Miro su reflejo por última vez esa mañana, a pesar de que sabía que ser albina ya era normal, muy dentro de ella sentía que no lo era, quería saber la razón pero Killian le dijo que eso pasaría cuando tuviera 19 años, esa era la edad indicada, pero ¿segun quien o que?, saco esos pensamientos de su mente tomó su bolso y corrió escalera abajo para tomar el desayuno que Seth posiblemente ya haya preparado, al entrar al comedor pudo ver esos ojos grises que tanto amaba, Killian dirigió su mirada directo a ella la sintió desde que abrió la puerta de su cuarto lo cual le causó escalofríos
-deja de pensar que no eres normal- dijo de manera suave, ella ya acostumbrada a que el supiera todo de ella solo ladeo la cabeza a manera de disculpas, se le hacia raro que solo entre ellos pudieran ser por así decirse tierno, ya que a todos los demás los trataban de manera desinteresada, a los 16 años ya había entrado por completo al negocio de Killian, la mafia, no sólo drogas, armas y sangre es lo que veía cada día, también prostíbulos donde ella es la encargada de cobrar y también debía golpear a aquellos que no sabían que era intocable, la marca en su cuello le da privilegios pero también enemigos de los cuales debe cuidarse, sin decir una palabra se sentó junto a Killian, no sin antes besar su mejilla recibiendo una leve caricia de su parte, Seth apareció con el desayuno que a el le encanta preparar
-aquí tienen - dijo sonriendo
-gracias- respondió ella, luego dirigió su mirada a Killian - hoy debo ir a "Lips"- Killian fruncio el entre cejó
-odio que vayas allí, siempre llegas con aromas diferentes y de hombres que no son yo - apretó los dientes, Nirvana le miro con ternura y sonrió
-pero sabes que ninguno me toca al menos de que no sea de la ciudad y que el único hombre que me interesa eres tu- el corazón de Killian latio con fuerza estaba feliz de oír esas palabras
-tienes 18 años, pero te sigo viendo como la pequeña niña a la que debo proteger- Nirvana asintió con la cabeza- ahora ve por la paga que deben, me informaron que tienen nuevo dueño - nuevo dueño significa que no sabe las reglas, no sabe quién es ella y no sabe que es lo que puede hacer
-eso me entusiasma demasiado y lo sabes - comenzó a comer rápido, el juego que se venía ahora era su favorito, hacer que el nuevo jefe crea que ella es solo un peón le encanta pues siempre se niegan a darle el dinero a los peones, ellos siempre prefieren a los jefes y eso es un error, la mayoría de las veces el último, pero hoy ella se sentía con ganas de dejar vivir pues si muere muy rápido no es divertido
-procura no hacer mucho ruido, lleva el silenciador Nirvana- Seth le pasó el objeto y ella lo guardo en su bolso feliz.
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Como siempre entró sin guardias pues en ese lugar ella era la más peligrosa, los que ya la conocían la saludaban con la cabeza pero sin que ella se diera cuenta a sus espaldas le hacían una pequeña reverencia, subió al segundo piso y luego al tercero por el ascensor privado, cuando la puerta se abrió pudo sentir el característico aroma a tabaco y alcohol, entró esperando ver al nuevo "Dueño" Del lugar y lo hayo pero no era un hombre era un por así decirlo joven adulto no pasaba los 25 años, el se giro para verla y sus ojos se abrieron a tope la sorpresa estaba plasmada en su cara
-Nirvana? -la voz del chico le parecía conocida pero no sabía de donde, no entendía por que sentía algo dentro de ella al ver a ese joven
-como sabes mi nombre? Quien eres?- su voz sonó demasiado fuerte y ruda tanto que el chico abrió la boca con asombro, era rubio, de ojos color verde musgo con tonos dorados, alto y fuerte
-mi nombre es Kyos y soy tu hermano mayor- el impacto de aquella confesión hizo que a la cabeza de Nirvana llegaran pequeños recuerdos de el cuando ella era apenas una niña de 3 o 4 años, su cuerpo cayó al suelo de rodillas, se le dificultaba respirar, sintió la puerta del ascensor abrirse pero no podía ver quien era y lo intuyo, pero antes de reaccionar pudo oír un gruñido que reconocía a la perfección, pudo ver la figura de Killian frente a ella a punto de lanzarse contra Kyos quien solo estaba allí parado
