Una Vida Sin Ti

Capítulo 10

Debían ser las diez de la mañana cuando Dan se dirigió hacia el hospital para consultarle a Abril algunas cosas. Se encontraba nervioso, todo su cuerpo estaba en tensión, lo cierto es que no había dormido bien esa noche. No podía quitarse de la cabeza lo que había sucedido ayer durante la entrevista en BlackDiamond por esa razón había decido hablar con Abril primero. A demás temía la reacción de Sophie.

Hola Abril, tengo que contarte algo muy importante y me tienes que guardar el secreto hasta que esté preparado. − le dijo Dan con voz dura. − Verás, eres la primera que lo va a saber. Ni siquiera se lo he dicho a Sophie aún, me da un poco de miedo decirlo en voz alta, si te soy sincero ya que tengo la sensación de que una vez se sepa será más real y hay ciertas reacciones que me gustaría evitar.

Pero, aun así, no tiene sentido guardármelo por mucho más tiempo así que allá va, ayer fui a una reunión con una alta ejecutiva de una empresa muy famosa, te hablé de ella alguna que otra vez, pero tampoco espero que lo recuerdes ya que fue algo puntual. Se ve que me llamaron porque quieren contratarme, ¿te lo puedes creer? Es de locos, yo aún estoy intentando asimilarlo, hasta ahí es la primera buena noticia en mucho tiempo.
Es cierto que ahora mismo no me puedo quejar de mi situación laboral, pero no es un trabajo fijo. Quizás ahora estoy en lo alto, pero nunca se sabe cuándo puedes caer, es lo malo de este mundillo. Lo que me dan en Instagram y alguna de las campañas está bastante bien, pero realmente me gustaría poder sentar la cabeza, tener mi propio puesto y la comodidad que eso supone, y esta es la oportunidad perfecta.

Cuando me lo dijeron sentí que por primera vez en cuatro meses la suerte me sonreía, todos eran pros, pero no todo es perfecto. Hay ciertos aspectos del contrato que me dieron que me echan hacia atrás y Abril, sé que te gustaría que siguiera hacia delante, pero tú eres parte de mi vida y no puedo dejarte simplemente atrás. Digo esto, porque la señora Brown, la ejecutiva con la que me vi, me dio un ultimátum. Tengo que darle una respuesta como muy tarde dentro de un mes y no sé qué hacer.

Con todos los nervios, se me ha olvidado contarte que aceptar el trabajo supondría mudarme a Londres, lo cual implicaría dejarte aquí y no quiero. Ni siquiera lo haría si estuvieses despierta.

Pero por otro lado, me da mucho miedo dejar pasar la oportunidad, ¿y si no se presenta ninguna otra como esta? Abril, necesito que me digas que es lo que debería hacer, necesito saber que estoy haciendo lo correcto y ahora mismo mi cabeza está hecha un lío.

No quiero dejaros aquí a ninguno, ni a ti ni a Alex ni a mis padres y pensar en lo que puede pasarnos a Sophie y a mí cuando se lo cuente me aterroriza. ¿Debería o no aceptarlo? Ayúdame por favor.

Pero como era de esperar Dan no consiguió su respuesta. Permaneció sentado junto al catre donde yacía Abril durante horas esperando alguna señal, como que moviera los dedos o que de pronto abriera los ojos, pero nada sucedió.

Así pues, abatido se convenció de que debían ser otros quienes lo ayudaran a tomar la decisión que cambiaría su vida de una forma u otra y eso era lo que les había llevado a Gregor, Karina, Alex y Sophie a aquel restaurante.

Cuando Dan salió del hospital, cogió su teléfono y mandó el mismo mensaje a todos: Tengo algo muy importante que anunciar. ¿Esta noche podéis venir al restaurante de siempre?

Después de eso, estuvo todo el día haciendo recados estúpidos para mantener su cabeza ocupada, pues antes de ir a hablar con Abril había ensayado ya frente al espejo como se lo contaría a los demás. Y aunque había probado un centenar de formas, ninguna le parecía la adecuada, puesto que no quería herir a nadie.