El Amor en tus Ojos (Bian x Sorrento)

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One Shot #7
(Bian x Sorrento )

Y cómo no notar el amor que le tenías, si con sólo mirar a tus ojos, todo que por él sentías se podía ver. Por mucho de que trataras de decir que lo único que sentías por él era odio por todo lo que nos hizo creer. Más tu boca podía decir eso, más lo que tu mirada transmitía era todo lo contrario. Por mucho que tratase de negarlo así era. Es que como se decía, los ojos son las ventanas del alma. Puedes tratar de convencer y convencerte a ti mismo de algo, más tus ojos podían revelar la verdad.

Fue en ese tiempo que todos nos dimos cuenta de que lo que decías de Kanon, no era más que mentiras que trataban de ocultar lo que en verdad sentías, el dolor de haberle entregado tu corazón a alguien que jamás le importo.

Y como culparte de amarlo, si cuando nadie creyó en nosotros, la sociedad, la familia e incluso nosotros mismos dejamos de amarnos, una voz nos trajo hasta quién no enseñaría cómo servir a Poseidón, el dios que nos ayudó sobrevivir, quien no dio otro camino. Una opción distinta.

Él fue nuestro guía, muchas veces duro como un maestro y otras tantas gentil como un hermano que cuidaba de ti. Como no amarlo?.

Así como tampoco puedo culpar el dolor que sientes ahora. Pues a todos nos dolió enterarnos de su traición. Saber que no fuimos más que peones para su juego de conquista. Y sé que dolió más para ti, pues fuiste el único que sobrevivió a toda la guerra. Fuiste tu quien tuvo que ver los cuerpos sin vida, de tu nueva familia. Fuiste tú el que lloro la traición y muertes de esa guerra.

Por eso entiendo el porque odias tanto los sentimientos que albergas aún por él. Los odias porque crees que es una traición a nosotros y al Sr. Poseidón, por todo lo que nos hizo y aún así amarlo.Pero sabes? Estoy seguro que así como yo, nuestros compañeros lo perdonaron y supieron atesorar más allá de la traición, lo hecho en los años pasados, cuando nos dio un hogar y una familia.

Sorrento, el amor es algo cruel y tonto. No te tortures pensando más, nadie te reprochará nada. Nadie te mirará mal. Somos familia después de todo. Queremos felicidad para todos.

Espero te haya podido ayudar con esto. Ten valor y adelante con la respuesta que recibas. Si es buena, se feliz. Si es negativa, superala y se feliz.

Atte: Bian General de Hipocampo.

No puede ser... - sus mejillas se tiñeron de carmín. Las palabras de Bian, eran muy directas y también muy alentadoras, pero también vergonzosas y es que el Saren no esperaba haber dado a conocer sus sentimientos así - enserio? - fijó sus lilas ojos repasando una y otra vez las palabras de su amigo - no puede ser... - aún no podía creer que fuera tan tonto para creer que nadie sabría sobre sus sentimientos a Kanon - pero tienes razón debo seguir adelante - con esas palabras dejó salir al fin las lágrimas que había estado guardando desde que Kanon, dijera un claro NO, a sus sentimientos. Ya lo esperaba pero aún así dolía y mucho. En ese momento deseó nunca haberse enamorado del mayor de los generales y peor aún, haberle querido a pesar de lo que este les había hecho a todos- ...- se limpió las lágrimas. Era tiempo de regresar al Atlántida -

***M***

Debió ser duro - Isaac por ser el más joven de todos muchas veces dejaba salir sus palabras sin medirlas y cuando recién caía en cuenta de que pudo o lastimó, trataba de corregirse - yo...- Tetis con la mirada asesina que le dirigió, lo mandó callar -

Esta bien - El Austriaco trató de mostrar fortaleza que sus ojos no mostraron -

Bueno, supongo que esta bien entonces... - la rubia no sabía que más decir, pues era notable el dolor en las bonitas facciones del sirena -

Bueno, bueno aquí Sorre debe querer dormir y arreglar sus pertenencias. Así que despejemos en área- señaló la salida el canadiense - te vemos luego - diciendo ello el castaño tomó a Eo e Isaac para llevarlos a rastras, porque si no lo hacía seguro estos se quedaban a incordiar al peli lila -

Si. Gracias - sonrió ante la la escena de sus amigos siendo arrastrados -

***M***

Puedes dejarlo salir ya... - como una orden que estuviera esperando al fin, Sorrento dejó salir el llanto que ni siquiera en soledad pudo. Y es que era uno de esos llantos que tenías que compartir con alguien para dejarlo fluir para sentirte aliviado en su totalidad -

...- se aferró al abrazo que su amigo, amablemente le había brindado - porque tiene que doler tanto...- el de ojos azules no respondió porque sabía que la pregunta no era para él, si no para el mismo Sorrento -

Así como en una herida física, el rechazo duele, pero también como está sana y deja de doler, el rechazo deja de doler y el amor puede volver a nacer. - después de un momento con esas palabras trató de animar a su amigo, mientras limpiaba las lágrimas de las mejillas del menor. Era difícil comprender como alguien que mostraba tanta fuerza de voluntad podía ser lastimado de esa manera. Pero seguramente esas eran las consecuencias del amor -

Aún así duele, sabes? - el menor habló en un suspiro. Aún se preguntaba porque tenía que haberse enamorado de alguien como Kanon. Más allí estaban lo caprichos de la vida; el amar a quien no debes amar, querer a quien no debes querer y odiar a quien no debes odiar. -

Es con lo que debes aprender a vivir, hasta que lo superes - expresó el castaño sin más -

Supongo que sí - trató de sonreír, más solo una mueca se formó en su rostro -

Esa noche bajo el reflejo de la Luna en el mar, en aquel coral de colores intensos, en un lugar apartado de los pilares que debían vigilar. Ambos compartieron el dolor del amor rechazado y el dolor del amor no observado.

Los ojos son el espejo del alma. Puedes decir muchas cosas, puedes hacerlas igual, más la única manera de saber que si lo que estás haciendo o diciendo es lo que en verdad sientes, toma un espejo y mira directamente a tus ojos y obtendrás la respuesta.

El Amor en tus ojos, que una vez vi para él, también lo quiero ver cuando al fin te fijes en mi.

Fin

Por ParejasWhere stories live. Discover now