¿Castigo? Si, claro

46 10 12
                                    

Narra Isabel

Mamá y papá no dicen nada mientras cenamos, lo cual es preocupante. Ellos siempre tienen algo de que hablar.
-¿Está todo  bien? -
No puedo soportar el silencio así que pregunto.
-Sí, solo estoy algo cansado -
Asiento esperando que continúen hablando, no quiero pensar en estos momentos. De hecho no quiero volver a pensar en lo que me queda de vida.
-La verdad Isabel, no nos alcanza el dinero - dejo mi cuchara a medio camino de mi boca.
-¿Cómo es eso posible? -
-Hemos tenido muchos gastos, el dinero que gano no es suficiente, tal vez es mejor que vayas caminando al bachillerato -
-Tiene que haber una solución, podemos dejar de tener Wi-Fi, economizar en comida, tener solo 60 canales -
Mis padres hacen una mueca ante eso.
-O mamá y yo podríamos conseguir un trabajo - por sus caras se que mi idea no les ha gustado.
-De ninguna manera vas a trabajar, tienes que estudiar, sacar buenas notas para que entres a una buena universidad -
-Pero yo si puedo trabajar -
Ahí está, tal vez si mate a alguien hace un año o por lo menos organice un secuestro.
Decir que yo podía trabajar era un señuelo para que mi madre accediera a trabajar. No me mal entiendan, amo a mi madre o eso creo bueno no importa, la cosa es que si ella trabaja puedo tener mas tiempo a solas y un poco mas de libertad.
-No lo sé, Isabel - si me llamo igual que mi madre.
-Es una gran idea Fernando -
Como mientras ellos discuten los pros y los contras.
-Bien, empezare a buscar trabajo mañana pero - dos pares de ojos grises me miran, trajo. Aquí viene la mala noticia.
-Hija no puedes quedarte sola en casa y como tu amigo Samuel a demostrado ser respetuoso y educado -
-Tendrás que pedirle que se quede contigo -
Por dentro estoy bailando de alegría pero me muestro reacia.
-Ya tengo 17 años, puedo cuidarme sola -
Sus ojos se oscurecen, están recordando mi accidente y como no pude cuidarme.
-Sin peros, hablare con sus padres para pedirles permiso -
Suelto un suspiro de derrota.
Por dentro me estremezco, tal vez si fui una mala persona antes de mi accidente y olvidar fue un regalo. Pero no lo sera si continuó con viejos hábitos.
-¿Puedo retirarme? -
Cuando asienten me pongo de pie y camino-corro a mi cuarto.
Cierto con pestillo y marco el número de mi amigo.
-Estoy castigada -
-¿Qué fue lo que hiciste? -
-Sugerí que podía comenzar a trabajar -
-¿Por qué hiciste eso? -
-Tenemos problemas económicos -
-Vaya, lo siento mucho pero ¿cuál es tu castigo? -
-Tú eres mi castigo -
-¿Qué? , ¿te fumaste algo sin decirme? -
-No seas tonto, mamá comenzara a trabajar pero no quiere que me quede sola en casa así que decidió junto con papá que pasare mis tardes contigo -
-¿Qué?, ¿acaso están locos?, ya paso suficiente tiempo contigo en el bachillerato, eso seria un castigo -
Resoplo ante eso y estallamos en carcajadas. Aún no puedo creer que en solo un mes Samuel se haya convertido en alguien tan importante para mí.
-Mi madre hablara con tus padres, ¿crees que haya problemas? -
-Pss claro que no, papá estará feliz de que no este en casa -
-¿Qué hay de tu madre? -
-Mi madre murió hace 5 años -
-Vaya, quien como tú - mis palabras gotean sarcasmo, tal vez para algunos sea un poco insensible pero Samuel no apreciaría que le dijera lo siento.
-Si, soy tan afortunado -
-Oye -
-Mande -
-Eres mi mejor amigo -
-Y tú eres mi mejor amiga -
-Bueno pase de salidas, nos vemos mañana -
