Un alma rota

Capitulo 10

Era sábado, justo esa mañana se sentía demaciado enfermo. En toda su vida adulta, nunca antes se había sentido así. Tenía en mente que se tenía que levantar e ir a la oficina, ya que tenía que dejar todo listo porque el lunes empezarían la grabación de el nuevo material de Kings of leon y the king JJ pero en verdad se sentía mal. Incluso juraría que su temperatura subía, lo único que hizo fue llamar al teléfono de su mano derecha. Después de un par de timbrazos una dulce voz le atendió el teléfono y esa voz no era de leo

- Hola... Leo?

- Otabek, soy .... En un momento te comunico a Leo

Por el auricular logro escuchar que abrían una puerta, también se escuchaba el agua de alguna regadera correr "amor, es Otabek" de pronto escucho que el agua se detuvo

-Otabear, como estas?

- Hola Leo, disculpa si los interrumpo...

- No te preocupes por eso hombre, dime qué pasa?

-Sabes que yo no soy de dejar mis responsabilidades a un lado pero me siento terrible, crees que puedas acabar tu solo hoy?

- Claro, no te preocupes y ve al médico, llevo días diciéndote lo mismo. Cada día te ves peor hombre

- Si y llevo días evitando ir, pero esta vez en verdad me siento mal así que tendré que ir a uno.

- Y cómo estás, ya desayunaste algo?

- No aún pero ya voy, hasta luego y gracias nos vemos Leo y te debo una

Sin más Otabek colgó el teléfono, Leo era uno de sus buenos amigos y como tal se preocupaba por el pero cada que Leo quería saber más sobre su ruptura con Yuri este solo lo evitaba.

Despacio se incorporó hasta quedar sentado sobre su cama. Comenzó a revisar sus mensajes de WhatsApp y había uno que llamó su atención "no, aun no. Sí quieres verlo solo deja que cumpla tres meses, se que quieres verlo eres su padre pero aún es muy pequeño. Además si quieres verlo no podrás llevarlo con esa zorra" el día anterior le había preguntado a Yuri si podría ver a su cachorro, el no lo había visto desde el día en el que nació y no culpaba a Yuri el tenía toda la culpa, el debió quedarse ese día en el hospital pero como dicen no existe el hubiera, con esa respuesta solo bloqueo su celular y se puso de pie poco a poco ya que estaba mareado y se metió a la ducha, se vistió y llamo a un taxi, con lo mal que se sentía no se sentía capaz de manejar hasta el hospital

-Señor Altin- llamó una enfermera

- Soy yo - decía el kazajo alzando la mano y poniéndose lentamente de pie

- El doctor Nikiforov lo atenderá, sígame

Genial,pensó. Justo me tenía que atender un amigo de Yuri, y para colmo uno que lo adora.

Siguió a la enfermera hasta un consultorio, está abrió la puerta y le serio el paso, entro a paso lento y la enfermera cerró la puerta

- Hola, por favor toma asiento.

Otabek obedeció y tomó asiento frente al amplio escritorio del platinado