta que hagas algo así.-

-¿Qué quería?-

-Invitarme a participar de un proyecto, Tu Silla, Tu refugio, cada artista pinta una silla como quiere y se subasta, todo lo recaudado va a los refugiados. Es un proyecto bonito y está claro a todos les ha gustado, ya que aceptaron participar.-

-¿Vas a aceptar?- Pregunta rascándose el cuello.

-No lo sé, ¿te das cuenta? Es lo mismo que pasó hace años, cuando hablaban de Valú, estuve de acuerdo en que el tema no crezca, por mí y por respeto a Inma, ahora es al revés. Si acepto el proyecto, muchos se preguntarán si sigo con ella, pero ahora valú si es real y tú estas en el medio.-

-¿Quieres participar?- Pregunta desafiante.

-No lo sé, ahora mismo, no tengo cabeza para pensar en eso. Es mas, decide tú. Sabes muy bien que no tengo nada con Inma, ni siento mas nada por ella, pero está en ti, tu eres la que quieres que no hablen de nosotras, esto hará despiste.- Digo desafiante y con cierta nostalgia.

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