Capitulo 38: ''Sueños de boda''

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Nessie POV


El día se iba acercando, me desperté y me levanté de la cama, hoy volvía al instituto, mi familia al completo se quedaba aquí, y Jacob tenía que patrullar con su manada por si veían algo, en mi casa se quedo Seth para descifrar aullidos de lobo a mi familia, Nathan dijo que tendría a Lobos Negros controlando por fuera y por dentro del instituto, Nathan uso su don con los profesores para que no les dijeran nada a los Lobos Negros de dentro.

Baje a desayunar y ahí estaba mis padres hablando con Nathan, quedamos que el me llevaría al instituto y estaría conmigo dentro como mi guardaespaldas.

-Hola.- salude a todos.
-Hola.- dijeron todos a la vez.
-Nathan, ¿quieres desayunar?.- le pregunto mi madre.
-Si insiste.- se sentó al lado mía.

Mi madre saco un tazón de leche con cereales y empezamos a comer, me fascinaba la rapidez con la que Nathan se había relacionado con mi familia, a los Quileutes les costo meses acostumbrarse a tratar con ellos. Desayunamos tranquilamente y nos fuimos en el ferrari de Nathan, mi padre nos acompaño hasta la puerta.

-No corras mucho con eso, Nathan.- advirtió mi padre.
-Tranquilo, Edward, yo controlo.-

Nos subimos al coche y Nathan arranco.

-3...2..1.- decía mientras miraba a mi padre meterse en la casa.

Cuando llego al 1, acelero, el coche iba rapidísimo, veía todo pasar por mis ojos a una gran velocidad, casi me da un infarto, no me espere eso para nada, Nathan mientras sonreía, estuvimos un tiempo por la carretera igual hasta que nos paramos en un semáforo.

-Menos mal que mi padre te dijo que no corrieras.- dije
-También dice que no bebas y te pusiste ciega conmigo.- dijo recordando el día de la carta de los Vulturis.
-Estaba depre.- me excuse
-Y yo igual ahora.-
-¿Tu depre de que?.-
-De tener que llevar a una plasta en mi coche que no le gusta ir rápido.-

Le metí un manotazo y se rió al igual que yo.

-Me llevas porque debes protegerme cuando vaya al instituto.- dije siguiéndole el juego.
-¿Ah si?.-
-Si.-
-¿Y puedo protegerte por las noches?.- dijo con una sonrisa pícara con doble sentido.

Me sonroje. Llegamos al instituto bastante pronto, en la entrada esperaba Sarah, vino para nosotros sonriendo.

-Hola, Nessie.- me saludo
-Hola.- salude
-Hola, pastelito.- le dijo a Nathan y le beso.

Nathan la tomo de su espalda mas baja y ella rodeo su cuello con sus brazos, se besaban con desesperación, ya vi bastante y me fui yo sola hacía dentro del instituto.

Hoy tocaba biología a primera hora, por el pasillo vi a unos cuantos Lobos Negros mirando las puertas, entre en la clase, dejé la maleta en la mesa y me senté en la silla, Nathan apareció minutos después y hizo lo mismo que yo al lado mía.

-¿Que prisas tienes por entrar?.- dijo
-Ninguna, quería dejaros a solas.-
-¿Estabas celosas?.- dijo con sonrisa picara.
-No, claro que no.-

Me miro como diciendo ''¿seguro?''.

-No.- volví a repetir.

Ahora miro al frente y me di cuenta de que ya había llegado el profesor, el tiempo se me paso rapidísimo. El profesor empezó a dar clases, los primeros 5 minutos atendí, pero luego empecé a charlar con Nathan.

-Veo que tratas muy bien a Sarah.- dije
-Lo se, soy un amor.-
-Pensaba que la matarías o algo.- me sinceré
-Estuvo en mis planes.- reconoció
-Deberías dejar de hacer eso, matar humanos digo.-

Me miro. Y le conté exactamente lo que creía de porque hacia cosas malas.

