Un Fanfic Más De Metallica Sin Sentido

Sailor Metallimoon.

Hola soy James Alan Hetfield, un chico de 18 años, tengo una Banda con mis mejores amigos.
Un día caminando a casa me encontré con una gatita color negro, me percaté que unos niños le habían puesto algo en la frente.

—¡REGRESEN ESCUINCLES!—grite, quite con Cuidado el adhesivo que traía la pequeña bola de pelo. La miré y ella salto sobre mi cabeza (El voló sobre mi con su rasho láser) se posó sobre una barda y me miro por uno escasos segundos, yo la vi pero me estaba poniendo nervioso, se iba acercando con cuidado.

—¡AHHHHHHH!—grite al escuchar el reloj—No debería estar perdiendo el tiempo de esta manera—salí corriendo de ahí, iba tarde al ensayo con mi Banda.

—¿¡OTRA VEZ TARDE JAMES!?—escuche la voz de mi amigo Lars.

Sonreí nerviosamente.

—¿Te enteraste de Sailor K?—preguntó Jason.

—¿Sailor K?—dije dudoso.

—Es una chica vestida de marinero—dijo Lars alzando las cejas.

Reí por su cara.

—Quería decirte qué hay oferta en la tienda de música—hablo Cliff.

—¿Es Verdad?—me asombre.

El asintió.

—Tenemos que ir enseguida, necesito
Un nuevo amplificador—sonreí.

~~~~~~~MEGAVERSO~~~~~~~

—¿COMO ES POSIBLE QUE AÚN NO ENCUENTREN LA PLUMILLA DE CRITAL DE PLATA?—esbozó la reina Mustaine.

—¡Discúlpenos reina!—sonaron al unísono Una voces.

—Reina Mustaine—se escuchó una voz.

—General Ellefson—sonrió.

—Permítame hacerme cargo de esta misión, mi súbdita la malvada Morgana a comenzado a reunir la energía de los humanos.

—Que así se haga Ellefson.

~~EN LA TIENDA DE MÚSICA~~

—Pasen, Pasen tenemos lo mejor en amplificadores, bajos, guitarras,
Baterías, etc—gritaba la chica que era la
Encargada de la tienda.

No se pero me percaté que no llevaba dinero suficiente, Lars se fue a comprar unos platillos nuevos.
Me acerqué  y como ya me conocía la empleada me hizo una gran oferta. Obviamente me exalte con el precio tan
Barato de ese amplificador y las personas que estaban ahí me empujaron, pude salir de esa bolita como pude. Regresamos a casa de Lars, charle un poco con mis amigos, me dispuse a regresar a mi hogar.
Fui a mi habitación y me recosté en la cama.
Justamente iba a tomar una siesta y escuche un ruido en la ventana.

—Vamos, no puedo dormir tan siquiera 5 minutos—expresen moviéndome.

Sentí pequeñas pisadas en la cama pero no hice caso.

—Vamos James levántate—escuche una voz.

Abrí mis ojos y era la gatita negra de la mañana.

—¡ESTOY SOÑANDO, ESTOH SOÑANDO!—grite.

—No, no lo Estas anda párate—las pequeñas garritas del animal me movían un poco.

—Tengo un regalo para ti—salto la pequeña bola de pelo y dejo caer un broche con forma de guitarra.

Lo tome y lo puse en mi chaleco.