Maximun

capitulo 1

Desperté al escuchar a mi padre llamarme desde la cubierta, la ventanilla de la habitación asoma a lo profundo del océano dándome un escalofrío, la cama sólida y el movimiento del barco no ayudo a mi descanso. Salí de la habitación y el cielo refulgía con un color azul perfecto y un par de nubes. Observe a mi padre Max sentado en un escaño. Sus dormilones ojos azules, cortabarba negruzca y una triguereña piel perfecta, pues ya a sus cincuenta y cinco años parece que nunca envejece.

Nos dirigimos a la isla Quimera, donde pretendemos crear una nueva vida, ahora que el reino Orbenova sabe que soy Maximun (un tipo inusual de hechiceros con capacidad de controlar cualquier elemento y a su vez la magia en su totalidad) desean obtener mi poder, ya que, la persona que asesine a un Maximun todo su poder será transferido a ella.

El hombre que timonea nos hace una seña anunciandonos que arribaremos pronto, ordenó mis cosas en el baúl antes de la llegada, esperamos a que el maestre atraque y bajamos,la arena en Quimera es ligera y brillante como pequeños diamantes, mi padre pagó al maestre por el viaje. Esta prohibido volar o teletransportarse por las islas, ya que solo los majestuosos dragones son dueños de los cielos.

A unos metros de la costa nos aguarda el bello bosque de Quimera, antes de venir investigue un poco sobre el lugar, aquí se ubica el Clan Sombra de luna y acogen a una familia de brujos que ayudan como curanderos, es muy difícil encontrar su aldea por el colosal tamaño del bosque, a su vez investigue sobre los Ent (hombres árbol) que abundan en Quimera y lo salvaguardan.

Nos adentramos en el bosque orientandonos con una brújula blanquecina con bordes carmesí, mi padre la lleva colgada en el cuello con una especie de leontina. Al parecer buscamos una antigua choza que pertenecía a mi tatara abuela, que era Ignis (hechiceros del fuego) al igual que mi madre. Después de un rato caminando sin respiro la encontramos, un camino de piedras azafranado conducía hasta la puerta de entrada, la pintura azulada estaba intacta como si no hubieran pasado casi cien años, las ventanas relucían con los rayos del sol, tienen forma circular y bordes atezados, con su elegante techo de dos aguas bermellón lisas.

Nos acercamos lentamente, Max tocó la puerta argentada y áspera, se escucharon unos pasos bajando desde la segunda planta, una bella mujer que al parecer por sus rasgos físicos es Magetus (Hechiceros del aire) abrió la puerta con delicadeza, tiene unos tiernos ojos jade, con pestañas largas y chinas, su delicada piel de porcelana pareciera que fuera a quebrarse con un toque, sus sedosos rizos castaños al hombro y esbelta figura.

-¡Buen dia!- Dijo la chica-.

-Hola, disculpa nos preguntamos si... -Me interrumpe -.

-Aha... ¡Claro! pero si tu deves ser Elena cierto.

-Si...  ¿ quien es usted ? -Pregunté confundida-.

-Soy Adabella hermana de Afra mucho gusto- Estirando el brazo para saludar-.

-¡Pero que!- Me altere- No sabía que mi madre tenía una hermana.

-Yo tampoco- Dijo Max mientras observaba a Adabella pasmado-.

-La muerte de Afra afectó a todos, pero me entere de ti Elena y la clase de hechicero que eres, el reino Orbenova no tardarían en encontrarlos, hace siglos que buscan el poder de un Maximun , me puse en marcha y viaje de Cascadas a Berlyn por ustedes sin embargo ya era tarde, son astutos por naturaleza y era evidente que Max te traería aquí - Sonrie y nos convida a pasar-.

El interior es muy elegante de colores antitéticos al exterior de la casa, hay un pequeño recibidor de color naranja de terciopelo con delgados bordes níveos, la pintura de la cocina es café claro y los muebles totalmente blancos. hay unas escaleras a la mitad del recibidor que conducen a la segunda planta, posteriormente se encuentra un corredor con dos puertas laterales y otra al final que son dos habitaciones y una ducha, los cuadros invaden cierta sección de la pared todos característicos de Berlyn.