-Killian... -el se giro y ella pudo ver sus ojos, habían cambiado de color como aquella vez cuando era niña, el se acerco y de rodillas frente a ella acarició su rostro, los guardias ya tenían a Kyos apuntando con sus armas lo cual puso alerta a Nirvana su corazón comenzó a latir desenfrenado y Killian podía oírlo
-estas bien? Te hizo algo?- pregunto serio y con la mandíbula tensa, su pequeña se veía tan frágil como aquella vez que la encontró y eso le provocó una ira tremenda, que un chico provocara eso en ella no era normal
-es mi hermano - logró articular, cerro los ojos y cuando los volvió a abrir Killian pudo presenciar que ya no eran dorados, eran de un brillante y hermoso gris, tanto que parecían plata líquida, su boca se entre abrió por el asombro y sintió su cuerpo arder, lo sabía siempre lo supo, desde aquel día sintió que era ella, sus instintos reaccionaron antes que su cabeza y la beso, por primera vez en todos esos años la beso, Nirvana estaba sorprendida, extrañamente emocionada, extasiada, su primer beso y con Killian, había imaginado ese momento tantas veces y ahora era una realidad, Killian se apartó de ella y sin dejar de mirarla sonrió
-ya pueden retirarse- lo dijo suave y calmado, los guardias asintieron y salieron de allí, puso un brazo alrededor de Nirvana y la ayudó a ponerse de pie, Kyos no entendía lo que pasaba, eso hasta que vio con más atención a Killian y su boca se abrió por completo, tenía ante el a quien jamás en su vida pensó conocer- tu nombre
-Kyos Pitkis, 23 años su... - antes de que terminara Killian lo hizo callar y con un gesto que Kyos entendió pudo comprender la situación
-tu aroma confirma que eres quien dices ser, solo por eso te perdono la vida pero no esperes tratos especiales de mi parte por ser hermano de Nirvana - Kyos asintió- se bienvenido- de un momento a otro Nirvana había salido de los brazos de Killian y sin pensarlo dos veces le propinó un puñetazo a Kyos que lo mando contra el muro, Killian mordió sus labios al ver la escena, ella lucia tan hermosa en esos momentos, tan deseable pero no, sacudió su cabeza y decidió actuar, ese no era el momento ni el lugar pues ya era momento de que la verdad se supiera, el inicio estaba por suceder y ella en esos momento era peligrosa
-por que demonios te fuiste!, nos dejaste a mi y a mamá a merced de ese lunático! - grito con furia, Kyos quien se levantó casi como si nada la miro y entendió por que tenía esa fuerza
-estaba reuniendo fuerzas para sacarlas de allí, cuando llegue tu no estabas y mamá tampoco, solo vi a ese bastardo con una bala en el cráneo - Nirvana relajo el cuerpo y sonrió de lado, fue una sonrisa tan espeluznante que Kyos tembló y sin saber que hacer miro a Killian quien sonreía con orgullo
-yo puse esa bala en su cabeza- término de decir aquello y su cuerpo no soporto más, en brazos de Killian cayó una inconsciente Nirvana
-ella no lo sabe, verdad? -Kyos miro a Killian
-le dije que lo sabría a sus 19 años, no creí que pudiera comenzar antes el cambio, ni mucho menos que soportará unos cuantos minutos en el primer lapso
-pude verlo en sus ojos, es ella- Kyos paso una mano por su cabello, mientras Killian cargaba a Nirvana
-lo se, lo siento en ella, en mi- Killian activo el ascensor secreto para que nadie los viera salir y se armara un escándalo por ver a Nirvana desmayada
-como crees que se lo tome? -Killian miro a Nirvana, podía saber a la perfección como se lo tomara pero aún así había posibilidades de que actuara de otra manera a la que espera
-se lo tomara bien, pero no se como actuara en ese momento, podría golpearme o simplemente sonreír-llegaron al auto, uno de los guardias al ver a Nirvana miro a Killian- ella está bien solo esta en primera fase -el asintió, a pesar de que ella podía ser una asesina a sangre fría y fuera considerada un ser sin corazón, lo tenía
-una cosa más antes de que se vaya - Killian miro a Kyos quien lucia pensativo - ¿usted movió el cuerpo de mi madre?, pues como dije antes cuando llegue al lugar solo el cuerpo del cerdo estaba allí
-nosotros no volvimos a ese lugar después de ese día- con eso cerro la puerta del auto poniéndose este en marcha, ahora era Killian el que tenía duda en su cabeza, si ni Kyos ni el movieron el cuerpo ¿donde está?
