Principalmente, tú

Capítulo 14.

Kristel.

-Kristel despierta -la dulce voz de mi madre me despierta -baja a desayunar amor, hice tu desayuno favorito -ella me sonríe desde la puerta.

-De acuerdo mama, ya bajo -medio sonrío y me volteo volviéndome a dormir, escucho la puerta cerrarse y miro el resplendor de mi ventana. Escucho melodías de los mañaneros pájaros, me levanto de mi cama entre varias cómodas sabanas y voy al baño.

   ~ º  ~

Estoy en el comedor con mi familia, doy varios bocados a mi desayuno. A pesar de estar escuchando anécdotas, chistes y temas de mis padres mi mente sigue en Maikol. Incluso me siento masoquista por seguir amándolo pero no se deja de amar a alguien de un día a otro, es absurdo.

El nunca busca hacer sentir mal a las personas y es algo que le admiro, o anteriormente... No lo se. Estoy confundida, decepcionada, melancólica. Solo con pensar lo que dijo anoche Megan. 

-¿Por que sera tan difícil? -susurro para mi y doy un trago a mi jugo.

-¿Que sucede Kris? -mi padre se preocupa. Le parpadeo inconscientemente sin saber que dijo. 

 –Disculpa papa, ¿que decías? -mi mirada es perdida.

-Cariño les estoy hablando acerca de una oferta del trabajo y veo que estas en otra órbita. ¿Todo bien?

-¡Oh! -reacciono y trato de disimular - ay! a veces suelo indagar en mi mente y me olvido de las cosas -río incomoda. Mi padre me mira extrañado y asiente.

Termino de comer y me retiro de la mesa hacia al baño a darme una ducha. Si que la necesito. Me doy un baño refrescante para despejar mi mente pero no lo logro. Maikol llega a mi mente cada momento, cada segundo.

 No sé qué hacer... Me siento mal al esperar todo este tiempo por verlo y aquí estoy, pero exasperada, dudosa, confundida, por la chica de anoche, por Megan. ¿Confío en Maikol? ¿le doy una oportunidad para que me explique? ¿lo ignoro?, no lo sé. Que frustrante.

En las novelas que veía con mi mama en la adolescencia recuerdo que siempre había una chica fácil que se le lanzaba encima al chico, y este a la final acepta, después de dejarla, la chica no acepto y termino echándole la culpa al tipo. Bueno, era una novela, esto es vida real. Aunque puede que esto le haya pasado a Maikol, bueno no sé, pero Megan con ese short corto deja los pensamientos abiertos a los hombres. Tal vez sí.

Salgo del baño y me dirijo a mi habitación. Me coloco unos vaqueros cortos mom con flores bordadas en los laterales y desgastados en la parte frontal con un top de bordado con nudo en la parte delantera. Me trenzo mi cabello largo pelirrojo, color zanahoria. Me miro en mi espejo grande, y respiro para relajarme.

Hoy saldré a hacerle un tour a Sonia en mi histórico país, España. Quede en buscarla, así que bajo las escaleras y cojo las llaves del coche. Cierro la puerta de la casa y camino por el jardín, levanto la mirada quedando casi en shock.

-¿Qué hace el aquí? -digo para mi. Me impresiono. Veo a mis padres hablando con Maikol afuera de la casa, en la entrada del jardín. Me molesta verlo acá, saber que esta en mi casa y sin avisar es irónico, sin embargo... Se ve realmente guapo, su camisa neutra muestra sus músculos. Verlo parado hablando con mis padres, riéndose, supongo que de los mas chistes de mi papa. Típico. Como sea, es muy tierno ver esa sonrisa contagiosa y perfecta.

-Cariño, Maikol vino a hablar contigo - mi madre me dice, todos voltean a verme.

-No puedo ahora, saldré –me irrito y los ignoro, sigo caminando y paso a un lado de Maikol y abro la puerta del coche.