-Hasta mañana maquina de misterios -
Colgamos al mismo tiempo.
Samuel dice que los fogonazos que he tenido son producto de mi imaginación, que tal vez fui a un concierto de Benjamín y por eso mi mente se ha confundido.
Cierro los ojos y las imágenes aparecen.
Me pongo de pie y realizo mis tareas.
La amistad con Samuel me ha traído beneficios pero también problemas.
El grupo de chicas que están enamoradas de él me arrinconaron en el baño y amenazaron.
-Ni creas que porque eres amiguita de Samuel vas a quedarte con él -
-Hemos trabajado mucho para que nos note y tú no vas a arruinarlo -
Obviamente me encogí contra la pared, que hable con Samuel no significa que me sienta cómoda hablado con otros.
-Más te vale que te alejes de él -
Una chica la más grande esta a punto de golpearme cuando alguien toma su mano.
-Fuera de aquí - 
Las chicas salieron del baño lanzándome miradas asesinas.
-Gracias -
Job me sonrió con sus ojos negros divertidos.
-No hay de que -
Job y Miguel son los mejores amigos de Samuel pero ahora que estoy en le ecuación se han separado un poco.
Que los dos me hayan invitado a salir y a los dos haya rechazado no ayuda mucho.
Ellos dicen que tengo tres chicos en la friendzone.
Pero yo digo que he conseguido dos grandes amigos.
Escuchó pasos en el pasillo, salgo disparada a quitarle el pestillo a la puerta.
-Isabel se que estas molesta pero es por tu bien -
Hago mi mejor puchero y me cruzo de brazos.
-Mamá tengo 17 años, se cuidarme sola no tienes que castigarme -
-Creí que te caía bien -
-Me cae bien pero no quiero que sea mi niñera -
-Lo siento Isabel pero no vamos a cambiar de opinión, es por tu bien -
Asiento pero sus palabras hacen eco en mi mente.
Es por tu bien.
No es la primera vez que me lo dice, supongo que los padres siempre se lo dicen a sus hijos.
-Buenas noches hija -
-Buenas noches mamá -
Cuando mamá sale vuelvo a cerrar la puerta con pestillo.
Si mamá supiera que esto no es un castigo,  Samuel es una bendición.
Hay una guitarra con unas manos llenas de callos, comienzan a tocar una canción que llena mi corazón.
Tus ojos llenan mi corazón.
Tus labios son mi adicción.
Te amo nena, nena te amo.
Esos ojos avellana me sonríen.
Sus labios se curvan en una sonrisa maliciosa.
-Nena tus labios me vuelven loco -
-¿Solo mis labios? - hago un puchero y bato mis pestañas.
-Todo tu cuerpo me vuelve loco, tu me vuelves loco -
-Te amo -
-No más que yo -
Me besa, un beso lleno de todo el amor que sentimos pero también lleno de ese deseo que cruje en nuestro ser.
Me despierto jadeando, llevo mis dedos a mis labios.
No recuerdo el sueño completo pero si recuerdo los labios de un chico sobre los míos.
Me pongo de, tomo mi celular y marco un número.
-¿Qué rayos? -
-Te necesito -
-¿Qué sucede? -
-Tuve un sueño donde estaba besándome con un chico -
- Dime que ese chico era yo -
-No, era el de ojos avellana -
-¿Qué tengo que hacer para que sueñes conmigo? -
-Samuel concentrate -
-Lo siento Isa pero son las 3 de la mañana y tengo sueño, hablamos al rato -
-Ok, gracias y siento haberte despertado -
Cuando la llamada termina suelto un suspiro.
Demonios, debo dejar de soñar esas cosas.
Cierro los ojos llevándome los dedos a los labios, estos cosquillean a causa del beso.
Tal vez si he besado a alguien.

¿Qué opinan del chico de ojos avellana?
¿Quienes aman a Samuel?
Chic@s ¿soy tan mala escribiendo que nadie me lee?

Esa canción #1  #PremiosRoyalePrice2018 #OW2018Où les histoires vivent. Découvrez maintenant