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Fred Weasley se veía decaído, había discutido con su novia. A pesar de qué antes era todo un 'galán' cayó en manos del amor. Cresmunt era una maravilla de chica, además de amable y comprensiva
—Fred, no puedes quedarte todo el día ahí.—consoló su amigo James. El pelirrojo estaba, literalmente, acostado en el suelo del gran pasillo del castillo. James había colocado un cartel qué decía "CUIDADO: SUELO OCUPADO POR PELIRROJO CON PROBLEMAS DE AMOR." para qué aquellos qué iban corriendo no se tropezaran con Fred, muy considerado. Por otro lado, Lysander y Lorcan estaban sentados contra la pared mientras Frank estaba parado recostado en esta.
—¿Que se supone que hacen?—preguntó Albus llegando junto a Scorpius. El rubio miró a Fred extrañado, este se quejaba en silencio.
—Cresmunt y Fred discutieron.—respondió Lorcan rodando los ojos. Albus entendió enseguida el porque de todo este dramatismo.
—Qué mal.—respondió encogiéndose de hombros.
—¿Te quedarás ahí toda la vida?—preguntó Frank. Todos miraron al chico en el suelo esperando una respuesta.
—Un año luz como mínimo.—murmuro el pelirrojo—O hasta qué Cresmunt me ame otra vez.
Antes de qué alguien pudiese responder la voz de una chica interrumpió al grupo de chicos.
—Pues tendrá que ser la segunda opción.—sonrió ella acercándose. James olvidó que su amigo estaba teniendo una crisis y observó a la chica que desconocía. Fred, bueno, todos la miraron confundidos por lo dicho.
—¿Qué?—preguntó sin entender el porqué de sus miradas.
—Haz dicho "tendrá que ser la segunda opción." ¿Por qué?—preguntó Lysander un tanto extrañado.
—Oh, simple, un año luz no define el tiempo, es una unidad de distancia,los astrónomos usan la velocidad de la luz para medir qué tan lejos están los objetos en el espacio—explicó mientas miraba a Fred de arriba a abajo. El enarcó una ceja.
—¿Te sientes bien?—preguntó de la nada ella. Lysander rió por lo bajo.
—No, estoy en el suelo con el corazón roto porque amo estar así.—murmuro el chico con sarcasmo.
—Oh, por un momento creí qué te sentías mal, tienes cara de querer vomitar.—y Lysander reventó a carcajadas seguido por Frank y Scorpius.
—¿Cara de querer vomitar?—preguntó Fred ofendido—Es mi cara triste. ¡y era sarcasmo!
—No soy buena con las expresiones,—miró a su alrededor—ni con el sarcasmo.—se encogió de hombros para después irse.
—Es perfecta.—susurró James quien veía como su cabello atado en una coleta alta se agitaba por los pasos largos que daba—¡Oh por Merlín! Ella puede ser mi pelirroja.
—eh ¿hola?—levantó su mano Fred—es rara.
—Calla y deja qué el niño se emocione.—Scorpius le dio un zape al pelirrojo.
—James... ¿a donde vas?—preguntó extrañado Albus al ver como su hermano se alejaba.
