Relato #14 La chica que vestía de rojo

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Se sentía la chica más hermosa del pueblo, y es que lo era. Todavía era muy niña, pero a sus 17 años ya conocía los más bajos placeres de la vida. Siempre vestía de rojo, porque ese color la hacía sentir más sexy. Ella sabía esconder muy bien sus fechorías, siempre le decía a su madre que iba a ver a su abuela que vivía en el bosque, cosa que increíblemente era cierta.

Se iba a un hotel-bar llamado "El Bosque", de propiedad de su abuela, el cual quedaba en medio del bosque, muy conocido por los chicos y chicas rebeldes del pueblo, ya que en ese lugar podían hacer todo lo que querían y sus padres jamás se enteraban.

Su abuela, alcahueta de todos esos jovencitos desorientados, solía decirle la Chica Roja, ya que siempre andaba con una capa roja con capucha, la cual ocultaba el rojo atuendo sexy, inapropiado para su edad, que llevaba debajo.

Un día, un hombre extraño se apareció en "El Bosque", tenía un encanto especial, entre salvaje y misterioso, y además, era tentadoramente guapo. De él no se sabía nada, ni su nombre, solo que le decían el Lobo. Se decía que era un asesino, que era un contrabandista, en fin, pero nadie tenía certeza de a que se dedicaba. Tenía la cualidad de atraer de un solo vistazo a la mujer que quisiera.

Así les paso a la Chica Roja y a su abuela, quien a pesar de su edad, era una mujer muy hermosa. Se sabe que la abuela se encerró un rato con el Lobo, pero el salió y de ella nunca más se supo nada. En la habitación donde se encerraron solo se encontró una gran cantidad de sangre.

A la Chica Roja le advirtieron que no se acercara al Lobo, pero pudieron más su curiosidad y su deseo. El Cazador, un hombre que se había ganado ese apodo por cazar bestias terribles y extrañas, bestias que eran dignas de películas de terror, y que de vez en cuando llegaba a "El Bosque" a buscar a alguna niña linda para pasar el rato, era el que más advertía a la Chica Roja sobre el Lobo.

La tonta niña, que de por sí era bastante alocada, hizo caso omiso de todos los consejos que le dieron, pues era muy grande la pasión que le inspiraba el Lobo. Se fue con él a un lugar apartado, y lo que creyó iba a ser la aventura de su vida, se convirtió en una terrible pesadilla.

El Lobo pasó de besarla y acariciarla apasionadamente, a mirarla como un depredador a su presa. Le crecieron las garras, los dientes y las orejas, y se convirtió en una criatura salida de las más siniestras pesadillas. Lo único que ella pudo hacer fue gritar ante tan terrible visión.

El Cazador los había seguido, pero les perdió la pista, escucho los gritos de la Chica Roja y logró llegar a donde estaban en el momento justo. El Lobo apenas iba a morder una de las piernas de la Chica Roja. El Cazador no lo pensó siquiera, apuntó y disparó. La bala de plata dio justo en el corazón de el Lobo y este cayó muerto, volviendo a ser el atractivo hombre que había cautivado a tantas.

La Chica Roja volvió a su casa y continuó su vida normal. Un día se fue con el Cazador, el cual era muy atractivo, ella regresó, pero de él nunca más se supo nada. Lo mismo pasó con muchos atractivos hombres y muchachos, y con otros no tan atractivos, hasta que el pueblo llego al punto de quedarse sin hombres.

¿Qué fue lo que paso con ellos? Nunca se supo, nunca más se volvieron a ver, en cada caso lo único que se encontró fue un gran charco de sangre, en el lugar donde estuvieron con la Chica Roja.

Mi primer relato con un toque picante XD

Esta desquiciada, tonta y rara antologíaTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang