Capítulo 4

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-Ah conchetumare no tomo nunca más-. escuché a la Francisca desde la pieza de al lado, yo me encontraba en el baño viendo mi inmundicia y tratando de arreglarla.

-¿Domi?-. alzó la voz.

-Estoy acá-. mostré mi mano desde la puerta. Ya voy-. dije en voz baja.

Salí del baño con cosas que fui a comprar en la mañana para que a las chicas se les pasara la caña.

Le pasé una gatorade a la Francisca, a la Feña y a la Vale, la Maca me quedó mirando esperando lo mismo.

-Chucha, sorry, no me alcanzó pa ti, no tenía más plata-. dije haciendo puchero.

La Vale me quedó mirando con cara de querer matarme.

-Toma, yo no ando con caña-. dijo pasandole la bebida energética a la Maca.

timi, yi ni indi cin ciñi, aveces me caía como pata en la guata su actitud, pero que se le iba a hacer, ya la quería muxo.

-Gracias mi amor-.dijo la Maca dándole un beso a la Vale, que asco, de seguro la hueona anda edionda a copete  y la Vale tiene que aguantar esa huea, lancé una carcajada al escuchar mis pensamientos hueones.

- Ya, yo haré desayuno, me imagino que están cagadas de hambre-. dije caminando hacia la salida de la pieza.

-Yo te apaño, total yo soy la dueña de casa, na que ver que hagai las hueas sola-. dijo la Feña acercándose a mí.

Llegamos a la cocina y empezamos a cocinar algunas hueas para las chicas y se las llevamos, el día pasó rápido al igual que el fin de semana.

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Y aquí estaba, día lunes cagá de sueño, en clases de educación física, viendo el poto de profe Teresa.

La profe Tere era una señora al rededor de 60 años que era más flexible que todo el curso junto o una gimnasta, aunque era obvio que a eso se dedicaba, pero me seguía impresionando que yo  ni siquiera podía alcanzar la puntita de los pies cuando bajaba mis manos.

-Y...bajen-. decía casi sin aire.

Yo apenas bajaba y sólo la miraba por que me daba la senda paja hacer lo mismo.

Escuché  ruidos de chicos que probablemente eran de otro curso y compartiriamos gimnasio.

Alguien me agarró el poto.

Miré hacia atrás con cara de enojá porque pensé que era algún hueon barsa de mi curso pero era la Vale.

-¿y vo?-.

-ná po, nos toca educación física a la misma hora.- dijo colocándose en nuestra clase.

- wena coxina culiá-. dijo la Fran hablando bajito.

-Wena hueona-. dijo dandole un palmazo que la hizo saltar. ¿Y la Camila?-. la Fran puso carita de pena al escuchar la pregunta de la Valeria.

- nos abandonó la maraca culiá, seguramente se quedó dormida-. respondió la Fran.

- ¿Y la Feña?-. le pregunté.

- Está en el baño, me dio paja acompañarla-. y justo apareció, la Feña corrió hacia nosotras a colarse en la conversación.

-Wenaaa par de zorras, ¿en qué están?-. dijo poniendo su brazo en el hombro de la Vale que apenas alcanzaba ya que era bajita, y la Vale muy alta.

- Señoritas, que es eso de estar copuchando allá, vengan acá-. las llamó la profe que era más joven, tenía el medio físico, onda, la profe Teresa no estaba mal, pero ya era de edad po hueón.

La weona yetaWhere stories live. Discover now