Esta noche, el mundo muere

Vida en el refugio I

-¿Ya vamos a llegar?

-si Sasuke no te preocupes, ¿Estas muy cansado?

-No es como si diario corriera por los techos, huyera de cosas que quieren comerte y te vuelves un temerario

-jajaja, bienvenido a mi mundo Sasuke

-Naruto...¿Qué pasará cuando lleguemos al refugio? ¿Qué pasará con la ciudad? ¿Qué pasará...con lo nuestro?

-¿Con lo nuestro?

-eres la primera persona con la que he hecho el amor, eres mi primer beso...contigo...No me siento solo Naruto...¿Qué pasará con todo esto?

-lo resolvere Sasuke, también es algo nuevo para mi, eres la primera persona que ha podido quitarme las cargas que llevo ensima

-¿Qué pasará contigo cuando lleguemos? ¿Harán que te vuelvas a ir?

-me llevaran con Tsunade y ella me llevará con los superiores, después de lanzar la bomba no sabemos que es lo que podría suceder y el daño que hará...nos mandarán afuera...

-¡No pueden! ¡No pueden exigirte más de lo que has hecho Naruto!

-Sasuke, soy un soldado, y sirvo a mi nación, para ellos sólo soy un perro pero, haré lo posible para quedarme, no quiero alejarme de la persona que me hace sentir humano

-gracias Naruto

-aún falta para llegar así que duerme, aquí estaré

-confió en ti Naru...

Sasuke se había quedado dormido en el asiento, su piel era muy blanca a comparación de la mía y su cabello era de un negro azabache, era apuesto, ahora entiendo porque su actitud tan ególatra pero en verdad, sólo es un niño que se siente sólo...al igual que yo

-prometo que te cuidaré Sasuke

El cielo empezaba a iluminarse estaba a punto de amanecer, pronto lanzarian la bomba sobre la ciudad, estamos a punto de llegar. Seguí conduciendo un rato más hasta que al fin pude ver el refugio, se abrieron las puertas y pude ver a muchos soldados con sus armas apuntandonos, sería lo normal después de lo que pasó en el refugio pasado.
Detuve el coche y tomé a Sasuke en mis brazos, no lo dejaría hasta asegurarme de que estuviera con su familia

-¡General!

Todos los soldados habían formado una línea mientras me saludaban, sabían que había perdido a mi escuadrón, sabían que el único sobreviviente era yo, el increíble general Kyuubi. No quería verlos, no podía, me sentía tan avergonzado y débil por no haber podido salvar a los míos pero, me llenaba de felicidad saber que Sasuke seguía con vida

-general, Lady Tsunade lo necesita

-iré en un momento, antes debo ir con la familia de Sasuke

-nosotros podemos hacerlo general no se preocupe

-¡No! Yo lo haré, ahora por favor díganme donde se encuentra la familia Uchiha

-¡Si señor!

Los chicos me guiaban en silencio y con la cabeza baja, tenía una fama que podía aterrorizar a muchos, a mi corta edad ya era un general que con sus estrategias ganaba guerras y no tenía sentimientos al momento de torturar y de matar a los enemigos.
Se pararon en seco y me saludaron de nuevo y frente a mi ahí estaba Itachi con su pareja y su madre, corrieron a abrazarme pero al ver a Sasuke en mis brazos pensaron lo peor

-por favor no se asusten, no le ha pasado nada, sólo está cansado, fue un viaje muy largo

-muchas gracias Naruto, gracias en verdad, jamás podré pagarte por haber rescatado a mi hermanito