La weona yeta

Capítulo 16

-¿Cachaste alguna wea?-. dijo mirándome.

-No-. me reí, me miro feo.

-Obvio que nopo, si no soltai a
vaguira-. dijo riéndose mientras veia que no dejaba respirar a su gato.

-¿Le pusiste vaguira?-. dije burlandome.

-Si,¿y?-. respondió picá.

Moví mi cabeza.

- ¿Queri que lo ponga de nuevo?-. señaló el pc, que tenia puesto un video de 137482 minutos, yia, no. De 40 minutos la wea.

La miré con la mea cara e paja.

-Dominga ya. Ponte las pilas-. me retó cómo si fuese niña chica.

No pude guardarme la risa.

-¿Por qué te rei? estoy hablando en serio-. respondió intentando estar más seria.

-Ya oh-. dije haciendo mueca de enojo.

Estuvimos harto rato en silencio, mientras vaguira se ponia encima de mis piernas y empezaba a amasarme.

Le hice cariño y empezó a ronronear.

Escuché que tocaron la puerta y rapidamente abrieron.

-Hijita hice un pie de limón, ¿no quieren que les traiga un pedacito?-. dijo la mamá de la Vale, + lindaa.

-Ya mami, gracias-. dijo. Me dio ternura.

-Mamona culia-. dije molestandola.

-Y a mucha honra-. me respondió chora.

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Pasaron las horas sin nisiquiera darnos cuenta y ya eran las diez.

En toda la tarde lo que más hicimos fue webiar y hacer pelea de almohadas, cómo unas pendejas de 10 años.

-Ya... me tengo que ir-. dije haciendo mueca de tristeza.

-Nopo, todavia es temprano-.

-Valeria, son las diez, mañana tengo clases-.

-Tenemos-. corregí.

-Cimarra po, a lo choro maldito, cómo los viejos tiempos-. si es más weta.

-No puedo po, mañana tengo prueba con el Doctor Simi-. se rió.

-¿Quién le puso ese sobrenombre weon?-. sonrió de lado.

-La Fran po, quien más-. negó.

Nos quedamos un rato sin hablar.

-Quedate a dormir-. me miró con su típica cara de perro degollao, no sé cómo lo hacía esta pinxe pendeja pero siempre me convencía weon, aún así me hice de rogar un poco.

-Pero nos vamos a quedar dormidas-. me excuse.

-No seai chanta po-.

-Pero si es verdad, ¿aparte tu crei que mi vieja me deje quedarme un día de semana?-.

-Ts, obvio po, la tengo aquí-. señaló la palma de su mano.

-Aparte siempre te quedai acá y llegamos sanas y salvas al liceo-. agregó.

Me quede callada y ella me observó con insistencia.

-Ya oh, pero vo le preguntai a mi amá-. dije.

Buscó su teléfono y la llamó.

-¿Halo tía?-. me miró sonriendo.

-Si, es que queria consultarle si la Domi podría quedarse a mi casa hoy, para que la ayude en biología y asi podamos irnos juntas en la mañana-.