Capítulo 15
Narra Malú
- Hemos llegado señorita.
Asentí, sabía perfectamente que esa era el destino que minutos antes le había indicado.
- ¿Puede esperar aquí para llevarme al aeropuerto?
- Claro, no se preocupe.
Le agradecí el gesto antes de bajar del coche, cerré la puerta tras de mí y me dirigí hacia la entrada de aquel portal. Llamé después de pensármelo un par de segundos, pero, estaba ya allí, y... no tenía nada más que perder. Esperé unos segundos y noté como alguien había contestado el telefonillo, miré la cámara que tenía enfrente y al instante me abrieron la puerta. Cogí aire en aquel ascensor con el que estaba subiendo a su casa. No tenía muy claro cómo le iba a decir aquello... aquel adiós.
Llegué a su puerta, me extrañó que estuviera abierta, llamé al timbre y un segundo después la puerta se abrió.
- ¡Malú! ¿Qué... qué haces aquí?
- Hola Ana...
Me hizo pasar después de darle un par de besos, la noté extrañada al verme ahí, pero, no entendí muy bien el porqué.
- ¿Está Vanesa? (Pregunté)
- ¿Vanesa? (Asentí) Peor... ella... (Se movió un poco nerviosa por la sala, volvió a mirarme) ¿No te ha llamado?
- ¿A mí? (Asintió ahora ella)
- Si... me dijo que tenías el móvil apagado...
Reaccioné, miré mi móvil y efectivamente estaba apagado desde la noche anterior. Miré a Ana.
- Lo está. (Contesté enseñándole la pantalla mientras lo encendía) ¿Dónde está Vanesa? (Se rio)
- Creo que... está haciendo lo mismo que tu... (Puse el pin del móvil mientras miraba de reojo a Ana)
- ¿Lo mismo? ¿A qué te refieres?
- Bueno... ¿A qué has venido? Ha buscarla, ¿no?
Iba a contestarle, pero el sonido de mi teléfono interrumpió mis palabras. Más de diez llamadas perdidas, cientos de notificaciones en las redes sociales, y un mensaje de voz.
'Malú... Malú joder, lo siento... Soy, soy idiota. Se acabó todo. Las tonterías, las mentiras, los miedos... Malú... ¡Sí! Estoy dispuesta a todo. A todo si es contigo.'
Miré a Ana, mis lágrimas no paraban de salir por mis ojos, me sonrió, ella también emocionada. Puso su mano encima de las mías, unidas con mi teléfono. Me miró.
- ¿Dónde... dónde está?
- Ha ido a buscarte... (Guardé mi teléfono, seguía mirándola) Estará llegando a tu casa.
Salí corriendo de su piso, y como le pedí el taxi aun me esperaba en la puerta, le di la dirección de mi casa y corriendo la llamé. No me contestó. Quizás aún no había llegado a mi casa, quizás... Cogí de nuevo mi teléfono y llamé a Alba ella aun estaría allí. O, al menos, eso esperaba.
- ¡Alba! ¿Y Vanesa?
- Acaba...
- ¿Ha venido? Dime... dime que está ahí... No. No. Alba... Dile que se quede quieta.
- Malú...
- Dile que estoy de camino.
- Malú...
- Dile que no tardo nada.
- ¡Malú! (Me quedé callada) Ha venido sí, pero... ya no está aquí.
- ¿Se ha ido a su casa de nuevo? (Apresuré a decir)
- No lo sé... Ella... No me ha creído cuando le he dicho que no estabas y ha ido a la habitación. (Cogió aire) Ha visto el armario vacío... No me ha dejado hablar, me ha mirado y antes de que pudiera frenarla ha dado un portazo y se ha ido.
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Parece que estás dos, por mucho que quieran, no se encuentras... Ni para decirse adiós.
Penúltimo capítulo.
Llega el final.
Pero el inicio de otra, y os voy a dejar otra pista... Os veo un poco perdid@s.
'Me hizo llorar al besarme muy lento...'
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Me rindo por última vez
Fanfiction'Quizás rendirnos es la solución. Acabar con todo. Sin ninguna explicación. Rendirse por última vez, por algo o ante alguien.' Espero que lo disfrutéis, siempre con todos mis respetos.