-Eres una gran persona, Nathan, eres bueno, pero te paso algo en el pasado que te afecto hasta el día de hoy.-

Ahora se cabreo y me habló irritado, pero ya no me daba miedo.

-Tu no sabes nada de mi pasado, Renesmee y tampoco sabes nada de mi... yo no soy bueno.-
-Eso es lo que intentas aparentar, quieres que todos te odien, y yo se que no eres malo y en el fondo tu también lo sabes.-
-¿Eso es lo que piensas?.-
-No, es lo que se.-

Se cabreo y miro para delante y así se quedo el resto de la hora, me sentí mal, algo muy malo le tuvo que pasar para que actuase así, le doliera o no, yo lo sabía, no entendía porque una persona como el haga esas cosas.

El día fue aburrido, Nathan dejo de hablarme en las demás horas, salimos del instituto y nos dirigimos a su coche. Sarah apareció y se acerco a nosotros.

-Adiós, amor.- intento besar a Nathan, pero este le hizo la cobra.
-Vete, Sarah.- dijo a punto de estallar.
-¿Que te pasa, pastelito?.-

Nathan la cogió del cuello y la estampo contra un coche, los pies de Sarah no llegaban al suelo, me quede helada cuando lo hizo.

-Te estoy diciendo que te vayas.- dijo Nathan
-Nathan, suéltala.- le pedí

Sarah se estaba quedando sin aire y Nathan no la soltaba, la miraba con odio, yo le seguí llamando repetidas veces para que la soltara.

-Nathan, para.- dije tomándolo de la cara y haciendo que me viera.- Por favor.- susurré.

Se quedo mirándome, soltó a Sarah y esta cayó al suelo tosiendo, me miraba como si viera a la virgen en persona, yo me quede también mirando sus ojos azules, eran tan atrayentes que me perdí en ellos, pero no sentía lo mismo como sentía cuando veía los de Jacob, un momento... ¿porque lo comparo con los de Jacob?.

El aullido de un lobo nos hizo parar de mirarnos.

-¿Que dice?.- le pregunte a Nathan.
-Avisan de que tu familia no estará en tu casa, van a cazar. Vamos, te llevaré a casa.-

Desde que supimos que los Vulturis vendrían, mi familia iba a cazar mas frecuentemente, para estar mas fuertes para cuando vengan.

Nos montamos en el coche y nos marchamos del instituto, el trayecto fue silencioso y incomodo, Nathan volvió a su estado de antes, tenía intriga de saber que le paso tan malo.

Llegamos a mi casa y entramos, me fui a mi cuarto a llamar a Jacob por si ya había venido de patrullar y Nathan se quedo abajo en el salón.

Llame al móvil de Jake, pero este no lo cogía, espere 5 minutos y volví a llamar, tampoco lo cogía, bajé las escaleras y vi a Nathan desde ella, estaba apoyado en la pared mirando un papel, lo miraba triste, me senté en las escaleras a observarle despacio para que no se percatará de que estaba viéndole.

Cogió una botella de wisky de mi familia y se sentó en un sillón, le veía de lado bebiendo de la botella, se quedo aún viendo el papel, vi que era una foto de una persona, creo que mujer, no diferenciaba muy bien el aspecto, de repente, vi como caía una lágrima de sus ojos, ahora su cara era de confusión y tristeza, las lágrimas le cayeron cada vez mas fuertes, me dio pena verle así, el tipo tan duro, el malo, estaba llorando por alguien, me auto confirme mi teoría sobre el.

Me decidí a bajar, vi como se limpiaba las lágrimas y escondía la foto en su bolsillo rápidamente y se levantaba del sillón, llegué a el y le mire, sus ojos estaban rojos, me miraba intentado disimular su tristeza, pero el brillo en sus ojos lo descubría, le abracé y el me rodeo con los brazos.

