One Shot [+18] - BTS

EP.9

—¿Podemos hacer el amor antes del trabajo?

—Vamos amor, no queda tiempo, tal vez cuando lleguemos en la tarde.—Hoseok estiraba para luego sentarse sobre la cómoda cama.

—Por favor.—Hiciste un pequeño puchero acercándote a sus labios.—Algo rápido.—Acariciaste sobre su bóxer para sentir la erección mañanera.

—No puedes aprovecharte de mi, soy débil en las mañanas.

—Solo un poco amor.—Bajaste su bóxer y lamiste el glande intentando provocarlo.

—Mierda __.

Sonreíste, luego llenaste tu boca con el miembro entero mientras veías a Hoseok observándote, se retorcía de placer aunque lo quisiera disimular.
Para ti, últimamente era imposible despegarte de la cama sin antes hacer el amor.
Para estimular un poco mas comenzaste a mover tus manos al igual que tu cabeza.

Con sus cálidas manos te tomo del mentón y te acerco a su boca para poder besarte.

—¿Te gusta jugar con fuego?. Caprichosa.—Introdujo su lengua en medio del beso y de repente te lanzó hacia atrás, te agarro de las caderas y comenzó a hundir su erección en tu intimidad.

Tus jadeos se hicieron presentes y con ellos las embestidas.

—Mmmgh...así me gusta...A-ah...—Decías entre gemidos mientras te sostenías de su fornida espalda.—¿Y ahora quien se está aprovechando de quien?.—intentabas sonreír pero tu cuerpo estaba lleno de placer.—Mas rápido, por favor!.

—E-eres perfecta. ¿Te lo he dicho alguna vez?.—Beso la comisura de tus labios tiernamente y luego escondió su rostro en tu cuello, el vaivén aumentaba y era cada vez más placentero para ambos.

El respiraba con dificultad a causa de la velocidad que empleaba para complacerte a ti, su mujer.
Se detuvo para poder colocarse en una posición más cómoda para ambos, contigo sobre el. Se apoderó de tus labios y con una mano masajeaba tus senos, eso te encantaba.
Luego fue tu turno de controlar los movimientos, te retorcías e intentabas saltar levemente sobre el mientras admirabas su fisonomía, cada parte de el era perfecta. Te hacia sentir única en el mundo.

—Te amo.

—Sabes que te amo mucho más.—Tocó tu pequeña barriga sonriendo ampliamente al sentir que estaba algo dura.—Soy el hombre mas feliz del mundo. Woo...¿¡Qué haces!?.

Lo tomaste por sorpresa y te diste la vuelta, para volver a tenerlo sobre ti.

—No seas romántico ahora. Quiero que me acabes.

—Por eso te amo tanto.—Sonrió y deposito otro beso sobre tus labios algo húmedos.

Comenzaron las estocadas rápidas donde ambos se agitaban y perdían el aire, mientras se devoraban ciegamente.
Ninguno podía evitar pensar que estaban hechos el uno para el otro. Entre besos y caricias se sentías protegidos, como si nada fuera a acabar con el amor que se tenían.
Hoseok acomodó tus piernas y masajeo tu clítoris para provocarte aun más.
Tu estómago se contrajo, en realidad estabas cercana a un orgasmo al igual que tu contrario. Te acercaste a su boca pero era imposible besarlo sin gemir en sus labios.

—Mmm...sí.—Tu respiración era agitada y tus mejillas tomaban un leve color rosa.

—Me encantas...A-aah bebe.

Su esencia lleno tu intimidad, llegaron al orgasmo juntos.
Hoseok se recostó a tu lado, rodeándote con sus brazos mientras acariciaba tu pequeña pancita. Se veía muy feliz.

—¿Que te parece si faltamos al trabajo?—Bromeó Hoseok.