O n c e

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Mark y Jinyoung estaban caminando por un campo cuando ya era tarde.

— Gracias, hyung. Ganaste por mí — Mark dirigió su vista hacia Jinyoung, quien caminaba detrás de él y se detuvo, ocasionando que el otro repitiera su accionar.

— Por supuesto. Yo haría lo que sea por la persona que quiero. Además, realmente me llegó el último apoyo que me diste - siguió caminando con su vista al frente.

— Mark... — se detuvo al escuchar la voz del pelinegro — ...te quiero — el pelirrojo volteó a verlo.

— Yo también te quiero, Jinyoung-ie. Jinyoung...

Fue acercándose al contrario, ninguno podía despegar su vista del otro, caminaron hasta quedar frente a frente. Ninguno decía nada, sus ojos decían todo, fueron acercando sus rostros hasta combinar sus respiraciones, entonces pasó, Mark cortó la poca distancia que les quedaba uniendo sus labios en un beso dulce, transmitiendo todo el amor que se tenían.

[...]

— Hyung... tú dijiste que tenía fobia al contacto humano, ¿no es así?

— Sí

— Cuando dijiste eso me sorprendí, porque las demás personas decían que era raro y que odiaba a las personas y me hacían a un lado. Me volví así... por mi hermano fallecido.

— Jinyoung, el pasado no tiene que ver con nosotros. Quiero que lo sepas.

— Está bien. Hace tres años, mi hermano estaba internado en el hospital, pero una vez se escapó. Caminó todo el día bajo la lluvia por el bosque sin tener un paraguas. Cuando lo encontraron, debido al frío y al viento tuvo un problema en sus pulmones... y murió. Mi hermano era bien parecido y muy inteligente. Siempre se ponía de mi parte. Pero... en algún momento cambió. Cuando mi hermano estaba en sexto de primaria y yo todavía estaba en segundo siempre jugaba conmigo, pero desde aquella vez, siempre me tocaba.

— ¿No te resististe?

— No lo hice. No podía. Porque mi hermano siempre cuidaba de mí. Pero ese día...

 ¡Ya llegué!  decía un Jinyoung de 8 años quitándose los zapatos, pero vio que también estaban los zapatos de su hermano en la entrada.

Fue a su cuarto y abrió la puerta, dentro se encontraba su hermano sentado en su cama, al escuchar la puerta abrirse volteó hacia ella, al ver a Jinyoung se levantó y caminó hacia él. Le acarició el brazo, deslizó su mano hasta llegar a su mano para tomarla y jalarlo hacia él, lo abrazó y lo aventó a la cama.

Jinyoung estaba boca abajo en la cama y su hermano encima de él mientras le acariciaba la espalda desnuda, y pasó.

Tiempo después llegó su mamá abriendo la puerta para saludarlos, al abrir la puerta del cuarto de Jinyoung soltó su cartera para taparse la boca con las manos impactada y con lágrimas en los ojos dejándola caer al suelo, provocando un sonido que despertó a Jinyoung y su hermano, quiénes dormían en la cama desnudos, con sus ropas regadas por el suelo de la habitación.

— ¿Aún odias a tu hermano? — dijo Mark abrazándolo mientras los dos se encontraban en la cama tapados únicamente con las sabanas.

— Tal vez — dijo el menor bajando la mirada — ¿Ya no me quieres?

— ¡Tonto! — dijo pegándole en la cabeza de forma amistosa y sonriéndole — ¿Acaso no te dije que te quiero?

— Pero... yo no valgo tanto... para que me quieras de esa manera.

— Te quiero, Jinyoung. Porque yo sé quién eres en verdad.

— ¿Quién soy en verdad?

— Sí

— Yo te admiraba, Jinyoung — dijo recordando la foto del menor cuando estaba más pequeño con su violín, foto que le había enseñado Shinwon — Desde hace mucho.

— ¿A alguien como yo?

— ¿Pero qué dices? ¿Te dije que te quiero no es así? Te amo... Jinyoung.

— Mark... yo también te amo - dijo sonriendo.

Se besaron de forma lenta para después separarse y sonreírse mutuamente.


Touch || ᴍᴀʀᴋᴊɪɴWhere stories live. Discover now