Indeciso hasta la médula/ Yaoi/ Youkai Apartament

Capítulo 5

Yushi

Me levanté temprano. No tuve problemas para dormir, aunque he de admitir que estoy un poco nervioso con este tema de gustarle a, no solo una, sino a dos personas, que encima son mi mejor amigo y mi profesor.

Es un poco... ¿raro? Cómo lo diría yo... ¿poco creíble? Es decir, pensemos; creo que la conversación que tuvieron anteriormente era en realidad un tratado donde me gastarían una broma como esta, para hacerme reflexionar de no sé qué cosa de la vida para que al final todos acabemos riéndonos de esa moraleja. Sí, tiene que ser eso...

-¡Yushi-kun! ¿Listo para el entrenamiento?

-¡Sí!- respondí alegremente.

La rutina me ayudará a olvidar estos estúpidos pensamientos. Tengo que concentrarme y mejorar mis habilidades. Tal vez así pueda superar las expectativas que tienen en mí.

Tras aquello, desayunamos el delicioso desayuno de Ruriko-san y me fui derecho a la escuela. Aunque me haya propuesto ignorar estas acciones por parte de ambos, tengo algo de miedo de que lo vuelvan a hacer.

Sacudí la cabeza para evitar esos pensamientos tan... ahg, mejor me centro en no llegar tarde, o sino, tendré que pasarla de nuevo con Chiaki-sensei.

-¡Justo a tiempo!- celebré para mí mismo. Quién iba a decir que esta vez no pasó nada incluso, cuando pasé al lado de Chiaki me saludó con normalidad. Tengo el presentimiento de que va a ser un buen día.

Sentado ya en clase, el periodo de entrada y salida del colegio se hizo eterna. Pensaba que me iba a morir sino acababa, sin embargo, esto me ha hecho comprender que necesito unas vacaciones.

Para mi fortuna, hay un evento muy importante para la escuela en el que nuestro curso participará.

Si mal no he oído, es una especie de jornada de puertas abiertas de arte, todos haremos un recorrido por los artistas más conocidos en la historia de Japón y la influencia que tuvo en otros países.

-Vale... retiro lo dicho...- dije algo amargado para mí mismo. Esto es horrible, hemos tenido que hacer grupos por sorteo con otras clases y no me ha tocado ni con mi tutor, ni con nadie que conozco. Y para colmo la encargada de dirigir el proyecto que nos ha tocado, es Aoki-sensei.

Tierra trágame, no tengas piedad.

Todavía no me ha asignado una tarea. De alguna manera, tengo un mal presentimiento.

-Yushi-kun, vete a la sala de profesores y pídele que te den todos estos materiales- me ordenó secamente. Una vez que tuve la lista en la mano, se dió la vuelta y volvió con su séquito grupo de admiradores.

Una cosa buena, por lo menos me ignora.

Tampoco tenía muchas ganas de permanecer en esa aula. Yamamoto se unió al Club de Fans de Aoki-sensei. Les contó a todos lo "mal" que la tratamos y como sensei la rescató de nuestra "ignorancia" por llamarlo de algún modo coherente.

-Amo, deje que le ayude.

-No hace falta Fool. Me ayudaría más si te mantuvieras oculto en mi bolsillo y no salieses ¿y si alguien te descubre?

Era complicado ver con tanto material de lienzos, botes de pintura, broches y sobre todo, cintas de colores. Todo esto por encima de mi cabeza.

Siento que, si doy un paso más acabaré estronpándome contra algo.

-¡Ahg! ¡Lo siento!- Vaya, mi afirmación fue correcta, pero en vez de "algo" fue con alguien.

-¿Inaba? ¿Eres tú?

A duras penas asomé la cabeza de la montaña de cosas que cargaba y pude ver con quien me había chocado.

-¡Chiaki-sensei!- dije emocionado.

De repente, mitad de la montaña fue cortada por su mano, llevándola a sus brazos.

-De verdad... ¿a quién se le ocurre enviar a un solo alumno a recoger tanto material?- trono su lengua molesto- Y, ¿quién es el bruto que lo lleva todo de una y sin pedir ayuda?

-Bueno... y-yo...- que vergüenza, lo peor de todo es que es verdad... No me gusta pedirle ayuda a nadie sino es estrictamente necesario para no ser una molestia, muchas veces, me ha llegado a afectar el hecho de afrontarlo yo solo, siempre me llevo una reprimenda por parte de Hase.

-No te preocupes- me revolvió el pelo- tú eres así. Pero, la próxima vez, avísame. Estoy aquí para tí, me molesta ver que la persona que me gusta afronta y esconde sus problemas solo. Me pone algo inquieto que no compartas este tipo de cosas conmigo... maldición...- hizo un pequeño puchero acompañado de una mirada que expresaba enojo.

Es la primera vez que veo esta faceta de Chiaki. De alguna manera no puedo, parar de sonreír.

Eché una pequeña carcajada sin querer, entonces, me acordé del encuentro con Hase y me picó la curiosidad- Chiaki-sensei, me gustaría preguntarle algo.

-Adelante- sonrió.