Capítulo Once: Me gustas.

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—Anoche fue más que genial.- dije mientras sonreía.—Mi padre estaba encantado con Scott, incluso lo invitó ese fin de semana a pescar.

—¿Jim lo invitó a pescar? Pensé que eso solo lo hacían ustedes dos.-Rachel frunció el ceño.

Me encogí de hombros.—También yo, pero todo sea porque se lleven bien.

Arrastré mis pies por los pasillos de la escuela enganchada del brazo de Rachel, estaba tratando de parecer feliz pero en realidad no lo estaba, no del todo. La cena de anoche fue perfecta, mi padre y Scott charlaron y se rieron bastante, el problema era yo. No paraba de pensar en Dylan, él estuvo corriendo en mi cabeza de un lado a otro. No sé por qué lo dejé besarme.

Porque eso es lo que querías.

Ahora mismo estoy odiándome. Me dejé llevar, me dejé llevar por el maldito momento. Un momento que no voy a olvidar fácilmente, sé que va a ser difícil, anoche fue una prueba de ello. Pero no puedo negarlo, me gustó y es por lo que ahora estoy asustada.

No sé qué pensar, no sé cómo voy a manejar todo esto, no quisiera detenerme, no ahora que por fin, después de un año él está volviendo a mí, de alguna manera u otra pero allí está Scott, ese chico genial por el que estoy sintiendo cosas y el que se ha encargado de hacerme sonreír de vez en cuando.

—De acuerdo, ¿Hay algo más que quieras decirme?

Nos detuvimos frente a su casillero, Rachel estaba entre sustituir sus libros y mirarme.

Solo negué con la cabeza.

—Venga Emma, sabes que te conozco, hay algo que te preocupa ¿Por qué no me lo cuentas?

Suspiré, no me gusta ocultarle las cosas a Rachel pero no puedo contarle lo que pasó entre Dylan y yo. No sé cómo se lo vaya a tomar.

—Es solo que me aterra que papá y Scott vayan a pasar un tiempo juntos este fin de semana.- mentí.

Ella rodó los ojos.—Me acabas de decir que anoche fue perfecto ¿Por qué te preocupa entonces? Tu papá en genial y Scott parece ser bueno.

—Pienso que te gusta Scott cada vez más.- traté de sonreír.

—¿Qué puedo decir? El chico es.. Hmm, una especie de tipo genial.

—¿Una especie de tipo genial?

Ella asintió.—Como sea, necesito que me ayudes con algo. Este fin de semana es mi aniversario de 10 meses con Peter y no he pensado en algún regalo.

—¿Y qué te hace pensar que yo sé sobre que regalarle a un chico?- alcé una ceja.

—Jesús Emma, tienes que ayudarme con esto, me estoy volviendo loca.- dijo con tono dramático.

—Puedo decirle a Scott que te acompañe a comprarle algo, es un chico y puede que te ayude.

—¿Scott? No lo sé.- dudó.

—Hace 5 segundos estabas diciendo que es una "especie de chico genial" y ahora no sabes?

Puso los ojos en blanco.—Está bien, pero más vale que me ayude a elegir algo lindo.

La campana sonó y chasqueé la lengua, tengo inglés. Es una de las pocas clases que no comparto con Rachel, nos despedimos y cada quién se fue directo por un pasillo. Estaba tratando de ignorar los comentarios, aun me llamaban "puta" ¿Cuándo se cansarán de decirlo? Rodé los ojos y traté de pensar en otra cosa, algún día ellos me van a dejar en paz.

—Eh, bonita.

Alguien había echado su mano por encima de mi hombro. Miré hacia arriba y me encontré con esos ojos azules (o grises) y la sonrisa chueca de mi chico.

Don't You Remember?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora