Operación princesa

Capitulo 43: misterio resuelto

A la mañana siguiente me desperté muy temprano, a pesar de que era sábado no me importo, incluso me desperté antes que Lía y Bia llegaran a mi habitación.
— Buenos días — dije al bajar al comedor, el único que estaba  allí era Gideon quien también se había levantado temprano para continuar con la organización de la fiesta.
— estás bien? — me preguntó Gideon
— si, por que? — pregunte con inocencia.
— porque al parecer te caíste de la cama — dijo en son de burla
— muy gracioso, mejor dime, cómo va lo de la fiesta?
— el payaso ya está listo..
— serás tú? — pregunte para desquitarme.
— jaja creo que en serio el golpe te afectó — dijo poniendo cara de preocupación.
— solo continúa — dije con disgusto fingido.
— Jeremy se encargara de ir a recoger a los niños, la Señora Rothermayer preparará los bocadillos y el Chef el pastel, alguien ayudará con la decoración, también los obsequios están listos y Elena vendrá a ayudar con el protocolo, luego, yo daré las palabras de bienvenida, y tú las de despedida así que procura venir lo antes posible.
— y qué hay con mi abuelo?
— el Rey estará fuera todo el día, así que tenemos todo el castillo para nosotros, y por salir con Lucas, ya me encargué de eso también.
— solo lo diré una vez — dije — creo que tengo al mejor novio.
— gracias, pero eso ya lo sabía — dijo riendo.
— eres un narcisista — me queje.
— Isabella? A sucedido algo? — preguntó mi abuelo en cuanto llegó al comedor.
— tu también? Acaso no puedo levantarme temprano? — me queje.
— en sábado? No lo creo, es más creo que la última vez que desayunaste un sábado con nosotros fue el primer sábado cuando llegaste— dijo mi abuelo, Gideon rio por lo bajo.
— solo hay que comer — dije, ahora mi abuelo y Gideon reían... Era sin duda agradable ver a ambos de esa forma, olvidando sus cargos y comportándose como personas comunes...
Después de desayunar fui a terminar de arreglarme y cuando estuve lista fui al estacionamiento donde Emet me estaría esperando.
—buenos días Emet — dije con una sonrisa.
— Buenos días princesa — respondió abriendo la puerta, luego de subirme al auto, Emeterio manejo hasta el apartamento de Lucas. Emeterio se bajó del auto y fue a tocar a la puerta, luego de un momento Luke salió, luego volvió a entrar y Emet subió al auto de nuevo.
— el príncipe Lucas estará aquí en un momento — dijo, yo negué.
— Emet, sabes que las formalidades no son necesarias con nosotros, somos amigos, o no? — pregunte, Emet me miro por el retrovisor y sonrió.
— claro, es solo que aún no me acostumbro — espetó con una sonrisa tímida.
Buenos días — Lucas me saludo como acostumbraba, con un beso en la mejilla y una un apretón de mejillas.
— buenos días su majestad — dije en son de broma a lo que Luke y Emet rieron... Ya llevamos un rato en el auto.
— este no es el camino — dije con preocupación pensando us se hubieran confundido.
— Pasaremos primero a otro lugar — respondió Luke.
— cuando lleguemos allí, nos cambiaremos a otro auto, no podemos salir de Canterbury con un auto de palacio sin que la prensa o el Rey se den cuenta — respondió Emet, yo asentí, creo que aún habían muchas cosas que debía aprender. Primero salió el auto de palacio y luego Emet condujo a la salida... ya Emet llevaba un rato manejando, ya comenzaba a reconocer las cosas, si, solo había venido una vez pero algunas cosas como esa tienda vintage de la derecha son difíciles de olvidar.
— ya has tomado una decisión? — preguntó Lucas, yo le miré y acenti.
— voy a quedarme — dije sin más.
— Isabella, tus padres te protegían por algo, estás segura? — preguntó Lucas un poco preocupado.
— um! — respondí —me he dado cuenta que mi decisión no afecta solo mi vida, Canterbury, mi abuelo, Gideon, tu y tu reino, todos somos afectados, y prefiero controlar las cosas, si me voy dejo todo a su suerte, si me quedo puedo seguir cambiando las cosas, tratar de dirigirlas por el camino correcto, ademas si me voy solo sería una cobarde — dije, Emet me miro por el retrovisor y sonrió, Lucas por su parte se quedó callado, sabía que talvez no estaba de acuerdo pero también sabía que iba a apoyarme...

Narra Gideon

Este tipo era insoportable, como príncipe tube que aprender a llevarme bien con todos, pero con Jeremy era imposible.
— Porque están moviendo la carpa?— le pregunte al encargado de montar todo.
— Señor, eh, el príncipe Jeremy nos a pedido que lo hagamos. — el señor respondió nervioso
— por favor, déjenla a donde esta.
— pero
— yo hablaré con Jeremy — respondí, el señor asentio antes de dar la orden de ya no mover la carpa.
— se supone que yo me encargaría de los preparativos del castillo y tú de la comida y recoger a los niños — le reclame a Jeremy en cuanto lo vi.
— y es lo que he echo — respondió.
— si, eso y dar órdenes que no te corresponden.
— lo dices por la carpa? — preguntó de lo más tranquilo.
— por la carpa, por las mesas y los globos.
— es solo que no se veían bien así.
— y eso es que, yo soy el encargado, yo decido eso y se no te gusta a ti no me interesa, no entiendes? esto es para los niños no para ti. — debo admitir que estaba
— Pero que sucede con ustedes, son las diez y las cosas no están listas, a cambio los encuentro discutiendo — Elena apareció enfrente de nosotros — lo siento, soy Elena. — dijo saludando a Jeremy.
— Jeremy, príncipe de Avon — Jeremy hizo una reverencia con su cabeza.
— ahora si, creo que debí haber venido más temprano, Isabella me lo pidió, pero confié demasiado en ustedes, son príncipes, le dije, no creo que se meta en problemas, pero me equivoqué. Ahora es mejor que se pongan a trabajar, no quiero que mi amiga o aún peor, los niños vengan y todo este a medio montar — dijo, Jeremy y yo asentimos por inercia y nos movimos a hacer lo que nos correspondía. Creo que Isabella había dejado a cargo a la persona correcta, si Elena no hubiera llegado, Jeremy y yo aún estuviéramos discutiendo.