06 | Enigma

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Duff.🌪

Me revento de una importante manera cómo ese hijo de puta la observaba de esa manera tan lasciva.

Asqueroso.

Y sí, se llevo un puñetazo de mi parte, lo eché a patadas de mi casa.

Ha pasado casi una semana de eso y Willow no me ha vuelvo a hablar. La he visto perdida en sus pensamientos, hablando con un chico pelirrojo en los recreos o en la biblioteca estudiando. La veo llegar en bicicleta, luego va a por un café y luego a su respectiva clase.

No es que la siguiera, sólo soy observador.

Willow sé volvió todo un enigma para mí estas últimas semanas.
Su sonrisa es tan cálida y sincera al igual que su risa contagiosa. Me llamo la atención el primer momento que la vi, y decidí ayudarla. Me parecía admirable, y sí, conocía a Sky Valentine de antes pero nunca he hablado con ella ni siquiera sabía de la existencia de Willow hasta que la vi chocarse con Coco Butera en el pasillo.

Coco había sido mi capricho, estuve totalmente enamorado de ella en secreto pero nunca se dió cuenta, pero prefiero seguir siendo su amigo al que recurre de vez en cuándo.

—McKagan —me llamo una voz detrás mía.

Volteo y me encuentro con los brillantes ojos de Beth, su ceño esta ligeramente fruncido y sostiene varios libros de química entre sus brazos.

—Connor —Le hago un ademán.

—Llevo más de dos semanas vigilándote. ¿Qué pretendes con mi prima? —Cuestiona.

Me encojo de hombros —Tan sólo le ayudo con algunas cosas.

—¿Esas cosas requieren ejercicio sexual?

Suelto una risotada y ella me fulmina con la mirada.

—Oh Beth, puedes estar tranquila. ¿Vale?

Suspira, aliviada —Está bien, pero no juegues con ella. ¿Entendido? Te cortaré las bolas antes de qué pase eso —Advierte.

Beth siempre ha sido muy clara, y siempre ha sido protectora con Willow.

Le sonrío y me doy la vuelta.

—Espera.

Alzo una ceja —¿Sí?

Ella evita mi mirada y posa sus ojos en el suelo cómo si fuera lo más interesante del mundo.

—Estuve hablando con Axl, ¿todo esto se trata de Sky?

Abro y cierro la boca de forma inmediata, llevo mis manos a mi pelo y aflojo la correa de mi mochila.

—No puedo decirte nada, Beth. Deberías hablarlo con tu prima.

—Hace tres años qué Sky se fue por voluntad propia, tengo miedo que se haya metido en otra piel que no es la suya. Sí estáis buscándola, contar conmigo, por favor —Pide.

☁☁☁☁


Ella se cree que se esconde, no estoy seguro de quién está huyendo está vez, temo que sea de mí. Finjo que el libro de la estantería es muy interesante, pero no puedo quitarle la vista de encima, es un sentimiento que conozco muy bien. Su coeficiente intelectual seguro que es el más alto de su año, no obstante, no descubrió que la miraba. Siempre la vi esconderse, por alguna razón siempre lograba encontrarla. Me paraba justo en este sitio, ella siempre se refugia en sus libros.

—¿Vas aguantar más días sin hablarme? —Susurro en su oído.

Noto cómo se estremece.

—D-Duff —Tartamudea y cierra su libro lentamente.

Sweet like candy «Duff McKagan» ✔Where stories live. Discover now