¡Niña, no llores! [Cristiana]

Capítulo 1

-Un día cualquiera, en una ciudad cualquiera-

La letra del cartel de la oficina se volvía difusa por detrás del vidrio empañado del taxi donde viajaba Jacky. La lluvia caía sin parar.

La jovencita, aún adormilada por haber madrugado, le pagó al taxista y bajó del vehículo para dirigirse con rapidez al edificio donde trabajaba.

Los múltiples cubículos, más el olor a encierro que la lluvia no disolvía, siempre solían darle náuseas y esta vez no era la excepción. Así que, con un principio de tedio por tener que pasar tiempo allí, se encaminó a su propia oficina. La rutina para ella era siempre igual: Levantarse, trabajar, volver a casa penosamente e ir a dormir para volver a empezar.

Desde el día de su boda, parecía que todo se había vuelto igual

Repetitivo.

No había muchos empleados esa mañana, aún era muy temprano. A pesar de eso, cuando llegó un olor grato, constrastando el ambiente monocromático y sumamente rutinario, identificó un café de muy alegre color esperando sobre su escritorio.