Chapter sixteen

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Sollozo tras sollozo, sus delgados pero fuertes brazos le daban fuerza, pero no la suficiente para afrontar las siguientes malditas horas.

El monitor de los latidos lo mantenían con esperanzas, quería que llegara un doctor con la cura para ese condenado cáncer. Se aferró a la camisa contrario y deseó que todo fuera una pesadilla y es que, ¿qué sucedería con su vida si Jihoonie no alegraba sus días con su existencia?, se sentía morir con ese dolor inmenso en su pecho mientras su esposo lloraba en silencio, rezaba a Dios que su hijo se quedara con ellos, sólo un poco más.

El llanto desgarrador de su pequeño puso alerta a ambos padres, se acercaron con rapidez al pequeño cuerpecito en la incubadora horrorizándose por como su carita se tornaba levemente morada y los latidos se aceleraran de manera exagerada.

- ¡Enfermera! -gritó Jimin con la voz rota saliendo de la habitación en busca de ayuda.

No tardó mucho en llegar la enfermera a cargo junto al doctor de antes. Sacaron con cuidado el cuerpo de Jihoon y colocaron rápidamente la mascarilla de oxígeno y revisando bien si los medicamentos estaban haciendo el efecto necesario.

Yoongi aferraba a su pequeño esposo a su cuerpo tratando de seguir fuerte, le costaba tanto admitir que estaba destrozado. Sin embargo, por mantener lo más tranquilo que pueda a Jimin, lo haría todo.- Él estará bien, con medicamentos y cuidados él se recuperará... créeme.

Jimin ahogó un sollozo ocultando su rostro en el hueco de su cuello, se sentía morir.

- Necesitamos que salgan, haremos otro procedimiento para que pueda sobrevivir unas horas más -declaró el doctor mirando con preocupación a la pareja.

Asintieron con un nudo en la garganta mirando a su bebé conectándolo a otras mangueras, salieron del lugar yendo a la sala de espera. Su niño tenía apenas tres meses, por el amor de Cristo. No merecía tanto dolor, entonces, Jimin pensó con la cabeza fría.

- Yoongi... -le llamó con voz temblorosa- ¿Y si estamos haciendo mal?

- ¿A qué te refieres? -frunció el ceño con la voz grave.

- Jihoon está sufriendo, han pasado menos de 6 horas y todo empeora... ¿crees que la eutanasia es una opción?

Yoongi se quedó en blanco al escucharlo, mordió su labio y suspiró.

- No creo que debamos llegar a esos extremos, el doctor hará todo lo posible para que Jihoonie se quede con nosotros -besó su frente- Hay que ser fuertes por él.

- ¿Has visto como sufre por sobrevivir? -lo miró entre lágrimas- Me rompe el corazón ver a nuestro hijo de esta manera, no es justo.

- Claro que no, mi amor -suspiró revolviendo sus cabellos- Sólo nos queda esperar.

~•~

El pequeño pecho subía y bajaba lentamente, la dulce melodía que le brindaba su padre lo relajaba pese a lo difícil que era respirar.

- Me enamoraste desde el primer momento en que supe tu existencia, cuidé y espere por hermosos nueve meses tu llegada. No puedo explicar la calidez y emoción que experimenté al verte, eres un bebé precioso, el resultado perfecto de lo que siento por tu papi Yoongi y te amo como no imaginas. Tus ojitos, balbuceos, manitos... Todo es perfecto, Min Jihoon.

Sonrió con amargura acariciando la pequeñita manita de su bebé mientras Yoongi sollozaba sobre sus hombros, ya no podían más.

El infante arrugó la naricita antes que la máquina hiciera sonar un pitido largo y agudo.

- ¿Jihoon?

Ambos padres movían las extremidades de su pequeño pero no respondía, el aire se les hizo poco y lágrimas no tardaron en aparecer.

Jimin rompió en llanto abriendo esa maldita incubadora abrazando el inerte cuerpo de su hijo mientras una alarma era activada, lo abrazaba con fuerza mientras Yoongi estaba en blanco mirando incrédulo el monitor de los latidos mostrar una raya.

Jihoon ya no estaba con ellos.

천사 (ángel) -Yoonmin-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora