Capitulo 31: Pensamientos positivos

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Ranma seguía en el estanque con esa expresión de tristeza por haber perdido a las dos personas que mas amaba, el guía de Jussenkyo la veía con desconcierto pero no intervino pues el chico conocía lo que pasaba si entraba a algún estanque maldito

--Ahora entiendo todo... todo es mi culpa- dijo la pelirroja mientras tomaba fuerzas y salia del estanque --Debo buscarlo...- estaba decidida ira a ver a Ryoga para aclarar las cosas

-¿Se encuentra bien?- pregunto el guía sin contener mas la curiosidad, debía estar loco como para querer entrar al estanque por su cuenta

--Si, necesito agua caliente- pidio, no podría hacer un viaje de búsqueda siendo una chica porque caminaria el doble de tiempo con esas piernas tan cortas

-Claro- el guardia seguía sin entender nada pero la llevo hasta su casa para darle el agua caliente --Aqui tiene- dijo mientras le daba la tetera

La pelirroja tomo el agua sin agradecer, no tenia tiempo para hacerlo, cerro los ojos y se mojo, cuando volvió a abrir los ojos para tomar sus cosas e irse vio algo que no deberia, su vista se fijo en aquellos pechos femeninos que aun después del agua caliente seguían ahí

-¡¿Pero que demonios pasa?!- pregunto sorprendido y algo asustado -¡¿Que rayos tenia esa agua caliente?!- tomo al guardia de la camisa para verlo de frente

-Na-Nada tranquilo por favor- pido para no ser golpeado

-¡Entonces expliqueme que paso!- lo soltó de su agarre pero seguía molesto, pensó que había usado alguna poción para hacer permanente su transformación

--No tengo idea, eso nunca había sucedido- decía la verdad, no sabia de nadie que no pudiera volver a su cuerpo original a menos que estuviera confundido

-¿Como que no tiene idea?- seguía en espera de una buena razón

-¿Antes de volver a entrar al estanque usted ya estaba curado?- pregunto, la idea de que al caer dos veces en el mismo estanque volvía la maldición permanente vino a su mente pero no conocía ningún caso de esos, lo que lo hacia solo una suposición

-¡Si! Y también pase por la confusión de todas las maldiciones- ahora tenia un nuevo problema, parecía que los perseguían

--Lo siento, no puedo ayudarlo, no encuentro una explicacion- se disculpo el guardia poniéndose de rodillas e inclinandose

Saotome estaba alterado e iba a darle un golpe por su inservible ayuda pero un recuerdo vino a su mente "Que les valla bien y si tienes algún problema no dudes en llamarme prometido" 

--¡Esa vieja debe saber algo!- estaba convencido tomo su mochila y salio del lugar

La pelirroja estaba mas confundida que molesta, no entendía porque no podía ser un hombre, las cosas iban mal, sus planes eran convertirse en una mujer para poder cuidar a los gemelos y cuando tuvieran mas edad volvería al estanque encantado para curarse, así les hablaría de Akane quien era su madre y el seria su padre, como debe de ser, así tendría el recuerdo de ambos y no olvidarían a la peli azul

Ese mismo día por la tarde, consiguió llegar hasta el lugar en donde estaban las tribus amazonas, no fue difícil encontrar a Cologne

--Prometido... ¿Que te paso?...- pregunto sorprendida al ver a la chica pelirroja 

--Necesito su ayuda vieja- admitió

--Pasa por favor- invito amablemente, sabia que tarde o temprano el vendría por su ayuda -¿Porque eres una mujer de nuevo?- pregunto confundida

--Bueno... estaba entrenando y... caí al estanque otra vez- mintio, no quería revelar sus planes esos serian secretos y por un corto tiempo cuando los gemelos tuvieran 5 años tal vez volvería a ser un hombre --Volvi a mojarme con agua caliente pero no pude volver a ser un hombre-

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