-Lo siento, Nathan, siento lo de esta mañana.- me disculpé

El no decía nada, solo me abrazaba, sus brazos eran tan cálidos que me hacían sentir bien, nos separamos y nos quedamos mirando. El timbre sonó, me separé de Nathan y fui a abrir, me quede helada cuando vi que se trataba de Jake, el me miraba sonriendo.

-¡¡ Jake!!.- me lance a sus brazos.

El se rió y me empezó a dar vueltas conmigo en sus brazos, me bajo y se quedo a milímetros de mi, ya sentía las mariposas en el estomago.

-Te echaba de menos.- susurró.

Nos besamos despacio, el me tomo de la espalda y yo de su cuello, ya no podía soltarme, después de unos minutos nos separamos a regañadientes y me habló.

-¿Damos un paseo?.- propuso
-Nathan, esta arriba.-
-Tranquilos, me voy.- llegó Nathan detrás nuestra.
-Nathan, no tienes porque....- dije
-Da igual, además tengo que hacer cosas en mi casa.- me interrumpió.

Se marcho y Jake y yo nos fuimos a pasear por el bosque, íbamos entrelazando los dedos mientras paseábamos en silencio, era un silencio cómodo y agradable, a veces nos mirábamos y nos sonreíamos, estuvimos un rato así hasta que decidí hablar.

-¿Sabéis ya que día vendrán?.- pregunte
-Ese día no lloverá, la semana que viene llueve menos en dos días, el martes y el miércoles.- me explico
-Tener mucho cuidado, por favor, si morís por mi culpa yo no me lo perdonaría.-

Se puso enfrente mía y me tomó de la cara.

-No va a morir nadie, ¿vale?.- me dijo decidido

Asentí con la cabeza, el sonrió y me beso dulce y lento, yo le correspondí, el sonido de una musica nos hizo mirarnos extrañados, me dirigí a donde venía la música dejando a Jake atrás, entre los árboles vi una iglesia, estaban haciendo una boda, me quede mirando la iglesia pensando en como sería mi boda con Jake, me quede mirándola con los brazos cruzados, no le quería decir nada a Jake, aún era muy pronto, aunque ya lo había pensado mas de una vez, me sorprendió cuando me abrazándo por detrás y apoyando la cabeza en mi hombro.

-¿En que piensas?.- me pregunto dándome besos en el cuello.
-Nada.- me gire a el y le rodeé con mis brazos.-¿Bailamos?.- propuse divertida.

Me miro sonriendo, se alejo un poco y levanto su brazo con la palma de la mano arriba y el otro brazo poniéndoselo detrás de la espalda.

-Me concede este baile, señorita.- dijo sonriendo.

Sonreí y la tome, me atrajo rápidamente y me pego a su cuerpo, puso su mano que llevaba a la espalda en mi cintura y la otra la dejo junto a la mía, me quede impresionada, no me lo esperaba para nada, yo le puse la mía en su hombro y empezó a moverse, me reía divertida y el también, me di cuenta de que se movía muy bien, parecía un experto.

-¿Sabes bailar?.- dije mientras me reía.
-Después de tantas bodas Quileutes acabas aprendiendo.-

Me dio una vuelta y me pego de nuevo, puso su cabeza en mi hombro y yo hice lo mismo, nos seguimos moviendo así un rato en silencio, escuchando la musica y siguiendo el ritmo.

Me imagine así bailando con Jacob, pero el con traje y yo con un vestido de boda, a mi familia y amigos felicitándonos y aplaudiendo, era lo que mas deseaba ahora que le tenía, casarme con el, sabía que el nunca se iría de mi vida y estaría siempre conmigo, sería cuando yo estuviera preparada.

Despegué la cara, el hizo lo mismo y le mire a los ojos.

-Te quiero.- le dije.

Sonrió y acerco sus labios a los mios.

-Te quiero.- repitió y me beso.

Y nos besamos mientras las canciones de la boda sonaban en mis oídos.

The Twilight Saga: Eternal FlameWhere stories live. Discover now