Capitulo 1

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Cuando Harry se fue a dormir al final de aquel día, deseó con todo su corazón que al despertar cayera en la cuenta de que todo esto había sido un sueño. Pensó que si lo deseaba con la suficiente fuerza, quizás la autora de su libro lo escucharía y le haría sus sueños realidad.

Aunque Summer le aconsejó que no se esperanzara mucho, que por su experiencia podía decir que las autoras se caracterizaban por ser crueles.

Al despertarse al día siguiente, convencido de estar, a estas alturas, preparado para todo, se tragó sus propias palabras al bajar para encontrarse con una orda de pelirrojas, hablando en todos los tonos y mirando a Ginny con desprecio.

Harry se sorprendió al ver, poco después, que varias de las chicas no solo despreciaban a Ginny (aunque parecía ser la más odiada) si no también al resto de los Weasley.

Ginny, agobiada por tanto odio repentino, había decidido alejarse un poco de la multitud. Los gemelos, por el contrario, intentaban hablar con las pelirrojas. El señor y la señora Weasley no se veían por ninguna parte, mientras que Ron se encontraba nuevamente en una esquina discutiendo con Hermione.

Harry se acercó a sus amigos, dando por sentado que discutir sobre la situación antes de actuar sería su nueva rutina mientras Dumbledore decidiera continuar trayendo chicas de otras dimensiones.

— ¿Y estas quiénes son?— preguntó Harry acercandose a sus amigos.

— Weasleys— respondió Hermione— Mellizas de Ginny, Mellizas Ron... Pero todas son Weasley.

— Bueno ¿Qué estamos esperando? Hagamos ese círculo, escuchemos quiénes son y si sus historias no tienen sentido, que se vayan. — replicó Ron, visiblemente molesto.

Hermione frunció el ceño. Hasta unos momentos, el pelirrojo estaba de perfecto humor.

— Eso queríamos hacer pero Dumbledore no aparece por ninguna parte. — contestó Hermione, confundida— Ya te lo he dicho, Ron.

— Vale.— dijo el Weasley dándose media vuelta.

— ¿A dónde vas?— quiso saber Harry.

— A hablar con mis hermanas, claramente. — respondió este mientras se alejaba.

— ¿Y a este que le picó?— le preguntó Harry a Hermione.

La chica se encogió de hombros y se hizo un silencio entre los dos amigos. Silencio que no tardó mucho en ser interrumpido por el carraspeó de Dumbledore, el cual se había vuelto a subir al escenario.

Su voz, amplificada por la magia, sonó fuerte y clara por toda la sala.

— Quiero darle la más cordial bienvenida a nuestras invitadas. Quienes pueden estar un poco confundidas sobre por qué están aquí... Pero no es momento de resolver esas dudas. Molly, Arthur, todas las maravillosas chicas que ven aquí, son sus hijas. Las octavas Weasley.

~~~

Luego de que Molly le dijera un par de palabras no demasiado amistosas a Dumbledore, propuso lo mismo que el primer día; Que las chicas se presentaran.

La diferencia es que esta vez, todos los Weasley estaban curiosos por saber quiénes eran aquellas chicas que decían ser sus hermanas pérdidas.

Leo y George habían hecho una apuesta sobre la cantidad de chicas huecas que habría allí. Los dos se habían hecho casi inseparables desde que los recuerdos de George habían llenado su cabeza, lo que solamente había logrado que Fred se preguntara por qué Summer no le devolvía los suyos.

Harry Potter Y El Cliché Interdimensional (sin editar)Where stories live. Discover now