Wild Life - Vida Salvaje

Es el Viaje I

¡Hola! Muchísimas gracias por todos sus comentarios, realmente me alegra muchísimo que estén disfrutando tanto esta historia Noemed89, ElizabetHernande381, RebeFernande5, CandyBlandon, kari890212, MaryPlaza8, vanne-94, MagnusNoizLightwood, MaraGilMartnez, ElGatoDeAlicia, DaianaVelazquez, EugeniaJimenez, 1262004agustina, JennyR-73, Sade_67 BiancaCarrillo1, crisalecbloom, Mkijud, _mffpk_, Stereklovers, CarolinaMedina503, naney7, Rosewood84, laurac0330 💜💛💜🛣

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Muchas gracias también a quienes leyeron y dejan sus votos 💜💙💜🛣

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Bueno, la historia en si es de pocos capítulos, apenas unos 4. Sin embargo, como les había dicho, los he dividido en dos debido a su extensión. Así que comenzamos con la primera parte del segundo capítulo.

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Resumen: Lo importante es el viaje, no el destino. Y si uno realmente quiere conocer a otra persona, debería viajar con ese alguien.

La aventura de Malec continúa...

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Contrario a la creencia popular, Alec Lightwood no era un presuntuoso. Tampoco era tímido. Simplemente no le gustaban las conversaciones triviales. No es que quisiera hablar de cosas serias todo el tiempo. Era capaz de hablar de las cosas más mundanas, tenía sentido del humor. Y había participado en conversaciones serias y tontas. Simplemente no con todo el mundo. Una vez tuvo una conversación de una hora con su hermano adoptivo, Jace, sobre cuántas patas de insecto se permitían en una tableta de chocolate.

Al crecer, había sido etiquetado como el 'callado' o 'melancólico' porque prefería sentarse en una esquina con un buen libro, o entretener a los perros y gatos en lugar de participar en conversaciones grupales, especialmente con personas a las que no conocía o era cercano. Él no era parlanchín. Al menos no con extraños. Sus hermanos y amigos cercanos eran otro asunto.

Él nunca fue el centro de atención. Y estaba bien con ello. Nunca lo había anhelado. Estaba bastante contento de estar sentado en la parte posterior de la sala, viendo cómo se desarrollaban las cosas.

Sólo se involucraba cuando encontraba interesante un tema o una persona. O si tenía algo que valiera la pena decir.

La mayor parte del tiempo era muy reservado. Su círculo de amigos era muy pequeño. Y consistía principalmente en sus hermanos y unas pocas personas muy selectas. E incluso los había conocido a través de sus hermanos. No era de los que buscaban nuevos amigos, ni socializaban.

Iba a citas, sí. Cuando aparecía un tipo interesante. Eso era muy raro y nada serio había salido de ahí. De alguna manera, Alec estaba bien con ello. Nunca se había enamorado, tampoco había encontrado a nadie quien pensara fuera suficiente para pasar el resto de su vida. Estaba contento con las relaciones (no románticas) que tenía ahora. Incluso si se trataba de un pequeño número de personas. Por eso nunca le importó viajar solo.

Por lo tanto, no era común en él recoger autostopistas. Y mucho menos, quedarse con uno y pasar la noche en la misma cama. O invitar a dicho autostopista a lo que de otra manera sería un largo viaje a Los Ángeles. Incluso se sorprendió a sí mismo con esa decisión. Y hasta ahora, estaba demostrando ser una muy buena decisión.