VI.

1.1K 111 1
                                    

nacho y mi mamá estaban sentados frente a mí. crucé mis brazos y los miré, seria.

—¿qué quieren ahora? ¿me van a decir qué tengo un hermano? ¿o qué lo abortaste? —a mi mamá se le pusieron los ojos llorosos. ¿ella llorar? yo tendría que hacerlo, a mí me mintieron.

—no seas así con nosotros —dijo nacho.

—¿y vos quién carajo sos para decirme qué hacer?

—tu papá, elena.

—¿mi papá? en mis casi diecisiete años de vida nunca estuviste presente matias, no compartimos nada excepto la sangre —él me miro fijo—. ¿esto querían? ¿qué discutamos? —me paré de mi silla y me fui.

cerré la puerta con un portazo y me senté en el cordón. saqué un cigarrillo de mi campera y me di cuenta que no tenía fuego.

—¿necesitas esto? —damián me paso un encendedor. prendí el cigarrillo.

—gracias —exhale el humo hacia la cara de dam y sonreí.

—hace mucho no fumabas, lena.

—es que no tenía razones para hacerlo. pero ahora si —me encogí de hombros.

—no te cagues la vida por boludeces.

—¿boludeces? —me paré—, ¿te parece una boludez esto?

—no, per...

—entonces cállate, vos no sabes que se siente.

—¿no? boluda, mi viejo me abandonó cuando tenía siete años. él era todo para mí. y se fue sin dejar ni siquiera un número para llamarlo, me dejo una puta carta pidiéndome perdón y diciéndome que era culpa de mi mamá. ¿cómo te pensas que me sentí? siete años tenía, necesitaba a mi viejo y sin embargo nunca me rebele, nunca culpé a mi mamá de eso. aprendí a superar y darme cuenta que si no me querían contar las cosas era porque no necesitaba saber eso. si te lo ocultaron fue por esta misma razón, porque te estás convirtiendo en otra persona —mis ojos se aguaron.

—esto es solo el principio, dam —tiré el cigarrillo al piso para luego pisarlo y entré a mi casa.

bastarda » dam. [2]Where stories live. Discover now