23 days before I die 【 YM 】

day 20

La mujer de apariencia desgastada tragó duro abriendo lentamente la puerta de la habitación en la que estaba su pequeño hijo, sostenía en su mano el teléfono de su esposo y estaba por darse vuelta, arrepintiendose por solo hacer sufrir mas a su hijo, pero este la llamo con un debil susurro.

- Mamá...

La castaña miró con lágrimas en sus ojos a Jimin. Su cabello rosa estaba en un tono ya grisaseo, sus labios resecos y agrietados, su piel pálida, sus ojos sin vida...

- Cariño, es YoonGi -El pelirosa abrió los ojos con sorpresa e intentó incorporarse en la cama. La madre corrió para hacerlo recostar otra vez y besó lentamente su frente - Toma.

Dicho esto salió de la habitación dejando el celular en una de las manos del chico.

JiMin relamió sus labios acercando el objeto a su oído.

- ¿Hyung...?

- Enano ¿Qué tal va todo? -Los ojos de Jimin se iluminaron. Era él, era su hyung.

- YoonGi... -Siseó sin poder creerlo aún - Estoy bien, gracias por preguntar ¿Y tú?

La alegría del menor era tan grande que sentía que no cabía en su pecho.

- Pues, estoy aquí estudiando. Mi madre me ha pedido que te llame ¿Seguro que está todo bien?

 - Si, si. Todo... Está marchando bien.

Un silencio se hizo presente en ambas líneas. El sonido del monitor cardíaco era el único que se escuchaba y Yoongi apenas pudo notarlo.

- ¿Estás en el hospital?

Jimin cerró con fuerza los ojos preparándose para otra mentira. Un malestar en su estomago le provocó unas repentinas nauseas.

- Oh, si. Pero es solo un resfriado. Nada grave -Habló lo más normal que pudo, cerrando sus ojos.

- Uhm... Ent--

- Oppa, ya cuelga -La voz de una chica se escuchó del otro lado de la línea. Jimin arrugó su entrecejo por la repentina interrupción.

Unos sonidos de algo cayendo y siendo arrastrado se escuchó.

- Perdón por eso. Esta chica me sacará canas -YoonGi rió. JiMin lo siguió sintiendo un dolor en su pecho.

- Vaya, entonces ¿Tienes novia? -Dentro de sí no quería saber la respuesta. O tal vez sí.

- Nada serio, solo estamos saliendo. Ya sabes, encuentros y--

Cállate.

- Ah, ya. YoonGi debo colgar. Mi madre vino por el teléfono, lamento no poder hablar más tiempo contigo -El pelirosa aguantó lo más que pudo para no soltar un sollozo. Su corazón estaba roto, dolía su pecho. Se sentía en llamas.

- ¿Qué? Pero si no hemos habado ni un minuto -JiMin limpió sus lagrimas con las sabanas qe lo cubrían.

- ¿Cuando vendrás? -Sorbió su nariz sin mucho cuidado de que el mayor lo notara.

- Yo... ¿Estás llorando, cariño? -Una opresión se hizo presente en el pecho de menor.

- Solo dime que vendrás, hyung... -Cerró los ojos presionándolos y mordió su labio inferior soltando jadeos por el dolor que sentía. No uno físico, uno mental.

Deseaba poder acabar con eso tan rápido como le fuera posible, pero por mas que quisiera no podía dejar a YoonGi atrás así como si nada.

- Apenas pueda, tomaré un vuelo a Seoul. Luego uno a DaeGu ¿Seguro estás bien? -La voz angustiada de Yoongi solo puso peor al pelirosa.

- Solo quiero verte. Espero que vengas rápido hyung, te extraño.

Y con esto la llamada se cortó.

YoonGi miró a pantalla de su teléfono viendo la duración. 3 minutos.

Sacó la cabeza del baño alcanzando a mirar a la de cabellera purpura cerca, realmente la quería. Pero no tanto como a JiMin.

Nunca querría a nadie tanto como a JiMin.