De vuelta a Eos y la llegada a Altissia

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No tardaron en regresar a Eos, y Nadia seguía mirando a la pequeña bebe. Era el único legado del reino, y como tal, tenía que protegerla. Convertirse en su madre.
Le cogía de la manita, y la bebe la agarraba con fuerza mientras sonreía. Le encantaba ver aquella inocencia en la cara de la bebé. Es como si no hubiera ninguna preocupación. Pero si que la había.  Y ahora más que nunca. 

Habían vuelto a Eos, donde allí les esperaba el yate que habían conseguido reparar. Y Nadia tenía claro que quería ir con ellos, pero cargando ahora con una débil criatura como lo era Sindria no era lo mejor idea. Noctis tardó mucho en convencer a la chica de que se quedará allí con Iris, la hermana de Gladio. Pero al final accedió. Si, el príncipe tenía razón. Tenia que cuidar de la pequeña Sindria. O si no se quedaría sola.

Antes de partir, le deseó mucha suerte a todos, en especial a Noctis. Trató de decirle lo que sentía pero sabía que no era correcto. No sabiendo que se iba a encontrar con su futura esposa Lunafreya. Se mantuvo callada y le hizo prometer que volvería pronto o ella misma iría a buscarlos. Noctis asintió hacia esa petición y se subió al yate, donde Prompto, Ignis y Gladio ya estaban. 

Nadia - ¡Tened mucho cuidado chicos! 

Noctis - Descuida.

Talcott - ¡Majestad, vuelve pronto! ¡Necesitamos un rey!

Noctis - ¡Vale!

Y con esas últimas palabras, abandonaron Eos rumbo a Altissia con Nadia mirando como el yate se iba alejando cada vez más de ella. Con la bebé en brazos, se llevó la mano al pecho y suspiró rezando a los dioses que los protegieran. 

El grupo llega a Altissia, una ciudad hermosa que marcará las tragedias que le seguirán. Allí el grupo podrá hablar con Gentiana, verán el vestido de la boda con el que Luna se iba a casar y esto le traerá viejos recuerdos a Noctis de su prometida, y conocerán a la ministra de Accordo. Conocerán entonces que Luna estará con ellos y que el Imperio pide que se la entregue, pero la ministra no ve que ganara con eso y pide que el príncipe Noctis se reúna con ella para formular una contra oferta que la convenga. Pero eso es algo que ya harían al siguiente ya que el grupo está cansado.

De vuelta en Eos, Nadia siente que algo malo está por ocurrir y en secreto, le pide a Iris que se encargue de cuidar a Sindria, que ella tiene que poder hacer algo. Iris duda pues el propio Noctis le pidió que vigilara a Nadia, pero esta la convence asegurandole que si no va, no podrá evitar el desastre que se iba a cometer. Entonces, despidiéndose de la bebé con un tierno beso, espera a que el sol apareciera del mar y se subió a su nave cargada de provisiones esperando llegar a tiempo para evitar que a sus amigos les pasara algo terrible. 

Mientras esto pasaba, allí en Altissia ya había amanecido y Noctis se había reunido con la ministra de Accordo para el pacto entre ambos pueblos. Noctis aseguró que ayudaría en todo lo que pudiera a la evacuación de ciudadanos para que se llevara acabo el pacto entre Leviatán y él, pero que a partir de ahí el pueblo de Altissia se lavaría las manos, algo que Noctis entendió. Además, tendrían que enfrentarse al Imperio ellos solos. 

Aceptadas las condiciones, Noctis lo comunica a sus compañeros y estos planean el plan de ataque y como distraerán al Imperio para que Noctis reciba el poder de Leviatán evitando también que estos atrapen a la bestia. 

Noctis llega a donde Luna está dando un discurso, avisando al pueblo de Altissia que siendo el Oráculo tiene que invocar a Leviatán para destruir a la oscuridad y que la luz vuelva a brillar. 

En esos momentos el Imperio llega a Altissia queriendo detener a Leviatán. Mientras Noctis intenta llegar donde Luna, Prompto, Ignis y Gladio evacuan a los ciudadanos mientras detienen al imperio. Luna realiza el pacto con Leviatán y empieza la lucha entre el príncipe Noctis y el sidéreo. Sin embargo, Leviatán es más fuerte que Noctis y consigue derrumbarlo fácilmente. En ese momento, sucede algo que el príncipe no esperaba. 

Ardyn se acerca a Lunafreya y la apuñala provocando una herida casi mortal, y cuando lo hace, se va en una de las naves del imperio. Leviatán sigue atacando a Noctis y Luna hace el llamado de todas las armas que Noctis ha conseguido incluida el tridente que ella misma llevaba para vencer a Leviatán. Y lo consigue.

Pero cuando Noctis consigue despertar de la dura batalla, no solo se da cuenta de que Ignis ha sido herido y ya no puede ver, sino que además Luna ha fallecido y en sus manos se encuentra con el Sello del rey. 

Cuando Nadia llegó, Altissia estaba prácticamente destruida y no pudo hacer mucho por sus amigos. Nada más que ayudó a unos cuantos ciudadanos a evacuar de allí, y se enfrentó a varios hombres del Imperio, que le dejaron una herida en su brazo izquierdo, que le vendó Prompto cuando consiguió reunirse con todos. 

Trató de hablar con Noctis, pero sabía que ahora no podría hacer nada por él e Ignis le decía que tampoco insistiera, que necesitaba tiempo para asimilarlo.

Nadia - Si tan solo hubiera llegado antes... Quizá todo sería diferente. 

La historia de la princesa caída (Final Fantasy XV)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora