Capítulo 2: Revelando el misterio

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Ambos rivales se veían con distintos grados de odio. Mientras el demonio Oni observaba al joven cazador con una sonrisa repugnante en su cara, el otro lo veía con calma.

-Esto se pondrá interesante- Dijo mientras se limpiaba la sangre de su rostro - ¡Ahora es mi turno de atacar! -

-Miserable y orgulloso humano. No entiendes que eres inferior a mí. Ni tú ni nadie puede vencerme- El demonio sonreía aún mas -Y por haberte burlado de mi...

El sonido de un disparo hizo eco en la ciudad. Esta vez, el tiro le había dado en su boca.

-Espero que con eso te quedes callado de una buena vez-

El demonio tenía la mandíbula destrozada, no era suficiente para matarlo, pero lo había hecho enojar aún más, así que decidió lanzarse con toda su furia a su rival, con el hacha levantada entre sus manos y la sangre derramándose en la calle.

-Demasiado cerca- Dijo mientras esquivaba el ataque -¡Pero no es suficiente!-

A la par de sus palabras, descargó la munición restante del revolver en la cara del enemigo, cosa que hizo que toda la cabeza se destrozara por completo. Cuando el demonio cayó al suelo, se acercó para comprobar que estuviera muerto.

-Parece que por fin ha muerto- Dijo mientras exhalaba -Cada vez son más habladores y menos resistentes. ¿Me pregunto qué estará pasando?

Mientras miraba el cuerpo del demonio desintegrarse, una risa femenina a sus espaldas, provocó que se girara rápidamente.

-Vaya, eres muy fuerte- La voz delataba maldad -Además eres muy lindo-

- ¿Quién eres? ¡Muéstrate ahora mismo!

Al decir eso, una silueta femenina salió de entre las sombras. Su cuerpo era cubierto por una capa negra que el viento movía de un lado a otro, y su rostro, oculto casi completamente por la capucha, mostraba una sonrisa.

-Lamento el no haberme presentado- Dijo mientras hacía una reverencia -Soy Lady Altebar, Maestra de la Guerra y Hechicera Oscura-

-Tú cuerpo parece el de una adolescente, no el de una bruja-

El comentario solo le provocó una ligera risa, cosa que confundió al cazador, normalmente un demonio ya hubiese atacado al escuchar algo así.

-Eres muy divertido, pero no creas que, por ser un demonio, no soy educada, discúlpate y todo estará en paz entre nosotros. Tú no eres mi enemigo-

-Todos los demonios son mis enemigos- Dijo mientras le apuntaba con su revolver -Estás aquí para traer el infierno en la Tierra, sé todo sobre ustedes, y también sobre ti "Lady Altebar" -

-Perspicaz e inteligente, además de intuitivo, deberíamos salir algún día, creo nos llevaríamos bien-

-Por más bella que fueras ¡Jamás saldría contigo! –

-Muchos han dicho eso y ahora son esclavos míos. Presos de una pasión inalcanzable, pero contigo podría hacer una excepción. Acepta o las cosas serán muy difíciles de ahora en adelante, para ti y tus amigos- Dijo mientras soltaba una ligera risa, la cual denotaba la maldad en ella-

Su comentario lo sorprendió, pues era el primer demonio en saber sobre sus amistades. Eso lo dejo con muchas dudas.

-De acuerdo, está bien... - Mientras agachaba la cabeza-

El demonio solo sonreía mientras veía guardar el revolver dentro del abrigo, pero lo que no sabía es que no lo estaba guardando, sino recargando.

Los Inquisidores: El destino del cazador plateadoWhere stories live. Discover now