Capítulo 51:«Saturno,el preludio de una batalla infinita,la guerra de mundos»

441 27 7
                                    

—Saturno.— Habló el Dios Júpiter.— ¿Qué haces aquí?.

—Evitando que hagas una estupidez,hermano.—Contesto Saturno.

—¿Una estupidez?.—Pregunto.—Ya veo... Después de tu aventura con estos humanos,no me digas que les has tomado aprecio.

Saturno no respondió nada. A lo que Júpiter se hecho a reír.

—¡¿Es verdad?!.— Se carcajeó.—¡No lo puedo creer!, Saturno, Dios del tiempo, se ha apiadado de los humanos solo por sus aventuras como humano... De verdad que me das lástima.

—Hermano,sé que Hades corrompió tu mente desde la era mitologíca, pero piensa las cosas,¿Es esto lo que en verdad quieres?. Gracias a estos humanos me percate que ellos son tan fuertes y poderosos como nosotros,aunque no sean deidades o seres divinos.— Explicó Saturno.

—Evita tus sermones,si viniste a eso quiero informarte que pierdes el tiempo,no pienso detenerme hasta cumplir mi misión.—Dijo decidido Júpiter.

—Pero ya lo hiciste,asesinaste a la Diosa Atena.—Contesto Saturno.

—La anterior Atena,falta ella.—Señalo a la niña quien estaba protegida por el semblante de Sagitario.— Y así será hasta el fin de los tiempos,¡Mataré a todas sus reencarnaciones!

Saturno negó con la cabeza.

—¿En eso quieres gastar tanto poder que Chronos y Apolo te concedieron?.—Pregunto Saturno.— ¿Quieres perder así tu tiempo como humano?.

Es aquí donde todos los presentes se sorprendieron.

—¡Dejaré de serlo pronto!.— Exclamó.— Y cuando ese momento llegué,mi ira caerá sobre todos los humanos...

—¿Es un humano?.—Pregunto el santo de Pegaso.

—Así es.—Hablo Saturno.— Tal como nacío la Diosa Palas,el llegó a este planeta por la lluvia de estrellas de hace una década,desde entonces se estuvo preparando para su batalla, la cual a mí ver es estúpida y sin ningún fin.

—Me da igual lo que pienses hermano, cuando Zeus me mandó a este planeta,no fuiste capaz ni siquiera para ayudarme.—Le lanzó Júpiter.

—Por que me pareció el castigo perfecto para que aprendieras la lección,intentaste destronar a Zeus,¿Te das cuenta de lo estúpido que se oye eso?.—Le grito Saturno.— Es verdad,también fue mi culpa por criarte con los ideales que yo creía que eran los correctos,por eso mismo quiero pedirte perdón.

Júpiter alzó su ceja.

—Quizás es mi culpa,por eso los santos de Atena están aquí, Júpiter,para con tus ángeles y encierralos, están mejor encerrados,junto con el ejército dorado.—Le pidió Saturno.

—¿Ejército dorado?.—Pregunto Alena confundida.

—Es un ejército mayor al de los ángeles caídos.—Explico Saturno.— Siguen órdenes solo de Zeus,o de quién tengan autorización, se encuentran en algún lugar de la galaxia encerrados,aguardando a pelear otra vez,como en la guerra de Titanes o la guerra de los mil días de Ares y Atena.

Todos se quedaron estupefactos. Nunca pensaron que hubiera más allá de lo que ya conocían,pensaban que ya sabían todo. Sin duda,aún hay bastantes cosas por aclarar.

—Bien,detendré los ataques a la tierra,encerrare a los ángeles caídos restantes junto con el ejército dorado,se dónde está.—Hablo Júpiter.

—Te lo agradezco hermano.—Dijo Saturno.

—Pero con una condición.

Miro a los caballeros atenienses.

—Quiero pelear contra ellos.— Señaló con su dedo índice a los santos,incluido Seiya.— Si son capaces de al menos dañarme,me rendiré.

Saint Seiya Omega: Nueva Era [Libro #2]Where stories live. Discover now