Save me [YoonKook/SuKook]

2. Un mundo bajo el colchón

La noche con su suegro fue algo cortada. El hombre alguna vez hacía alguna pregunta sobre su hijo durante la cena. Pero luego fueron a dormir. El padre durmió en la cama de ellos, en la habitación. Yoongi durmió en el sofá.

Cuando se hizo de día ni si quiera desayunaron en casa, los dos tenían prisa por ir al hospital. Llegaron allí y, tras estar unos minutos todos juntos, los padres se fueron a desayunar a la cafetería y los dos jóvenes se quedaron a solas.

-Ayer estuve con Saga... Le están cuidando bien, pero te echa mucho de menos... Quiere que vayas pronto a verle...

Le agarró la mano y se la besó con mimo un par de veces.

-Es raro dormir sin ti... Cuando me despierto y te veo siempre conmigo o cuando voy a dormir y ya estás allí... Esta noche lo último que vi fue la mesa del salón, lo mismo que al abrir los ojos... Me quedaría todas las noches aquí contigo, pero bueno tus padres también quieren estar aquí, es normal... ¿Sabes que grabé un vídeo para ti? Lo pondré más tarde, así tus padres ven cómo es nuestro Saga...

JungKook parecía no enterarse de nada, pero hizo un movimiento con dos de los dedos durante unos segundos y se quedó quieto de nuevo. Falsa alarma. Esas falsas alarmas que hacían que el corazón de Yoongi se alterase imaginando que despertaba.

Los padres llegaron, habían desayunado algo rápido y le subieron un café al novio de su hijo y un croissant para que comiera algo, les había parecido muy delgado y las ojeras del día anterior, aunque estaban más disimuladas, aún seguían allí.

-Toma Yoongi, deberías comer un poco.

El pelinegro hizo un par de reverencias agradecido y se sentó en una de las sillas para poder comer.

-Nuestro hijo no nos contó que tuviera un novio... Nos dijo que tenía un amigo llamado Yoongi que era genial y con el que pasaba mucho tiempo. También nos mandó fotos del perro y de él... y que se había mudado para compartir piso con su amigo, no sabía que eráis... pareja –comentó la madre sentándose en el borde de la cama y le acarició con ese típico amor que solo las madres pueden dar, su mejilla. Era una imagen que, en otras circunstancias, hubiera resultado tierna y digna de fotografiar.

-No sabíamos que era gay –explicó el padre.

-Oh... bueno Kook nunca estuvo con alguien más antes –dijo Yoongi sin saber si los padres tendrían buena reacción ante la homosexualidad de su hijo.

-Estuve pensando que... seguramente él quería que nosotros viéramos que eras buena persona antes de atreverse a decirnos que estabais saliendo juntos... Para que lo aceptásemos mejor –continuó explicando la madre.

-Bueno... pienso que no es algo malo... que dos chicos se amen –musitó Yoongi.

-Se ve que lo quieres mucho... y aunque conozco la versión de ese amigo Yoongi con el que se llevaba bien, pensé que tal vez si nos contases la historia real aquí, con él delante, sea bueno para que recuerde y nosotros te conozcamos mejor –comentó la madre y llevó la vista desde su hijo hasta el novio.

-Contarles... ¿Contarles nuestra historia? El... noviazgo o... La relación desde el principio...

-Eso es, a mí me parece buena idea. No imaginé que a JungKook le fuera a gustar un chico, pero quiero entenderlo y quiero saber por qué mi hijo se enamoró de ti.

Yoongi los miró algo nervioso, no pensaba que pudieran pedirle algo así pero en cierto modo comprendía que quisieran saber la verdad. Le dio un sorbo al café para terminarlo y se levantó para tirar los restos a la papelera. Luego se acercó al otro lado de la cama y miró a JungKook por unos instantes. Le agarró la mano y vio cómo su madre se iba a sentar al sofá junto a su marido.