Capítulo 65: Él es mi novio.

890 61 0
                                    

[POV. Saret]

¿Qué dijiste?- estaba totalmente sorprendida.

¡Unnie ayúdame!- sollozaba desgarradoramente.

Dios, ¿Qué hago?- la llevé a mi habitación; debía calmarla, estaba histérica- ¿Estás 100% segura?

Sí Unnie, recién recibí los resultados del examen de sangre.

¿Pero los hiciste en un hospital público?

Sí- respiraba profundo- Pero pagué por su silencio.

Dios - mis nervios estaban a flote, por suerte ya estaba estable, ya mi presión no subía al máximo en una situación así- ¿Quién es el padre?

Unnie no puedo decírtelo, no aún.

¿Él lo sabe?

Aún no.

Obvio se lo dirás.

No lo sé unnie.

¿Es artista también?

Lo es unnie.

¿Lo conozco?

En persona no unnie.

Dios- me estaba frustrando- Minji, ¿Cómo paso?

¿Recuerdas que ya puedo ir a al club que le pertenece a YG?

Si.

Pues he estado asistiendo seguido, cuando volvíamos de viaje. Cuando teníamos días libres, la cosa era ir- respiró- pero no iba sola, siempre lo invitaba a ir conmig, y él gustoso iba.

¿Quién?

El padre de mi hijo.

¡Dime quién es!

Aún no unnie, por favor.

Entiendo- suspiré- continúa.

Llevamos dos meses saliendo a escondidas.

¿Qué tan escondidas?

Solo tú sabes.

¡¿Qué?!

Nadie de las chicas, ni la empresa ni mi familia sabe.

¿Por qué me lo cuentas a mi y no a las chicas?

Tengo miedo unnie- lloraba- temo por 2ne1.

Suspiré- tranquila, sígueme contando.

En esos dos meses solo íbamos al club; bailábamos a veces, tomábamos un poco para después ir a comer, siempre era una rutina, pero amaba estar con él. Desde hace tiempo que me gusta- respiró hondo- un día el me dijo que quería pasar a otro nivel, yo me le negué así que lo dejo pasar. Insistió una semana después, yo me negué de nuevo, pero esa vez me robó un beso, uno que pasó a algo mas- lloraba, pero esta vez era tranquila, como si recordar eso le trajera cierta felicidad- me dijo que era su primera vez, al igual que la mía-sonrió- llegamos a su departamento… Y pasó.

¿Estás segura?- titubeé- ¿Qué es verdadero amor?

Así lo siento- dijo decidida- después de esa vez nos seguimos viendo; me regalaba flores apenas llegábamos al club, me daba cartas, detalles, pero las últimas noches siempre acabábamos igual, en su departamento. Siempre que terminábamos de hacerlo, me abrazaba y me besaba hasta quedar dormidos, luego me llevaba a mi departamento.

¿Y nadie te decía nada por llegar tan noche?

Bom tiene el sueño pesado- dijo entre risillas.

¿Qué harás?- estaba tan nerviosa como ella, la sentía como de mi familia. Me encariñé tanto con todas, eran como mis hermanas. Minji era mi hermanita menor, la hermanita que siempre quise y me sentía mal, sentí que no la protegí como debía.

No lo sé- bajó la mirada- no sé si decirle o simplemente olvidarlo.

Minji- suspiré- sonara cruel, pero esta es la prueba de si realmente te ama.

¿Qué Unnie?

Debes decirle y ver si se hace cargo, o si solo huirá.

Unnie- me vio a los ojos.

Dime.

¿Puedes ir conmigo?

Sonreí- déjame arreglar todo para salir del hospital.

Después de casi 30 minutos Minji ya estaba conduciendo.

Bien, llámale y dile que lo verás en algún café, qué sé yo.

Unnie es arriesgado, nos podrán ver.

Respiré hondo, esto ya me estaba causando una jaqueca, ¿Qué debía hacer?

Bien, dile que lo ves en el departamento de Catherine.

Pero ella no está.

No, le hablé antes de que llegaras, me dijo que trabajaría hasta mañana.

Gracias unnie.

¿Te sabes la dirección?

Si- sonrió, comenzó a marcarle pero parecía no contestar- Creo que está ocupado.

Supongo- llegamos al departamento, bajé la maleta. Minji seguía insistiendo en el celular, debía hacer que ese chico, el padre, llegara al departamento lo antes posible.

¿Tienes hambre?

Sonrojada- la verdad si unnie.

Minji- abrí el refrigerador. Aún debía ayudarme de una muleta, solo para acostumbrar el movimiento de mi pierna; ya era mínimo, pero igual no quería volver al hospital.

Dime Unnie.

¿Cómo te diste cuenta?- saqué fruta- es decir, ¿Ya sabes?

Ambas reímos- Creo que comenzó por el hecho de que la comida me daba asco, ya sabes, el olor se hacía intenso, luego tenía mucho sueño, a veces me daban antojos de comida muy grasosa, algo que nunca me pasaba.

¿Cuánto tienes?

Al parecer 2 semanas.

Ya veo- le serví un plato con varias frutas- espero esto no te de asco.

Hasta ahora mi estomago está tranquilo- sonrió .

De la nada se oyó música algo baja, pero se iba intensificando conforme avanzaba.

¡Es él!

Contesta- estaba nerviosa.

Si, hola amor- sus mejillas; verla tan sonrojada, tan alegre, era ver de otra manera a Minji. Normalmente su apariencia era de una chica fría- Oye podrías venir a ___. Debo hablar contigo- suspiró- es urgente- parecía que comenzaría a llorar- gracias.

¿Todo bien?

Viene en camino.

Las dos nos consumíamos en nervios, estábamos esperando por su llegada. El tiempo pasaba tan lentoÇ; no sabía cómo reaccionaría al verlo, pero sé que cuando lo viera debía ver si era el indicado para Minji, y más que nada ver si se hacía responsable.

Una cruel hora y media marcaba desde la llamada que hicieron, cuando por fin tocaron el timbre.

Iré yo Unnie- Minji se levantó rápido para abrir la puerta, yo me levanté para seguirla y recibir al padre de aquel futuro sobrino o sobrina.

Cuando Minji abrió la puerta no podía creer a quien veía, aquel asombro casi me hace caer desmayada.

Entre risillas se abrasaron, tan enamorados como si no se hubieran visto en mucho tiempo; quedando de lado uno del otro. Al fin Minji habló.

Saret Unnie- risilla nerviosa- él es mi novio.

Shine a LightWhere stories live. Discover now